viernes, 27 de noviembre de 2020

Viñeta del lector 72#

 

«Cuando alguien te pilla oliendo libros y cree que estás loco»

«Me encanta el olor de las librerías, con todos esos libros por leer»

No puedes considerarte lector si no te gusta el «olor a libro». Es algo así como una regla no escrita. Pero, ¿qué es el olor a libro? Por una parte están las explicaciones técnicas, pero no es eso a lo que me refiero. Siempre nos referimos al «olor a libro» como si fuera un aroma concreto, cuando en realidad no es así. 

Cada libro huele distinto, depende mucho de las circunstancias. Está el "olor a libro nuevo", que recuerda al del pegamento y la vainilla; el olor de los libros reciclados, que es como la corteza reseca y quemada de un árbol; el olor a libro viejo, que es como el de las sábanas guardadas durante mucho tiempo en el armario; el olor de los libros ilustrados, que al tener un papel distinto, de más calidad, huelen a limpio y plástico. Entre otros.

Por mi parte mi favorito es el olor a libro nuevo de ediciones muy cuidadas, puesto que me encanta la vainilla y el pegamento me parece embriagador. Además, hay que sumarle que esos libros también huelen a expectativas. Aun así, no voy oliendo los libros en la librería/biblioteca, ni por la calle, a la vista de todo el mundo, como sugiere el estereotipo.

Y vosotros, ¿habéis caído rendidos ante el perfume de los libros? ¿Cuál es vuestro favorito? ¿Cómo lo describiríais? ¿Alguna vez os han mirado raro por ir oliendo libros? Nos leemos en los comentarios^^

martes, 24 de noviembre de 2020

Trilogía Parabellum, Libro III: Se vende alma (por no poder atender), de Sergio S. Morán

El dios asesinado en el servicio de caballeros fue todo un descubrimiento, una novela divertida hasta decir basta con una protagonista genial, irónica y llena de desparpajo, que nos presentaba un mundo paranormal que escapaba a todos los clichés. En Los muertos no pagan IVA nos encontramos con una novela más seria, centrada en los problemas de Verónica con las drogas, con menos humor y una trama más inconsistente, que tenía como objetivo mostrarnos a la Verónica más humana y profundizar en su personaje.

Se vende alma (por no poder atender) sigue bastante la línea del segundo libro. G y yo lo compramos mediante una campaña que hizo el autor de crowdfunding, gracias a la cual también se incluían unos relatos breves en formato digital (yo ya los había leído por web, y aunque en su momento me entusiasmaron, la relectura me confirmó que eran bastante mediocres) y un libro juego estilo "Elige tu propia aventura".

Título: Se Vende Alma (Por No Poder Atender)
Autor: Sergio S. Moran
Serie: Parabellum 3
ISBN: 9788409115334
Páginas: 352
Formato: Tapa blanda

Sinopsis:
Verónica Guerra es detective paranormal. Es a quien recurres cuando un fantasma está encantando tu casa, apagando las luces, moviendo tus muebles y robándote el wifi. Es a quien llamas cuando un poderoso hechicero oscuro te debe pasta.
Pero sus clientes no son los únicos con problemas y mientras investiga un sencillo caso de espionaje industrial, se encuentra con viejas y nuevas pesadillas. Verónica tendrá que volver a pelear con el primer monstruo que vio cuando aún era niña. Tendrá también que lidiar con uno de sus ex novios (el vivo no, el otro) dispuesto a hacer de su vida un infierno.
Y deberá enfrentarse a la peor de todas sus pesadillas: quedarse sola.

Opinión:

Creo que ha llegado el momento de asumir que la Parabellum del primer libro no volverá. Y tiene sentido, pues ha pasada por demasiadas cosas como para volver a ser la que era. Las heridas se curan, pero las cicatrices tardan mucho en cerrarse y no desaparecen nunca. En este libro nos encontramos con otra etapa de la vida de Verónica. Una vez superada su adicción a las drogas, tiene que aprender a vivir con ello, con lo que es ella. Tiene que aceptar que va a tener que enfrentarse al mundo sobrenatural sin ese subidón de la ambrosía, con sus propias cartas y sin hacer trampas.

