sábado, 11 de febrero de 2023

Visto en las redes 53#

 ¡Hola a todos!

¿Cómo va todo? Yo no me puedo quejar, pues estoy leyendo bastante y lo cierto es que no han sido malas lecturas. ¿Vosotros habéis empezado bien el año?

Como llevo haciendo desde hace un par de meses, ya vuelvo a estar aquí con un Visto en las redes. Para los que no lo sepan, esta sección me gusta mucho porque da pie a muchos debates, (aunque no os veo muy por la labor de debatir). Espero que la disfrutéis y que podamos comentar un montón de temas interesantes. ¡No os olvidéis de comentar todo aquello con lo que estéis o no de acuerdo!

Eso sí, antes de nada, empezaré explicando en qué consiste la sección para aquellos que aún no lo sepan. Ya sé que estos párrafos que vienen a continuación son muy repetitivos, pero siempre hay gente nueva que no sabe en qué consiste la sección y me gusta informar de ello. Visto en las redes es una recopilación de todos aquellos tweets que me han parecido interesantes (y a los que he dado retweet) publicados este último mes (enero) por diversas personas, y una selección de las reflexiones relacionadas con el mundo literario que he compartido por las diferentes redes sociales. Es decir que... ¡atención, porque podríais salir mencionados en esta entrada! 

Me decidí a crear esta sección como excusa para hacer debates porque sé que algunos de vosotros no me seguís en las redes sociales tranquilos, estáis en la lista negra (tanto porque no os interesa como porque no tenéis una cuenta) y pensé que os podría parecer interesante tener una recopilación de esta información. Así, todos los que no tenéis redes podrías estar al tanto y los que me seguís, pero estáis saturados, podríais tener un resumen. 

Como sabéis, el blog está en varias redes: en Twitter, en Facebook, en Instagram, en The Storygraph, en Goodreads y en Bloguers (podéis acceder a mi perfil de cada red social haciendo click en los enlaces), pero estoy especialmente activa en Twitter, Instagram y Facebook, por lo que en esta sección me centraré en esas redes sociales. 

Repito, como en cada ocasión, que la idea de esta sección no es completamente mía (siempre hay que dar créditos). Me inspiré en una sección muy parecida en el blog de Deja volar tu imaginación llamada Citando a Twitter. En ella, Patt recopilaba algunos de sus retweets favoritos, aunque siempre están relacionados con reflexiones sobre el mundo en general, no centradas en el ámbito literario. 

Y sin más dilación, os dejo con la entrada:

Visto en Facebook

No me esperaba el giro dramático a mitad de la historia. Roshael Arns nos narra su emoción cuando se dio cuenta de que su hija había heredado su pasión por los libros, así como su decepción cuando no quería leer sus recomendaciones, en parte porque no tenía la madurez para ello. Por eso, escribió mensajes para ella en sus libros, para que los leyera en el futuro. Pero entonces, un incendio lo destruyó todo.  ¿Os podéis hacer a la idea de lo que debe ser experimentar algo así? No es solo por el dinero que ha costado la colección o el tiempo invertido en escribir en esos libros, es porque pierdes una parte de ti mismo. ¿Qué haríais vosotros en su lugar? ¿Seríais capaces de comprar libros de nuevo? ¿Los mismos o unos distintos? En mi caso, creo que sí, pero me costaría mucho levantar cabeza.

Puede parecer falso, pero For Reading Addicts añade el enlace de Amazon al libro. Me encanta cuando el autor bromea con el lector. En este caso, su justificación para que los diálogos de los personajes estén escritos imitando el irlandés oral resulta muy divertida.

Os recomiendo mucho darle un vistazo a esta edición 75 aniversario de La historia interminable que nos comparte The Folio Society No solo me gusta que tenga una cajita, sino que incorpora ilustraciones muy bonitas y han tratado que la edición fuera tal y como se describe en el libro.

