lunes, 25 de marzo de 2019

Viñeta del lector 52#

"Ese momento en el que, tras terminar un libro, miras a tu alrededor y te das cuenta de que todo el mundo está siguiendo con sus vidas...como si tú no acabaras de sufrir un trauma emocional a manos de un libro"

En esta ocasión, vais a tener que disculpar la brevedad de la entrada, pero es que la viñeta que os traigo hoy lo dice todo y seguro que todos habéis pasado por ello alguna vez. Ya os he hablado en alguna que otra ocasión de los libros que me han atrapado hasta tal punto, que luego soy incapaz de abrir ningún otro durante unos días, porque sigo viviendo en el libro anterior. También os he hablado alguna que otra vez de los libros que tienen giros tan inesperados que me han dejado anonadada. Bien. Los libros que se corresponden a esta viñeta son una combinación de ambos.

Me refiero a libros que agarran tu corazón y lo estrujan como si fuera un limón, libros que, al terminarlos, quieres recomendar gritando a los cuatro vientos, pero que al llegar la hora de la verdad, el título escapa de tus labios como un susurro, y hablas de él con voz queda y con reverencia, pues lo que más temes no es que a la otra persona no le guste -sabes que eso no puede pasar- sino que tienes miedo de que el libro la deje tan tocada como a ti. Son libros que hacen que, al cerrar la última página, veas el mundo de forma distinta a cuando lo abriste.

Me he sentido así con varios libros. Uno de ellos fue La ladrona de libros. Estoy convencida de que hoy en día no me impresionaría tanto, pero cuando lo leí tendría unos doce años y me tocó muy hondo, pues era uno de los primeros dramas que leía. Otros que me han dejado con esa sensación han sido  Escapar de Sobibor y La canción secreta del mundo. Y, por qué no, el de Voces de Chernóbil, que lo leí el año pasado.

Uf, el trauma que me causó ese libro. Tras terminarlo, necesité un tiempo de mirar fijamente al infinito, pues no sentía el mundo que me rodeaba como propio. Quedé con mis amigas para animarme un poco y durante un buen rato, parecía que vivía en tercera persona, viendo cómo los demás charlaban, reían y bromeaban, es decir, cómo seguían con sus vidas como si no estuviera pasando nada, mientras yo me derrumbaba por dentro.

Y es que hay libros que dejan marcas indelebles. ¿Cuál es el vuestro?


jueves, 21 de marzo de 2019

Toda la verdad de mis mentiras, de Elísabet Benavent

Hoy os traigo una entrada algo especial, y es que esta reseña no le he escrito yo. Redoble de tambores, dad la bienvenida a la estrella invitada....¡Carme, del blog A la luz de las velas!

No sé si sabéis que no soy de colaborar con editoriales. Con la única con la que colaboro es con Edición Anticipada, y lo hago porque veo que hay pocos compromisos (más allá de reseñar el libro, por supuesto) y que tengo mucha libertad para elegir los libros que quiero leer y tiempo para leerlos. Y aún así, pocas veces pido nada porque no será por libros pendientes que tengo en casa. 

El caso es que el otro día vi que me ofrecían este libro de Benavent y con lo fan que es de la autora  (mucho, mucho [pero no os hacéis a la idea]) Carme no dudé en pedirlo para que lo leyera. Y vaya si le ha encantado, lo ha devorado en menos de una semana. Sin duda, los que sois fans de este género, aquí tenéis un libro más que recomendado.

Desde aquí dar las gracias a Edición Anticipada por el ejemplar, y a Carme por haber escrito una reseña tan magnífica. Por mi parte, os recomiendo encarecidamente que visitéis su blog A la luz de las velas, pues merece mucho la pena.

Y sin más dilación, os dejo con la reseña:

Título: Toda la verdad de mis mentiras
Autor: Elísabet Benavent
Sello: SUMA
Fecha publicación: 02/2019
Idioma: Español
Páginas: 512
ISBN: 9788491291909
Colección: Femenino Singular

Sinopsis:
¿Puede mantenerse una amistad a pesar de las mentiras?

Una despedida de soltera en autocaravana.
Un grupo de amigos...
...y muchos secretos.
Elísabet Benavent, @Betacoqueta, con 1.000.000 de ejemplares vendidos vuelve con una novela original, una propuesta diferente que aborda las contradicciones de un grupo de amigos que se ve obligado a mentir para dejar de sentir.
Un road trip divertido, surrealista, donde todo puede suceder. Una aventura en carretera que habla de la verdad que se esconde detrás de todas las mentiras


Opinión:

No es ningún secreto que Elísabet Benavent tiene una forma preciosa de hacernos llegar sus historias. Si bien es cierto que hasta ahora todo – menos la bilogía Sofía – ha sido, para mí, una maravilla; tenía cierto miedo con este nuevo libro auto-conclusivo. ¿Infundado? Sí, como siempre.

Blanca va a casarse y Coco, Loren y Aroa han decidido montarle una despedida de soltera diferente. Van a pasar unas semanas enrolados en una auto-caravana, al más puro estilo de Los padres de él (2004). Todo pinta bien, ¿sí? Bueno, ¿qué tal si le añadimos drama? Porque Coco comparte piso desde hace muchos años con Marín y está enamorada de él. Más drama. Aroa es su ex y quiere recuperarlo. Ah, esperad, todo el grupo cree que Coco sigue enamorada de Gus, poeta, y… parece que Gus se ha enamorado.