Si en el anterior libro teníamos a una Verónica con problemas, en esta ocasión vemos cómo tiene que enfrentarse con todos sus traumas: la soledad y su preocupación por involucrar en casos peligrosos a sus seres queridos, la ansiedad que la paraliza ante el peligro, su obsesión con Mercader, su terror a el Hombre del Saco, su odio por su padre, la casi nula relación con su familia y los problemas con su exnovio muerto. Todo esto se explorará con un recurso que me ha parecido interesante, que son las sesiones de terapia, a las cuales Verónica puede acceder mentalmente en cualquier momento. 

Aunque todos estos temas son interesantes, el autor ha intentado abarcar demasiado. Hay algunos traumas que están bien tratados, pero en general me hubiera gustado que se profundizara mucho más (en el anterior libro, lo de la adicción a las drogas estaba muy bien) y algunos quedan muy abiertos, como lo del exnovio, y eso que es bastante importante.

El personaje de Verónica, como veis, está bien perfilado, cosa que no pasa con los secundarios. Me gustaría saber mucho más de la familia de Verónica y del exnovio. El personaje que más se explora es el de Arancha, y eso me parece muy bien pues en el anterior libro había casi desaparecido de la trama, pero aun así, esperaba más.

En cuanto a al trama, me ha parecido mejor hilada que en libros anteriores, puesto que estamos ante una verdadera investigación y no solo cabos sueltos que son necesarios unir. Los métodos de Verónica son interesantes y todas sus decisiones bastante lógicas, así como sus trucos mágicos. Me ha gustado mucho su enfrentamiento final, tanto a nivel de acción como por el hecho de que tiene que enfrentarse a sí misma y sus miedos. Especialmente me ha gustado el final por todo lo que implica para el personaje. Sus decisiones me parecen coherentes, además de ser una forma de evolucionar al personaje. Eso sí, lamentablemente quedan un par de cabos sueltos que seguramente se resolverán en otros libros.

Sobre el humor, me quedo con el primer libro, sin duda. Sí, me ha hecho gracia alguna que otra cosa, pero ya. Se hace ameno, pero no encontramos situaciones de humor absurdo como en el anterior, ni diálogos desternillantes. Tiene puntos graciosos y algún comentario ingenioso, pero poco más.

Finalmente, comentar que la edición es muy mejorable. Hay varios errores ortográficos y tipográficos, de estos que se comenten al escribir deprisa y no revisarlo. Especialmente frases que sonaban extrañas por ausencia de puntos o puntos y coma.  Sí que se ha corregido el libro, pero esa corrección no era suficiente ni de lejos. Una lástima.

En conclusión, un libro que ha sido entretenido que se enfoca en los traumas de Verónica y que tiene una trama amena y bien hilada. Le falta la chispa y el humor de la primera entrega, pero es porque se centra en explorar la psicología del personaje principal, que evoluciona coherentemente, mientras este resuelve un caso interesante.

Cosas que he aprendido:
  • La importancia de los puntos y los puntos y coma.

Y ya para terminar, so dejo con mi avance en Goodreads:

PUNTUACIÓN...3/5!

Primeras Líneas...

jueves, 19 de noviembre de 2020

Frases memorables: Dos almas

«El amor verdadero no lo arregla todo. El amor verdadero no supera todos los obstáculos. Y, lo que es más importante, el amor verdadero no exige un final feliz. Esta no es su razón de ser. Lo que sí hace el amor verdadero es transformarnos, moldearnos, reducirnos el corazón a rescoldos calcinados que vuelven a arder como un ave fénix, más abrasadores y resplandecientes que nunca».

«Tal vez por eso todos nos aferramos al amor. Porque los breves instantes de amor, ya sea real o imaginario, con o sin una pareja ideal, son los únicos momentos en la vida en que somos felices de verdad, en que toda la mierda nos resulta soportable. Es como si el mundo dejara de dar vueltas durante el tiempo justo para echar un vistazo por tu ventana y fijarse en tu euforia. Eso hace que el dolor valga la pena».