Qué mono que este chico escribiera a Eloy Moreno para expresarle lo mucho que le había gustado el libro. También es curiosa esa percepción que tiene de que todos los escritores están muertos. A mí no me suena que tuviera esa impresión en mi infancia, pero sí que los autores eran figuras de autoridad muy inaccesibles, sin importar el prestigio real que tuvieran.

Visto en Twitter

Eso a lo que se refiere Vale Ivs Percy Jackson es a esa sensación de querer terminar un libro y al mismo tiempo querer seguir leyendo. Me pasa siempre con mis favoritos, que no quiero que la historia termine nunca, en gran medida porque sé que me costará mucho encontrar algo tan bueno. Como decía, me ha pasado hace poco con La princesa prometida, hasta el punto de que me he leído todos los prólogos de ediciones coleccionista habidos y por haber, e incluso un epílogo en inglés. ¿Cuál ha sido la última lectura con la que os habéis sentido así?

Muy de acuerdo con Marta Cuchelo sobre las críticas que reciben los libros publicados en Wattpad. Una obra publicada en esa plataforma no ha sido revisada, no solo ortográficamente, sino también a nivel argumental. Ahí los autores escriben sobre la marcha. Es por eso que no me parece bien valorar esos libros en GR, pues si en algún momento el autor decide publicar la obra, aquellos que lean las valoraciones no podrán distinguir qué comentarios se refieren al libro sin pulir, a no ser que se fijen en la fecha de publicación. Eso me pasó con Seré frágil, de Beatriz Esteban, pues yo leí una publicación anterior, cuando el libro aún estaba sin pulir (como podéis leer en los comentarios). 

Estoy muy de acuerdo con Mercedes, y poco puedo añadir a mi comentario. Una vez hube trabajado como librera, quedé muy desengañada con la idealización del trabajo. Como comento, dedicaba mucho tiempo a estar en caja, colocar cosas o responder a pedidos. Pensaba que sería algo mucho más apacible y que charlaría sobre libros, pero no fue así en absoluto. Ojo, guardo un buen recuerdo de la experiencia, y no me importaría repetir, pero sí recuerdo que terminaba agotada y, aunque me ofrecieron quedarme, preferí explorar otros campos. Supongo que todo depende del sitio. Pese a que no era una librería muy grande, sí que era muy céntrica y tenía mucha afluencia. Supongo que en un pueblo sería distinto.

Estas quejas de Marta Cuchelo sobre la edición española de Ciudad Medialuna me dejaron de piedra y hacen que me replanteé el valor de los libros traducidos. ¿Hasta qué punto puedo quejarme de una obra o darle mérito si no sé hasta qué punto han intervenido o traductor o el editor? No se me hubiera pasado nunca por la cabeza que la editorial pudiera decidir eliminar en mapa o las florituras de los capítulos, y todo eso, por el mismo precio, no, el doble de lo que cuesta el original. Es una tomadura de pelo.
Aunque es algo larga, me gustó mucho esta reflexión de Alex Divaro. De cada vez abundan más los libros escritos con capítulos y párrafos breves, donde la acción es constante. Ojo, no quiero decir que antes el público general leyera La insoportable levedad del ser, pero sí leían Orgullo y prejuicio, una obra que, para las sensibilidades actuales, tiene un ritmo demasiado lento.  Es cierto que ahora muchas descripciones son innecesarias, pues ya tenemos una imagen mental de ello, gracias a Internet, pero eso no significa que las descripciones no puedan aportar cosas. Lo que más me ha impresionado es el párrafo final. Hoy en día todo el mundo quiere ser escritor, pero no para compartir su visión del mundo, sino para conseguir prestigio y reconocimiento. ¿Que para ello tienes que pasar por el aro y escribir lo que quiere el público? Por desgracia, muchos lo hacen. La sociedad está cambiando y este es el rumbo que está tomando, para bien y para mal.