 Lo que más me ha gustado de la novela, más allá de las risas y los dramas, ha sido las verdades que esconde. Los grupos de amigos y amigas por norma general terminan petando. Y petan porque hay gente que guarda mierda, porque hay personas que sólo muestran la cara A, porque la sinceridad brilla por su ausencia y porque, ay, joder, cómo duelen las puñaladas. Que Benavent nos lo escriba tal cual, que nos hable sin tapujos de lo duro que puede llegar a ser que te la metan doblada… vale oro. Y vale oro porque, aunque duela, nos levantamos.

Coco ha sido una protagonista que me ha gustado. Y mucho. Descocada, divertida, para nada falsa… un amor de chica que se queda contigo. Trigo de otro costal es Aroa. No os voy a contar nada, pero me cayó como una patada en el coño desde el principio. Esa tía está muy podrida. Vamos, que es tóxica. Si ya dicen que hay que tener cuidado con las mosquitas muertas.

 Había leído por ahí que Gus era –o es– un capullo. A mí me ha caído bien. Sí, ya sé, ya sé, soy un monstruo por decir que el muy capullo me ha caído simpático; pero es que me flipó que el pobre chaval no supiera realmente cómo lidiar con sus emociones. Hay muchas personas así. Gente que no sabe cómo gestionar lo que siente, que no sabe expresar emotividad o que, por desgracia, ha tragado mucha mierda. No lo disculpo, a mi juicio tiene lo que merece; pero sí que debo reconocer que me gustó que, en cierto modo, Elísabet Benavent nos dejara una puerta abierta hacia la libre interpretación.

No quiero contaros nada, porque el libro vale la pena y, la verdad, creo que hay más de una persona por ahí que debería leerlo. Ya sabéis, ni que sea por darse cuenta de que, muchas veces, herir por herir, buscando hacer el mayor daño posible, sólo trae problemas.

 Si me preguntáis qué opino de Marín, os diré (escribiré), que me veía venir el drama. Quiero decir, el chaval era demasiado bueno, demasiado dulce. Demasiado en general, ¿me explico? Veréis, está claro que es más fácil ser amiga, amigo, que pareja. Y es más fácil porque una amiga, un amigo, va a soportar la mierda con una sonrisa y se va a sumar a tus penas y alegrías. De una pareja se espera más. Hay personas que no servimos –y sí, me incluyo aquí– para hacer florecer una relación madura, ¡y eso no es malo! Quiero decir, ¿qué pasaría si todas y todos fuésemos lo suficientemente maravillosos como para tener una relación de la hostia? No habría rupturas, joder. Y la vida sería, sinceramente, bastante más aburrida. Así que sí, Marín no es perfecto, pero se esfuerza y, aunque más de una vez se tropieza, me gusta su forma de hacer frente a los problemas. Hay que luchar, amigas y amigos. Esconderse no vale para una puta mierda.

 No os voy a contar nada más. La historia vale mucho la pena y, la verdad, no creo que esté haciendo honor a lo que vais a encontrar entre sus páginas. Así que leedla, disfrutadla y enamoraros un poco de las preciosas playas del Mediterráneo.

 Con todo, Toda la verdad de mis mentiras es una muy buena obra. Con un ritmo que no decae y unos protagonistas que roban el corazón, Elísabet Benavent nos regala un libro que vale, y mucho, la pena.

PUNTUACIÓN...5/5!

Primeras Líneas...


domingo, 17 de marzo de 2019

Frases memorables: La quinta ola


"Estamos aquí y después desaparecemos, y lo importante no es el tiempo que pasemos en este mundo, sino lo que hagamos con este tiempo"

¡Hola a todos!
Hoy os traigo una frase memorable del libro La quinta ola, de Rick Yancey. Pese a que salió durante la época en que estaban de moda las distopías, esta me dio la impresión de que destacaba de entre las otras. Me gustó su trama, que al autor no le temblara el pulso al hacer sufrir a sus personajes, los giros inesperados que había constantemente, y también la forma de narrarlo. Muy recomendable. Aquí os dejo con la reseña. Eso sí, es una primera parte. Tengo en casa pendientes el resto, pero...uf, no me he animado aún.

Pero no era eso a lo que venía hoy, sino que quería compartiros esa cita que hay un poco más arriba y que me parece muy acertada. Intentamos alargar al máximo nuestras vidas, véanse todos los avances que ha hecho la medicina, pero muchas veces nos olvidamos de vivirla

Y aquí tengo una duda. "Lo importante es lo que hagamos con este tiempo". ¿A qué se refiere? Podría referirse a que tenemos que aprovechar el tiempo y hacer lo que queramos, sin miedos, antes de que sea tarde. Es decir, disfrutar de la vida al máximo. Pero también podría referirse a que lo importante es invertir ese tiempo en intentar cambiar el mundo para bien, en ayudar a los demás, en dejar marca. O quizás se refiera a una combinación de ambas. ¿Vosotros cómo la habéis interpretado?

Y si relacionamos la cita con la literatura podríamos decir que lo importante no es el tiempo que pasemos leyendo ni la cantidad de libros leídos, sino lo que esos libros nos han aportado. No estoy en contra de la gente que lee 200 libros al año, ni mucho menos, no todo el mundo dispone del mismo tiempo para leer. Lo que quiero decir es que no deberíamos preocuparnos tanto en leer cuantos más libros mejor, sinó en leer libros que realmente nos aporten cosas y que nos marquen. 

Ah, ¿que cómo puedes saber de antemano si un libro va a ser así o no? No puedes saberlo. O no siempre. Pero a veces sí. ¿Quién no ha cogido un libro sabiendo antes de abrirlo que no va a ser más que entretenido, quizás porque no es de tu estilo o porque es muy parecido a otras cosas ya leídas? Yo sí, aunque confieso que alguna que otra vez me he llevado una sorpresa. ¿Y vosotros?


miércoles, 13 de marzo de 2019

Los renglones torcidos de Dios, de Torcuato Luca de Tena

Tenía este libro pendiente desde hacía mucho tiempo (¡Qué información más útil! Como no tienes cincuenta libros que están en esa misma situación...). Me llamó especialmente la atención por la sinopsis (ya, suponía que no era por la maravillosa portada), pues el libro prometía jugar con el lector, y eso siempre me gusta.