«Es lo que tiene el amor. Da igual cómo nos vayan las cosas: Nunca desaparece. Una vez que deja huella en nosotros, esta dura toda la vida. Quedamos marcados para siempre por su fulgor. La existencia resulta mucho más agradable con esa maravillosa certeza de que "Alguien me amó alguna vez, y fue algo hermoso..." Nadie puede arrebatártelo. Y hay ocasiones en que es necesario recordarlo, reconocer lo afortunados que somos por haberlo tenido alguna vez. Y también hay ocasiones en que lo único sensato es dejar de llorar, dejarlo correr, con luz y amor en el corazón, y seguir viviendo tu vida lo mejor posible».

La entrada de hoy seguramente hará que a Omaira le hagan chiribitas los ojos. Que no me guste el romance no significa que no haya leído libros de ese género (no se puede opinar sin haberlo experimentado) y en ellos de vez en cuando he encontrado alguna reflexión sobre el amor interesante.

Del libro del que saco estas citas, Dos almas, poco se puede salvar la verdad. Me pareció una historia desaprovechada que se centraba demasiado en el romance (aunque todo es cuestión de gustos), pues esperaba algo más que un romance bonito. Este está bien desarrollado (aunque empieza siendo un instalove), pero llegó un punto en que los personajes me hacían querer vomitar arcoiris por lo melosos y acaramelados que estaban. La actitud pasivo-agresiva y crítica con los tópicos de la protagonista está bien, pero eso no hace que esos tópicos desaparezcan. De todas formas, por si os interesa saber más, os dejo con el enlace a la reseña.

Sobre las citas, me gusta la primera reflexión contraria a la ideología de Disney de que el amor lo arregla todo. No es así. No siempre se superan todos los obstáculos ni se arregla tu vida por ello. Ni siquiera siempre hay un final feliz. Seguro que os habéis enamorado más de una vez y la historia no ha terminado bien. Pero habéis resurgido de vuestras cenizas, ¿verdad? El amor nos transforma y nos hace más fuertes (buah, podría escribir un libro de autoayuda con esto).

De la segunda cita me gusta la descripción que hace de cómo es sentirse enamorado y de cómo la felicidad de ese instante hace que todo (el resto de problemas, se entiendo, no que te maltraten o  que la relación sea abusiva) sea más llevadero. 

Relacionado con esto me gusta la tercera cita. También creo que todas las relaciones que hemos tenido, no solo nos han cambiado un poco, sino que se quedan con nosotros para siempre, tanto si han salido bien como si no. Puede que sea egoísta o altivo, pero saber que alguien nos quiso con intensidad, que fuimos tan importantes para alguien durante un tiempo es un subidón increíble de autoestima.

Por mi parte nunca he sufrido mal de amores, no he tenido ninguna relación amorosa que luego haya salido mal y que hubiera querido continuar, pero sí he tenido relaciones de amistad así que terminaron sin que pudiera evitarlo. No me arrepiento de ellas, no hay que hacerlo, sino recordar los buenos momentos, agradecer haberlos vivido y dejarlo pasar.

Y bueno, eso es todo por hoy, espero que os hayan gustado las citas. ¿Estáis de acuerdo con estas reflexiones? Nos leemos en los comentarios.


lunes, 16 de noviembre de 2020

En la quinta hora guerra, de Yû

En esta ocasión os traigo la reseña de cuatro tomos manga que forman parte de una misma serie de libros. No sé mucho del género y poco a poco estoy adentrándome en él, aunque los resultados no son muy positivos. Estos me los prestó una amiga mía y aunque no ha estado mal, tampoco ha sido todo lo que yo esperaba.


Título original: Gojikanme no Sensou (五時間目の戦争)
Autor: Yuu
Editorial: Planeta Cómic
Tomos: 4
Colección: Manga Seinen
Traductor: Daruma
Número de páginas: 200

Sinopsis:
Durante cinco años, ha habido una guerra desesperada contra un enemigo desconocido. La gente de la remota isla de Aoshima apenas conocen las terribles condiciones que sufre el continente. Pero esto cambia de repente cuando todos los viernes a la quinta hora, los estudiantes de la isla se dirigen a luchar directamente en la primera línea del frente de combate.