Escribir no es fácil ni nunca lo ha sido. Por una parte, como indica Marta Cuchelo, está el tema de conciliar la vida laboral (el trabajo de verdad) y personal (tener vida social, cuidar de familiares o hijos)con un hobby como es la escritura. Sí, un hobby, porque lo haces por placer, porque sabes que es prácticamente imposible vivir de ello. Pero no es solo eso. Ahora escribir no es lo único que hace el autor: también se encarga de la promoción de la obra, de editarla, de venderla a una editorial, de estar en contacto con sus lectores,... Lo mínimo que podemos hacer como lectores es no exigir. Si un autor no dispone de tiempo o motivación, prefiero esperar a que se sienta preparado que no leer una porquería. Y con esa mentalidad, ya llevo 12 años esperando a que Rothfuss saque su tercera novela.

Esta lucha mental que representa Ja es la que transcurre en mi mente cada vez que voy a una librería. Tengo que ahorrar y ya dispongo de muchos libros en casa, pero por otra parte, quizás nunca más vuelva a encontrar ese libro a ese precio... Normalmente, caigo en la tentación. ¿Y vosotros? 

Esto es algo que ya os he enseñado en otras ocasiones, pero es que sigo en una diatriba interna. Estos libros que nos enseña Magia de lectores, estas obras artísticas, mejor dicho me parecen preciosas, pero por otra parte, implica estropear un libro. En la mayoría de casos se trata de enciclopedias que nadie va a leer y que solo sirven para pasta de papel o de libros con muchas copias que nadie echará en falta, pero ¿hasta qué punto eso justifica su destrucción?

Estoy muy de acuerdo con esa crítica de Karina. ¿Cómo fue vuestra adolescencia? Porque la mía fue muy tranquila. Eso sí, siempre sentí que me perdía algo, pues no era tan alocada como en la mayoría de obras de ficción, y todo el mundo me decía que tenía que aprovechar que era joven, porque así tendría cosas que contar, porque si lo dejaba pasar, no podría experimentarlo nunca. Las expectativas fue lo que me motivó a ir a alguna fiesta, pero lo hacía más como experimento social que por verdadero interés. Nunca me gustaron y, aún así, sigo con esa carencia que me han inculcado los libros que he leído.
 
Muy de acuerdo con esta petición de Marta Cuchelo. Piratear libros está mal, pero, ¿piratear un libro que cuesta un 1€ o incluso menos? ¿Libros que están gratis en Wattpad? ¿Por qué quieres aprovecharte de la buena voluntad de la gente de ese modo? Sí, la cultura debería ser de todos, pero eso no significa que deba ser gratis.

Esta crítica de Erin Entrada Kelly no podría ser más acertada. Yo nunca critico a nadie sin conocer su contexto. Es algo clave. Hay personas que critican a un autor por no publicar tan frecuentemente como les gustaría, mientras que otros aplauden a los que  son más constantes. Ni los unos ni los otros están en lo cierto. Hay muchos autores, como comentábamos antes, que tienen hijos, que están enfermos, que tienen que cuidar de la familia, que tienen un trabajo a tiempo completo, que llegan justos a final de mes o que se encuentran en un ambiente tóxico. Quizás durante un tiempo no sea así, pero no todo dura para siempre. Y esto me gustaría también que fuera por aquellos lectores que critican a otros lectores por leer 200 libros al año. ¿No te parece que, si pudieras dedicarte de 24 a 7 a leer, tú también serías capaz? Cada uno dispone del tiempo del que dispone, por lo que si alguien lee tantos libros al año eso no significa que lo haga de forma superficial.

Me parece que Kalyan defiende bien su punto. Pese a todo, su metáfora no funciona. Sí, es indiferente leer a Sanderson a un autopublicado cualquiera si tu objetivo es entretenerte, al igual que es lo mismo usar un Ferrari o un Dacia si tu objetivo es llegar a alguna parte. La diferencia es que si leo a Sanderson, no es solo por entretenimiento, sino porque me aporta un mensaje, una reflexión acerca del mundo que no tienen los autopublicados que solo buscan entretener. Es fácil encontrar gratis obras de entretenimiento, pero no tanto encontrar obras más profundas. De todas formas, los libros digitales no son tan caros y hay una buena red de bibliotecas, como mínimo en España.