Al final, embarqué a varias personas para que se unieran a una lectura conjunta del libro, cosa que me dio la excusa perfecta para leerlo de una vez. Así, he leído este libro junto a Patt (Deja volar tu imaginación), Omaira (Entre la lectura y el cine), Carme (A la luz de las velas) y G, aunque Patt aún lo esté terminando de leer. Y no podríamos haber tenido opiniones más diversas acerca del libro. Aquí os dejo con la mía.

Título: Los renglones torcidos de Dios
Autor: Torcuato Luca de Tena
ISBN: 978-84-08-09349-7
Páginas: 448
Encuadernación: Rústica
Año de edición: 1979

Sinopsis:
Alice Gould es ingresada en un sanatorio mental. En su delirio, cree ser una investigadora privada a cargo de un equipo de detectives dedicados a esclarecer complicados casos. Según una carta de su médico particular, la realidad es otra: su paranoica obsesión es atentar contra la vida de su marido. La extrema inteligencia de esta mujer y su actitud aparentemente normal confundirán a los médicos hasta el punto de no saber a ciencia cierta si Alice ha sido ingresada injustamente o padece realmente un grave y peligroso trastorno psicológico.

Por qué este título...
"- No te preocupes por ellos -le decía a Dios- por... por... porque... todos son equi... equi... ¡eso es!... equivocaciones tuyas. Son los ren... renglones torci... torcidos, de cuando apren... apren... ¡eso es!... aprendiste a escribir. ¡Los pobres locos -continuó ahogado por los sollozos- son tus fal.. faltas de orto... ortografía!"

Opinión:
Impresión: Interesante

Pero a ver, ¿habéis visto qué sinopsis tan atractiva? Un libro que promete jugar con tu mente, que dudes de todo y que transcurre en un lugar poco habitual: un sanatorio. Es que tiene una pintaza. No sé vosotros, pero yo he leído poco sobre sanatorios, así que para mí el libro tenía una pinta estupenda.

He de admitir que el principio es lento. Hasta la mitad, el libro se toma su tiempo en presentar a los personajes y la ambientación, con un ritmo lento. Hasta más de la mitad no empiezan a pasar cosas realmente. El principio es solo gente hablando, pero no por ello se me ha hecho pesado en ningún momento porque los diálogos sirven para caracterizar a los personajes y se me hacían interesantes.

Y es que el autor se ha documentado bien y quiere demostrarlo. Si hubo una cosa que me sorprendió fue lo mucho que se había documentado el autor. ¡Incluso internó voluntariamente en un sanatorio, fingiendo tener una enfermedad mental para poder documentarse! Si eso no es implicarse en su propia novela, que me encierren. De verdad, ¿sabéis del caso de algún otro escritor que haya hecho algo así solo para documentarse?

En consecuencia, la ambientación me ha parecido magnífica. Me gusta mucho cómo está descrito el sanatorio y sus residentes, además de cómo se describen los enfermedades de los internos. Carme, que estudia psicología, dice que los términos que se usan no son del todo acertados, cosa que puede ser, pero yo no lo he notado. Aunque claro, hay que tener en cuenta que el libro se publicó en 1979, por lo que es normal que algunos conceptos hayan quedado desfasados.

El caso es que el gran trabajo de documentación es tanto una virtud como un defecto. Me gusta el realismo que impregna la obra, y que en el prólogo se indique que casi toda la ambientación es fiel a la realidad, pero hay un exceso de información. El autor se ha documentado y quiero demostrárselo al lector ofreciendo datos y datos que no aportan nada a la trama y que no están integrados correctamente en la narración. Había muchas cosas que me sobraban y que no me parecían más que paja. Es cierto que eso disminuye mucho a partir de la mitad de la novela, pero de todas formas...

Eso es algo que me preocupaba a medida que iba leyendo: que la intención del autor no fuera tanto contarnos una historia como mostrarnos la realidad de los sanatorios en los años ochenta. Y en parte es un poco así. Algo que me ha parecido forzado y artificial es el esfuerzo del autor por mostrarnos personajes con todos los tipos de enfermedades mentales posibles, en todos sus grados, y también de "obligar" a Alice a visitar todas las alas del sanatorio. Por suerte, como digo, lo arregla, y a partir de la segunda mitad se centra en la trama y deja de presumir tanto de sus conocimientos.

En cuanto a los personajes, la primera que cabe destacar es Alice. Me ha gustado cómo se la retrata y su carácter y forma de ser son de lo más peculiares. Alice es altiva, clasista, condescendiente y culta. Es el tipo de persona que en la vida real no me caería bien, pero que como personaje de ficción me ha parecido muy interesante, en especial por la dualidad que presenta por su ternura con los enfermos y su arrogancia con los médicos.Además, sus diálogos me parecen excelentes, no solo porque demuestran cómo es, sino porque a veces tiene una forma de cerrarles la boca a otras personas que es de aplaudir.
"- ¿Fue usted misma quien preparó los venenos?
- Es usted tenaz, doctor. De haberlo querido hacer, tampoco hubiera podido. Pues lo ignoro todo acerca de los venenos.
- ¡Realmente extraño en una licenciada en Químicas!
- Doctor. No sería imposible que durante mi estancia aquí tuvieran que operarme de los ovarios. ¿Sería usted mismo quien me interviniese?
- Imposible, señora. Yo no entiendo de eso.
- ¿No entiende usted? ¡Realmente extraño en un doctor en Medicina!
- Mi especialización médica es otra, señora mía.
- Señor mío: mi especialización química es otra también."
Alice está bien retratada en el presente, pero no en el pasado. Entiendo que eso sea para mantener el misterio sobre su persona, pero de todas formas, se hubiera podido contar perfectamente su pasado sin que ello afectara al misterio, pues nunca sabemos si creernos o no sus palabras. Pero no, Alice parece salida de la nada. No sabemos si tiene amigos o no, qué hacía antes de aparecer en el sanatorio, ni llegamos a conocer la relación con su marido, algo que me parecía importante. El desarrollo de Alice en el presente está muy bien, pero no así su pasado, al que le ha faltado profundidad.

En cuanto al resto de personajes secundarios, me han gustado. Los enfermeros me han parecido bien caracterizados, pese a que tampoco tienen profundidad más allá de su presente, y lo mismo sucede con los enfermos. Destacar en especial a Ignacio Urquieta, a Arellano y a Montserrat Castell, los más desarrollados.

Otra cosa que cabe mencionar es el hecho de que el autor sabe manejar muy bien el misterio. Durante toda la novela he sentido mucha curiosidad sobre cuál era la verdad acerca de Alice Gould: ¿es una enferma o alguien quiere retenerla allí? Creo que el autor ha sabido dar los datos justos para que la trama avanzara y confunde al lector hasta el punto que no sabe qué pensar.

De todas formas, el final tampoco ha sido la gran sorpresa que me habían prometido. Resuelve de forma satisfactoria la trama sin ser previsible, pero tampoco hace que te lleves las manos a la cabeza y quieras releer el libro porque no te lo crees. Es un final bastante adecuado. El único problema es que presenta algunos agujeros. Hay algunas cosas que no encajan, actitudes que no he llegado a comprender. Con eso me refiero a que si algunos personajes hubieran actuado de otra forma, no se hubiera montado todo este lío. Pero vaya.

Hay una última cosa que quiero mencionar, y que en realidad fue la primera cosa en la que me fijé: el lenguaje. La prosa del autor es compleja. Usa palabras poco conocidas, un lenguaje culto y en estilo narrativo rebuscado. Vamos, que es bastante pedante. Para mí eso no ha significado problema alguno, pues pese al vocabulario más complejo, me ha enriquecido descubriéndome nuevas palabras, y no por ello se me ha hecho excesivamente pesado. Además, en general no me ha parecido un estilo artificial, sino regular y coherente con la seriedad de lo que quiere contar.

En conclusión, un libro bastante interesante, que parte de una premisa original y que sabe mantener muy bien el misterio y la atención del lector. Cuenta con unos buenos personajes, que si bien podrían tener más profundidad, son interesantes. A eso hay que sumarle una prosa compleja y elaborada, además de un buen trabajo de investigación que permite una buena ambientación, aunque eso a veces entorpece el ritmo. Creo que es un libro al que merece la pena darle una oportunidad

Cosas que he aprendido:

  • Información sobre sanatorios: no había leído ningún libro ambientado en uno, y pese a que muchas cosas ya no deben seguir vigentes, me ha gustado saber más acerca del trato en lugar así y cómo son sus residentes
  • Documentarse o morir: No hay mejor manera de conocer algo que experimentarlo en carne propia. He visto la importancia de conocer el tema que vas a tratar en tu novela de primera mano. A veces, los libros no son suficientes, pues te ofrecen el punto de vista de otras personas, quizás al vivirlo por ti mismo puedas ofrecer luego a tus lectores un punto de vista diferente
  • Para gustos, colores: si hay algo que me ha sorprendido de esta novela es la disparidad de opiniones que ha generado. A G el libro le ha encantado; a mí me ha gustado bastante; Carme y Omaira lo han padecido. Y lo mejor es que todos lo hemos sabido argumentar bien. Y es que es increíble como de forma objetiva un libro puede suscitar sentimientos tan dispares. Solo falta por ver la opinión de Patt.

Y ya para terminar, os dejo con mi avance en Goodreads:


PUNTUACIÓN...4/5!

Primeras Líneas...


viernes, 8 de marzo de 2019

Visto en las redes 28#

¡Hola! ¿Cómo va todo? Yo un poco más tranquila que otras veces, tengo un poco más de tiempo para estar por aquí y para leer, yupiii. Y voy a aprovechar eso al máximo. De todas formas, voy a mantener esta sección como bimestral, así que esta vez encontraréis aquello que compartí en redes tanto de enero como de febrero. He de admitir que la entrada ha quedado algo más larga de lo que esperaba (a quién quiero engañar: ya sabía que iba a quedar larga) pero...eso compensa la espera, ¿no?

En fin, empezaré por el principio. Ya sé que estos párrafos que vienen a continuación son muy repetitivos, pero siempre hay gente nueva que no sabe en qué consiste la sección, y me gusta informar de ello. Así que, para los que aún no lo sepan Visto en las redes es una recopilación de todos aquellos tweets que me han parecido interesantes (y a los que he dado retweet) publicados estos dos últimos meses por diversas personas, y una selección de las reflexiones relacionadas con el mundo literario que he compartido por las diferentes redes sociales. Es decir que...¡atención, porque podríais salir mencionados en esta entrada! 

Me decidí a crear esta sección como excusa para hacer debates porque sé que algunos de vosotros no me seguís en las redes sociales tranquilos, estáis en la lista negra (Carme, va por ti) (tanto porque no os interesa como porque no tenéis una cuenta) y pensé que os podría parecer interesante tener una recopilación de esta información. Así, todos los que no tenéis redes podrías estar al tanto y los que me seguís, pero estáis saturados, podríais tener un resumen. 