Elantris siempre será uno de mis libros favoritos, así como El nombre del viento, pese a que ahora, tras el análisis de G, sé que no son perfectos. El caso es que, como dice C. G. Drews, marcaron un antes y un después en mi vida como lectora. Los mismo sucede con La princesa prometida, un libro que, pese a lo mucho que me gusta, puedo entender por qué no gustaría a otros.

Muy interesante esta pregunta de Anny. Si las películas los llevan, ¿por qué no los libros? Como ya indico más arriba, a mí no me parece bien porque pueden estropearte una historia. Es como si en una novela romántica te avisaran de que el final es triste. ¿Entonces para qué? Ya, por los personajes, pero hay gente a la que eso no le interesa tanto. Si la obra trata cosas como el suicidio, la violación o el asesinato, normalmente se intuye por la sinopsis o el género. Estos temas nunca pueden ser un plot twist, porque entonces sucedería al final y no podría tratarse en profundidad. Además, si empezamos a poner advertencias... ¿dónde establecemos el límite? Siempre habrá alguien aprensivo sobre cualquier cosa. ¿Qué opináis vosotros? ¿Alguna vez os habéis encontrad
o con algo que no esperabais en un libro y os ha hecho abandonar la lectura?


La vida no da, como bien indica C. G. Drews. Es verdad que la lectura no es una carrera... pero también es verdad que vamos a contrarreloj. No podrás leer jamás todos los libros que tienes pendientes. ¿Cuántos conseguirás leer antes de morir o que cambies de gustos literarios? Tengo varios libros en la estantería que sé que si los hubiera leído en otra etapa de mi vida los hubiera disfrutado muchísimo, pero ahora ya es tarde.

Señores, nada que añadir a las palabras de Francisco Nixon. Seguro que todos nos esforzamos en tener nuestra pequeña hucha para comprar libros o sacar tiempo para la lectura.

Visto en Instagram

Me gusta esta foto de Andrés y Susana porque relacionan el libro con los elementos que forman la fotografía. En este caso, al ser un libro histórico ambientado en Ucrania, me parece muy acertado que el fondo sea un mapa.

Esta foto de Omairagtz me parece preciosa. Me gusta mucho el contraste de colores que crea entre ambos libros, los elementos con los que los rodea, que supongo que están relacionados con las obras, así como la guitarra en mitad de la imagen, pues supongo que es un objeto compartido de ambas historias. 


Por supuesto, en esta entrada no podían faltar las fotos de Sueños entre letras. Sin duda es una de mis cuentas favoritas. Me encanta el estilo que tiene y lo bonitos que son todos los elementos que componen sus fotografías, así como los motivos florales que le dan alegría a las fotografías

Me parece que Babel Reader tiene mucho estilo. Me gustan sus composiciones por lo profesionales que parecen. En este caso, ha decidido resaltar los tonos rosas de la portada con muchos elementos de ese color, así como añadir objetos relacionados con la ambientación de la novela. 

Qué melancolía transmite esta imagen de Viajando a otros mundos. El filtro azul, que combina con la portada, así como la sencillez de la composición es perfecto. Además, las flores van también muy acorde con el llanto que se menciona en el título.


Sin duda, Viridiana Ivashkov es una experta en fotografiar a sus gatos. No os podéis hacer a la idea de la paciencia que debe tener para cada foto. Y lo que se debe gastar en recompensas por haber posado. Me encantan ambos imágenes, la primera por esa ambientación tan marinera bien conseguida con la madera y las cuerdas (hace que una se crea que la fotografía ha sido tomada en un barco), y en el caso de la segunda, por lo bien que cuadran cromáticamente las flores con la portada del libro. 

La última imagen que os traigo es de Caos literarioMe parece muy acertado usar tantas notas alrededor del libro, pues la novela se centra mucho en ello. Me parece un gran trabajo haber escrito cosas distintas en cada nota, me pregunto qué dirán y si reproducirán las de la novela.
Y con esto, despido esta entrada. Espero que os haya gustado, que os haya hecho descubrir cuentas interesantes y reflexionar. Yo ya he hablado mucho, por lo que ahora es vuestro turno. Nos leemos en los comentarios.

9 comentarios:

  1. Hola me ha impactado lo del biblioteca reducida a cenizas. Ya no es el costo de los libros sino todo lo que representaban, una pena

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  2. ¡Hola! Hacía mucho que no me pasaba por uno de tus "Visto en redes". Se viene comentario largo jeje...
    1. Me ha conmovido mucho la primera historia. Madre mía, no lo quiero ni pensar, todas esas notas, todos esos recuerdos...
    2. Lo de Eloy Moreno me acuerdo de haberlo visto en su momento y me hizo mucha gracia. Es un autor al que tengo muy pendiente, me apetece leer mucho algo suyo porque no he leído ninguna opinión negativa sobre sus libros, pero al mismo tiempo me da miedo por si no logro disfrutarlos tanto como todo el mundo >_<
    3. Lo de no querer terminar el libro porque no habrá más momentos con esos personajes es muy muy real. Sin ir más lejos me acaba de pasar con el último que leí, Every after summer. Aunque duele también "me satisface" esa sensación porque significa que no he podido disfrutar más esa historia.
    4. Coincido con la reflexión de Alex Divaro. Todo lo que se cuece de forma lenta va a ser mejor que cualquier plato rápido que puedan servirnos. Sabe mejor, siente mejor, permanece más tiempo en nuestro recuerdo... Yo solo le veo ventajas.
    5. Jajajaja no puedo empatizar más con el tuit de Ja. A ver, es obvio que siempre vamos a caer en la tentación, no se puede negar. Aunque siempre hay formas de ahorrar: librerías de segunda mano, bibliotecas...
    6. 100% de acuerdo en lo de la adolescencia. Estoy segura de que muchos quizá sí la vivieron de esa forma, pero personalmente, yo también bastante tranquila.
    7. Respecto a lo de piratear obras... Eso desgraciadamente siempre va a ocurrir y estará presente en nuestras vidas de forma continua. Pero insisto con lo de las bibliotecas, ¿qué hay de malo en ellas? Es cierto que no todas son capaces de ofrecer al público las últimas novedades, pero si buscáis tampoco es tan raro encontrar una que tenga publicaciones muy recientes (si eso es lo que preocupa al lector, claro).
    8. Me quedo sin duda alguna con las fotos de Viridiana. A mí me ganas siempre que haya gatitos de por medio.

    Y con esto me callo ya. ¡Muchas gracias por la entrada, besos!

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    1. ¡Hola, Lurei! Gracias por pasarte por aquí y por tu tocho-comentario :D
      2. Bueno, de Eloy Moreno he leído varios libros y me gustó más su vertiente adulta, con "Lo que se esconde bajo el sofá" y "El regalo". ¡Que no te guste no tiene nada de malo, solo indica que tienes gustos distintos!
      3. No lo conocía, tomo nota.
      7. Eso es porque las bibliotecas de España están bien surtidas, pero me han dicho que en Latinoamérica hay muy poca cosa.
      8. Las fotos de Viry son preciosísimas <3

      Un saludo y gracias por tus palabras,
      Laura.