Como sabéis, el blog está en varias redes: en Twitter, en Facebook, en Instagram, en Goodreads y en Bloguers (podéis acceder a mi perfil de cada red social haciendo click en los enlaces), pero estoy especialmente activa en Twitter, Facebook y recientemente Instagram, por lo que en esta sección me centraré en esas redes sociales.

Repito, como en cada ocasión, que la idea de esta sección no es completamente mía (siempre hay que dar créditos). Me inspiré en una sección muy parecida en el blog de Deja volar tu imaginación llamada Citando a Twitter. En ella, Patt recopila algunos de sus retweets favoritos, aunque siempre están relacionados con reflexiones sobre el mundo en general, no centradas en el ámbito literario. Además, es una sección que tiene muy poco activa, tanto que a este paso, como no la actualice, dejaré de darle créditos.

Por cierto, hay algunos mensajes que están en inglés, pero tranquilos, para aquellos que no dominen el idioma, los he traducido tan bien como he podido. Y sin más dilación, os dejo con la entrada:


Visto en Twitter




Quiero empezar con estos dos mensajes de Pepa y Raquel de la Morena. Hoy en día las editoriales están tratando de reducir costes y por eso, muchas veces recortan en calidad. Para mí, tanto la traducción como la corrección ortotipográfica son esenciales. Ya sabéis que me encantan las novelas que son originales, pero no importa lo atractiva que me resulte su trama: si la traducción es mala y hay errores ortográficos para dar y regalar, la abandonaré. Que conste que antes no era así y leía cualquier cosa, así que entiendo que otros lectores lean ese tipo de libros (ejemplo de ello fue descubrir que otros lectores de Dune no se habían fijado en la pésima edición), pero mi bagaje lector ha hecho que eso cambie. Y vosotros, ¿os fijáis en esos aspectos al leer? ¿Abandonaríais un libro por ello?



Confieso que este hilo de Paula Gallego es un poco largo...pero es que me parecía TAN necesario que no he podido evitarlo. Las reseñas negativas son siempre muy polémicas, normalmente porque suelen ser ofensivas. Me declaro culpable al decir que alguna vez se me ha ido la mano, pero en mi defensa, en esos casos siempre lo hago en tono de broma. Lo que me sorprende son los lectores que si un libro no les gusta, no hacen una reseña porque "es su opinión" y no quieren influir negativamente a otros lectores con una opinión subjetiva. Qué pasa, ¿que las opiniones positivas no son igual de subjetivas? Las reseñas negativas constructivas son muy útiles para el escritor. Por cierto, la metáfora con la tortilla me parece fantástica xD 



"No entiendo por qué se está tardando tanto en escribir este libro" Digo, al mismo tiempo que yo estoy cuatro horas investigando algo a lo que luego solo voy a hacer referencia en una frase" 
 Escribir un buen libro no es fácil. Aunque no lo parezca, hay que informarse bien. Antes de decir "Lady Alice se escondió tras la puerta del baño" hay que investigar si en esa época había baños. No se trata de investigar sobre música si tu libro trata de ello, eso está claro, sino en investigar detalles en los que los lectores no nos fijamos (el uso de algunas armas, la ropa, la tecnología, los árboles que hay en una determinada región, los materiales usados para las cosas), pero que al final son lo que da verosimilitud a la obra. Y C.G Drews, que es escritora, lo sabe muy bien.




"Cosas que sueñan los ratones de biblioteca en secreto:
- Estar caminando por una librería y oh, vaya, es tuya, te has apropiado de ella.
- Comer galletitas con forma de libros.
- Su TBR no les cae encima y no los aplasta contra el suelo."
Eh...muy adecuado lo que dice CG Drews. ¡Lo que me gustaría a mí tener una librería! ¡Y comer galletitas con forma de libro (Gracias a Patt y Viry por la tarta de cumpleaños literaria)! Aunque también estoy seriamente preocupada por el hecho de que es probable que muera aplastada por mi montón de pendientes...Mi padre no quería ponerme estanterías en la pared en la que está la cama por si me caía encima. Un hombre previsor... 



Este mensaje de Arturo Pérez-Reverte causó un gran revuelo, porque se consideró una gran falta de respeto hacia las víctimas del holocausto, porque es como si dijera "dejad ya de contarnos vuestras penas". A mí me pareció interesante porque no lo vi en ese sentido. Sin duda, no debe olvidarse esta parte de la historia ni los horrores que se perpetraron (ya sabéis que a mí me chiflan los libros de esta temática), pero lo cierto es que últimamente está todo plagado de libros sobre el tema, hasta el punto de que se ha convertido en algo comercial. ¿Qué opináis vosotros?


"Cosas que los ratones de biblioteca sueña vívidamente:
- Poseer todas esas nuevas y brillantes novedades.
- Tener 9 horas más al día, de manera que pueda invertirlas en leer.
- Que las adaptaciones al cine no metan la pata."
Muy en la línea del otro mensaje, coincido también con este de CG Drews. Buah, cuando venís con vuestras entradas de "Novedades que se vana publicar X mes" es que los ojos me hacen chiribitas. ¡Y cómo no voy a apoyar eso de tener más tiempo para leer! Ojalá. En cuanto a las adaptaciones... Muy de acuerdo con ello. Son raras las ocasiones en las que es mejor la película. ¿Algún ejemplo?



No es ninguna novedad que no soy aficionada a la poesía moderna, a los "poetweets". ¡Eh! ¡Que ya sabéis cómo soy! Estoy abierta a que cualquiera a quien le guste ese tipo de poesía trate de convencerme del valor que tienen. Pero hasta entonces...Muy de acuerdo con Filólogos cabreados. Parece que cualquiera puede (y debe) publicar un libro, pero eso no es así. Escribir no es fácil. No es solo tener algo que contar. Es saberlo contar. Hay gente que debería dedicarse a plantar árboles y tener hijos (si quiere), y ya.


Poco tengo que añadir a las palabras de Javier Tinajero R. Los mejores libros son aquellos capaces de transportarnos al mundo de sus páginas, los que captan nuestra atención hasta tal punto, que la línea entre realidad y ficción se desdibuja y hacen temblar los cimientos de nuestra percepción.



Soy de la misma opinión que Xavier Beltrán. El escritor no me importa, lo que me importa son sus libros. Nunca me informo sobre los autores, ni siquiera de mis favoritos. Cada vez que veo una fotografía de Sanderson me sorprendo, porque nunca recuerdo cómo es y en la realidad no se parece a cómo me lo imagino. Pero no es solo eso. Yo separo autor y obra. No vaya a descubrir sin querer que ese autor es mala persona y luego no quiera leer sus libros por ello, por muy buenos que sean. ¿Os ha pasado alguna vez algo así?



Esto que dice Rita Piedrafita se relaciona bastante con lo que he mencionado antes. Un escritor no debe soñar con publicar, sino con escribir un libro del que se sienta orgulloso, con el que sienta que aporta algo, independientemente de si lo publica o no.



Totalmente de acuerdo con Alhana. Hay libros clásicos que deberían ser leídos, pero la solución no es obligar a los jóvenes a leerlos en las escuelas. Sí, los habrán leído (o buscado un resumen en El rincón del vago), pero no habrán asimilado su contenido. Además, no se puede imponer un solo libro para todos. Una de las cosas buenas que tiene la lectura es que ofrece variedad. ¡Hay tantos libros como gustos! ¿Por qué en clase deberían hacerme leer este libro sobre el bullying si a mí lo que me gusta es la fantasía? ¿Por qué deberían hacerme leer este libro de Laura Gallego si a mí lo que me va es la poesía? Sí, en los colegios debe fomentarse la lectura, pero en lugar de poner "libros de lectura obligatoria", deberían ofrecer un amplio catálogo con todos los géneros para que se pueda escoger.



Me sorprendió este apunte que hace Xavier Beltrán. Ahora mismo no estoy segura de si lo digo bien o mal, me ha creado esa incertidumbre, pero lo que sí puedo decir es que lo he visto escrito mal muchas veces...Habrá que tomar nota y tenerlo en cuenta. Me encanta cuando me descubren detalles lingüísticos como este.



No puedo estar más de acuerdo con Galena, he hecho prácticas en dos editoriales y puedo decir que la corrección no es uno de los factores que más se tienen en cuenta. Además, hoy en día impera la ley del mercado. Muchas editoriales publican libros, no por su calidad literaria, sino porque saben que se van a vender.



Esta anécdota de Sandra Andrés B en una librería me dejó de piedra. Se ofreció a recomendarle su libro a un chico que iba con su madre, pero el dependiente le respondió esto. No lo entiendo, de verdad. No me cabe en la cabeza. Las mujeres llevamos siglos leyendo libros protagonizados por hombres, y aún hoy en día muchos de los libros que leo así. ¡Que yo no me quejo! Puedo sentirme identificada con los personajes igual. Entonces, ¿por qué un chico no debería sentirse identificado con un personaje femenino?



De nuevo, no podría estar más que de acuerdo con Galena Sanz. Basta ver las entradas de "Novedades" para observar la cantidad de libros que se publican al mes. Y solo en español. Es exagerada la cantidad de libros que se publican día a día, hay demasiada oferta. Es por eso que es perfectamente normal encontrar libros de poco valor literario o que simplemente no son de nuestro estilo.



Visto en Facebook

Por supuesto, me aferro a las últimas palabras de Mientrasleo ("siguen quedando libros buenos") como un náufrago a su barca, porque si no fuera así, dejaría de leer. Pero esto es justo lo que comentaba antes Galena: se publican demasiados libros y eso hace que no leamos como antes. Ahora se planea por encima de lecturas, libros cuya lectura podía durar meses, ahora dura días. Y no es porque ahora tengamos más tiempo a tengamos más velocidad lectora, es que leemos ansiosos un libro tras otro, como si nuestra meta fuera terminarlos todos, disfrutando de ellos, por supuesto, pero no atesorándolos dentro de nosotros como antes. ¿Cuántos de los libros que leísteis en 2017 sois capaces de mencionar? Os reto. 



Pues sí, como dice Maks Viktor Antiquarian Books, los libros salvan vidas. Y yo que creía que eso de salvarse porque la bala justamente le había dado al libro que uno llevaba encima sólo pasaba en los libros...Idò ya veis que no. 



La de cosas que se hacen para los amantes de los libros. Muy curioso este vestido que comparte Diversidad literaria. Si me lo regalaran, yo creo que sí lo llevaría, ¿y vosotros?



De nuevo, vuelvo a compartiros estos curiosos minilibros de Maks Viktor Antiquarian Books. Sé que no son útiles, pero es que estos minilibros me parecen una monada.



Y lo mismo sucede con este libro acordeón que nos muestra Brant's Books. Nunca había visto nada parecido, me parecen cosas muy curiosas.



Visto en Instagram


Tenía que compartir esta cita de Mientrasleo. Los lectores vivimos por este tipo de libros. Un ejemplo es el libro de Te daría el mundo, un libro que presenta una historia sencillita (y ya sabéis la importancia que le doy yo a las tramas), pero que está tan bien escrito y con tanta intensidad, que se te queda dentro. ¿cuál fue el último libro que os agarró de esa forma?