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  3. Hola! Como siempre es un placer visual leer estas entradas. La primera historia realmente me rompió el corazón no sólo por lo trágico que fue sino porque el padre tenía tan buenas intenciones... :( yo no sabría que hacer si de repente perdiera todos mis libros, con tantos años que llevo coleccionándolos. Me llamó mucho la atención también el tema de la romantización del trabajo en una librería/biblioteca, especialmente porque concuerdo contigo en que uno se la pasa el dia acomodando cajas y surtiendo estantes, casi como trabajar en una tienda de comida. Igual que siempre, me has hecho replantearme muchas cosas que no había pensado antes con el tema de la piratería.
    Muchas gracias por compartir! Un saludo ♥

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    1. Me alegra ver que coincides conmigo en lo de la librería, a mí también me pareció una pena. Y me alegro de haberte hecho reflexionar^^

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  4. Ays, qué pena me ha dado esa biblioteca. No quiero imaginarme pasar por una situación parecida. Esa frase de "no sé si usted es un autor que está vivo o ya se murió" me ha arrancado la sonrisa. Yo tampoco tenía esa impresión cuando era jovencita. Como tú, que eran figuras inaccesibles, imposibles de hablar con ellas. ¡Hasta que conocí a Alberti en el Museo del Prado!
    Y qué bonita esa sensación de querer llegar al final de un libro y al mismo tiempo no querer. Eso pasa cuando estás metida de lleno en la historia y no quieres despedirte de ningún personaje.
    Y yo tenía un poquito idealizado ese trabajo de librera. A ver, como en todo, supongo que hay que trabajar, que sencillo no es. Pero pensaba que había más contacto con el cliente, más hablar sobre libros.
    Y totalmente de acuerdo con la reflexión de Alex Divaro. Y ese deseo de satisfacer al lector está haciendo que la calidad de las obras cada vez sea menor.
    Y totalmente de acuerdo a que no hay que presionar a las autores para que escriban con prisa. Pero Rothfuss y Martin se están pasando...
    Y cuánto cuesta entrar en una librería y no llevarse ningún libro. Yo me resisto no entrando. Es la única manera. Eso y mirar mi torre de pendientes, que no es precisamente chiquitita.
    Sobre lo de la adolescencia, yo a veces también he pensado leyendo algunos libros si es que yo he sido muy rarita, porque esas vidas que te venden tanto en los libros como en las series o en las pelis, yo no la he vivido. Mi adolescencia ha sido muy tranquilita. Lo malo es que hoy en día la juventud la veo más influenciable y copian ese modelo y no sé yo a dónde va a conducir todo esto.
    Y las fotos son, como siempre una absoluta maravilla. ¡Cómo se lo curra la gente!
    Besotes!!!

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    1. Sobre lo de trabajar en una librería, al principio me sorprendió mucho, pero ahora cuando lo pienso bien, tiene sentido. No sé tú, pero yo cuando voy a una librería, interactúo lo mínimo con los dependientes, por lo que tiene sentido que el resto hagan lo mismo. Como dice Mary Blue, es casi como ser cajera de supermercado. Es cierto que si hay mucha afluencia puedes permitirte opinar sobre las elecciones literarias de los clientes, pero pocas veces los compradores te hablan directamente o te piden consejo, y si lo hacen, es porque no tienen ni idea de libros.
      Coincido en que Rothfuss y Martin se están pasando.
      Estoy de acuerdo en lo de que la juventud copia esos modelos de adolescencia que ven en la cultura... y eso es problemático.

      Un saludo y gracias por pasarte^^

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    2. Lo de interactuar en mi caso depende. Hay aquí un par de librerías en las que me resulta imposible relacionarme. Son los típicos en los que entras, compras el libro y punto. Y luego hay otro par que es casi imposible no tirarte media hora hablando. Empiezas hablando de libros y terminas hablando de cualquier cosa. Se les nota que le gusta su trabajo y que disfrutan conociendo al cliente. Y que entres y te den los buenos días con tu nombre ya te da buenas sensaciones. Y en El Corte Inglés, uno de los dependientes es un crack. Tan crack que a veces lo evito, que me resulta imposible resistirme a sus recomendaciones. Así que supongo que todo depende de la experiencia de cada uno.
      Más besotes!!!

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"Sabes que has leído un buen libro cuando al cerrar la tapa después de haber leído la última página te sientes como si hubieras perdido a un amigo." Paul Sweeney