Me parece indignante que sigan pasando cosas como esta que le ha ocurrido a Genny_lee_novelas. Había visto casos de plagio de un blog a otro, pero por parte de un profesional que cobra por ello es increíble. Está bien leer otras opiniones y contrastar ideas pero otra cosa es copiar descaradamente.



Y quiero cerrar la sección con una última cita y reflexión de Mientrasleo. La literatura como droga. Qué maravillosa metáfora. Me siento muy identificada con lo de que cada vez somos más críticos a medida que leemos, más duros. Y eso se nota especialmente en las relecturas. ¿Habéis releído algún libro que antes os había encantado pero que ahora veis con otros ojos?


lunes, 4 de marzo de 2019

Trilogía Love by numbers, Libro I: Nueve reglas que romper para conquistar a un granuja, de Sarah MacLean

Puede que os estéis preguntando qué hago yo (¡yo!) reseñando este libro. Yo también me lo pregunto. El caso es que perdí una apuesta y tenía que leer un libro de un género que no suelo leer. Y aquí me tenéis. Romance histórico. Fabuloso.

No es mi primera incursión en el género, en el blog podéis encontrar algunas reseñas de otros libros de este estilo, pero ninguno de ellos consiguió atraparme. Y este no ha sido la excepción. Y no porque el libro sea malo, ojo, sino que no es para mí.

Podría hacer una entrada entera hablando sobre por qué no me gustan este tipo de libros, al igual que vosotros podríais hacer lo mismo con libros de géneros que no os gustan. Una de esas razones es que son más libros de personajes que de tramas, y ya sabéis que para que me enganche un libro ha de tener una trama emocionante. En estos libros las tramas, suelen ser bastante simples y estar llenas de clichés que se repiten una y otra vez con pocas variaciones. Y las escenas amorosas...qué queréis que os diga, no me transmiten ni consiguen hacerme sentir esa supuesta pasión que hay entre los protagonistas. Por no mencionar el hecho de que son bastante previsibles. 

Cuidado, todo esto no tiene por qué ser malo. Son cosas que a mí, como lectora, no me gustan, pero que a otros sí. Hay lectores a los que les gustan este tipo de libros por cómo surge la relación entre los personajes, por cómo estos van evolucionando, porque las escenas amorosas sí les apasionan y porque, aunque sea una obra previsible, es entretenida.

En fin, basta ya de divagar. Os dejo con mi reseña.

Autor: Sarah MacLean
Título original: “Nine rules to break when romancing a rake”
Serie: Love by numbers 01
Categoría: Romance Histórico (Regencia)
Editorial: Avon / (Versátil Ediciones)
Páginas: 432
Fecha de publicación: Mayo 2011
Formato: Tapa blanda
ISBN: 9788492929443
Precio: 19'95€ (ed. física) - 4'94 (ed. digital)

Sinopsis:
Una de las reglas sociales más conocidas dice que una joven de buena familia nunca debería acudir a casa de un marqués de mala reputación y pedirle un beso apasionado.Sin embargo, para conquistar a este granuja, lady Carpurnia Hartwell deberá romper todas las reglas…
NUEVE REGLAS QUE ROMPER PARA CONQUISTAR A UN GRANUJA:
1. Besar… apasionadamente.
2. Fumar puros y beber alcohol.
3. Montar a horcajadas.
4. Practicar esgrima.
5. Asistir a un duelo.
6. Disparar una pistola.
7. Jugar (en un club de caballeros).
8. Bailar todos los bailes en una fiesta.
9. Ser considerada hermosa. Una sola vez. 

Opinión:

Empezaré con algo positivo (¡muy bien!): la premisa. Lo cierto es que la premisa inicial es interesante. Lady Calpurnia ha decidido que está cansada de estar siempre preocupada por su reputación y que ha llegado el momento de dejar de ser una sosa y hacer todo eso que por normas sociales no puede hacer pero que ella quiere hacer. Y por eso elabora una lista de aventuras y cosas que quiere experimentar (y que podéis ver en la sinopsis). 

Lo que me ha gustado de esto es el tipo de protagonista que se nos presenta. Lady Calpurnia es una mujer rebelde y lucha contra las normas impuestas por la sociedad de formas creíble, es decir, sin excederse de los límites ni parecer una mujer moderna que ha viajado en el tiempo. Para empezar las cosas de la lista las quiere hacer por ella misma, no para enfrentarse a la sociedad, así que lo hace todo a escondidas, no para reivindicar cosas. Punto positivo. Además, como habréis visto son cosas asumibles y me gusta que impliquen otras cosas. Por ejemplo, beber alcohol podría hacerlo en el despacho de su hermano, pero no, lo que ella quiere realmente es ir a una taberna y vivir la experiencia completa. El problema aparece cuando la lista y su trabajo de superación personal se convierte en una excusa para quedar con Ralston.


Además, pese a que he comentado que me gusta el tipo de protagonista, lo cierto es que al principio tuve sentimientos encontrados con Lady Calpurnia y es que tiene como máximo objetivo en la vida casarse por amor. Y ya. Esa falta de aspiración me ponía de los nervios al principio, pero me di cuenta de que era perfectamente razonable: es a lo máximo que podía aspirar una mujer en aquella época, querer otra cosa no hubiera sido coherente. Aqui os dejo un fragmento en el que podéis ver su actitud:
"Inhaló el rico aroma de sus queridos y bien cuidados volúmenes antiguos mientras imaginaba que era la protagonista de aquella historia en particular… Una esposa amada, el objeto de una búsqueda heroica, la mujer cuyo amor había inspirado a su marido a luchar contra el cíclope, a resistir a las sirenas, a conquistar lo que fuera necesario para alcanzar una sola meta: regresar a su lado. ¿Cómo sería ser como ella, una mujer cuya belleza sin par fuera recompensada por el amor del más importante héroe de su tiempo? ¿Cómo sería recibir al único hombre que posee tu corazón?"
El resto de personajes ni fu ni fa, incluso Ralston, el protagonista masculino. Quizás el único que me ha llamado la atención ha sido Benedick, el hermano de Lady Calpurnia (la llaman Callie, acabo de acordarme. Mentira, lo has descubierto tras buscar cómo se llamaba el hermano), por cómo trata a su hermana y por su carisma. Qué lastima que no haya un libro sobre él (pero si no lo hubieras leído de todos modos...). Oh, por supuesto también está Oxford, el tercero en discordia. Por favor, qué personaje más inútil, hacía mucho que no veía un personaje tan florero. Una de las pocas ocasiones en que me he reído es en un momento en el que la prota le dice algo así como "Cállate, no le importas a nadie, sobras". Oxford simplemente está ahí para alargar la trama treinta páginas más, pues apuesta con Ralston X libras a que conseguirá casarse con Calpurnia. Pero ni siquiera es un triángulo amoroso (menos mal), porque Callie deja claro constantemente que no se casaría con él ni en broma, así que su personaje solo sirve para crear malentendidos entre Ralston y Callie.


En cuanto al worldbuilding he echado mucho de menos que no se profundizara más en la sociedad. Hay muy poco desarrollo a nivel social. No hay un solo noble bien caracterizado y en cuanto a las normas sociales, a cómo funcionan los bailes, al papel de la mujer en la sociedad, a las "solteronas" y los escándalos está tratado muy por encima. Incluso la familia de Callie creo que tiene un papel muy reducido, en especial la madre, que aparece un dos o tres ocasiones y ya. Falta desarrollo en general, tanto por parte de la ambientación como de los secundarios.

No comprendo por qué
sostiene un diario
En cuanto al romance, qué queréis que os diga, yo no vi química entre ambos. La atracción que siente Callie es razonable, pues Ralston es su amor platónico desde hace diez años, pero en el caso de Ralston, ni eso está justificado, pues es un libertino que ha estado con muchas mujeres más hermosas que Callie. "Qué superficial eres, Laura, puede que sean más hermosas, pero eso no es lo importante". Aquí es donde os equivocáis. De verdad, no sé qué han visto el uno en el otro. No sé por qué Callie está tan enamorada de Ralston, las únicas características que le definen son que toca el piano, que es guapo y que es un libertino. En cuanto a Callie, si Ralston se hubiera enamorado de la "nueva Callie", valiente y atrevida, no me hubiera parecido mal, el caso es que lo que le gusta de ella es que sea tan inocente, inexperta y apasionada. Porque claro, no ha estado con ninguna mujer así (Laura levanta una ceja con incredulidad). Oh, por supuesto, también está el hecho de que tienen muchos temas de conversación y que se entienden muy bien (pista: no).

Quizás esto último haya sido lo que más me ha molestado: los malentendidos. El avance de su relación se basa en muchos malentendidos: Ralston enamorándose de ella y Callie incapaz de creérselo. Ralston dice una cosa, y Callie se deprime porque interpreta que ha dicho otra. Pero vamos a ver, si no sois capaces de entenderos entre vosotros es que no os conocéis tanto y por tanto, no podéis estar tan enamorados, ¿no? En fin, yo y mis problemas con estas novelas. Que sí, que entiendo que es para que avance la trama, pero...
¿Una máscara? ¿De verdad?
¿Por qué?

En cuanto a las escenas amorosas destacan por no usar un lenguaje vulgar, pero tampoco esperéis poesía ni un lenguaje excesivamente bello. Está bien narrado, pero como ya os he comentado, a mí no me ha convencido ni me ha hecho sentir. Destacar que me ha parecido un poco así que Callie fuera tan pasiva y que casi siempre se dejara hacer y sentir y ya está.

Sobre la trama, hay poco más allá de lo que dice la sinopsis, pero tampoco esperaba más. En general la novela es entretenida y se lee con facilidad, es previsible, pero tampoco es que busque sorprender.  Hay algún que otro cliché (los malentendidos, ella escuchando lo que no debe oír a hurtadillas, la apuesta,...), pero tampoco son excesivos.

Dos últimos puntos a los que quiero hacer referencia. El primero de ellos es la falta de humor. Me había dicho que los diálogos entre los protagonistas eran muy divertidos y qué queréis que os diga, me habré convertido en Omaira o algo, pero es que no me he reído casi en ningún momento, ni me ha arrancado una sonrisa. El segundo punto que quiero comentar es lo inadecuada que es la portada. Sé que es lo típico en estos libros, pero es que me parece muy desacertada. La protagonista es fea (que eso puede ser relativo) y regordeta, y precisamente por eso se ha quedado como "solterona". Si la protagonista es como la chica de la portada, no me quiero hacer una idea de cómo son las demás chicas, ¿anoréxicas?

En conclusión, un libro de romance histórico que no difiere de otros más que por la premisa inicial. Por mi parte, el romance no me ha convencido y me ha faltado profundidad tanto en los personajes como en la sociedad. De todas formas, se lee con facilidad y es entretenido. Es solo, que no es mi estilo.

Cosas que he aprendido:
  • Me ha parecido curioso descubrir todas las cosas que tenían prohibidas las mujeres en aquella época. Es decir, podían por ejemplo beber todo el jerez que quisieran, pero no whisky.
  • Eufemismos sexuales ridículos.

Y para terminar, os dejo con mi avance en Goodreads:



PUNTUACIÓN...2/5!

Primeras Líneas...