Tanto Saku y Miyako son declarados no aptos para el servicio por razones no reveladas. Sin embargo, Reina, que acababa de huir de Tokio, es la primera en ser enviada a la zona de guerra.

Opinión:
Impresión: Bien y ya.

A mí que una obra tenga la palabra "guerra" en el título ya hace que automáticamente me la apunte. Más o menos es así. Ya sabéis que soy muy aficionada a las historias dramáticas y más aún a las que tratan  periodos de guerra, pues no solo se basan en hechos reales, sino que la guerra suele sacar lo peor y lo mejor de nosotros mismos.

Cuál fue mi decepción al descubrir que estos libros no se basaban en la Segunda guerra mundial, sino que era totalmente ficticia. La premisa gira entorno a la guerra, pero la que acaba de estallar en una pequeña isla de Japón. Hasta entonces, sus habitantes se habían mantenido, dentro de lo que cabe, al margen del conflicto, pero la cosa ha ido a mayores, hasta el punto de que incluso se empezará a instruir a los niños en el manejo de las armas y se los enviará al frente. Allí deberán luchar sin saber nada: ni quiénes son los enemigos ni qué estrategia se sigue ni si volverán con vida.

Como ya os he contado la trama, creo que lo justo será que os cuente mis opiniones acerca de ella primero, pese a que sea lo más flojo de los cuatro tomos. Todo este misterio acerca de la guerra se mantiene hasta el último capítulo (que no el último tomo) cosa que me ha parecido muy negativa, pues no solo haces que, en el resto de tomos haya mucho relleno sino que la información se dé apresuradamente y de forma artificial. En general todo lo relativo a la trama principal no me ha convencido. Hay muchas lagunas, explicaciones extrañas, cosas que no cuadran y lo cierto es que me ha parecido que a la autora se le iba un poco la olla. 

La tramas secundarias, las que hacen referencia a las relaciones de personajes, me han parecido mucho más trabajadas, aunque sí me hubiera gustado que se desarrollaran un poco más algunos conflictos y muertes. Soy yo buscando drama. Ojalá hubiera habido muchas más escenas del frente, pero para mantener el misterio, no se sabe casi nada de él y todo sucede en la isla. Había personajes que morían fuera de pantalla y no me enteraba hasta varias páginas después y otros que actuaban de forma algo precipitada. También esperaba que se hiciera más hincapié en los adultos, pero por desgracia, los padres casi no aparecen (qué novedad).

Si dejamos de lado que el misterio sobre la guerra no se resuelve de forma demasiado satisfactoria y que falta algo de desarrollo en algunas partes, el resto está bien. Retrata muy bien lo que es vivir con la guerra sin estar en el frente; como podéis ver es una obra más costumbrista que de acción y giros. Pese a todo, se mantiene interesante y se lee con mucha facilidad.

Esto puede que se deba al dibujo, que me ha parecido precioso. Es simple cuando necesita serlo, pero hay fondos que permiten situarte y algunos paisajes. El aspecto de todos los personajes está muy marcado y diferenciado, con rasgos suaves. Una belleza que contrasta con lo terrible de la situación. No es un diez de dibujo, pero sí un ocho como mínimo. Es nítido y permite seguir la historia con facilidad, al mismo tiempo que tiene los detalles suficientes como para que no parezca demasiado simple. 

Sobre los personajes, poco tengo que decir, los más protagonistas son Miyako, que se dedica a la cocina, y Saku, a quien le gusta correr. Poco tengo poco de decir de ellos, pues son muy estereotípicos. Me han parecido bastante reales, en especial con sus dramas adolescentes, que siguen ahí pese a la guerra. 

Esto me lleva a hablar del romance. Hay un triángulo amoroso muy bien llevado y una o dos parejitas más por ahí. No se centra en ello ni se le da tantísima importancia, sino que es coherente con la situación que están viviendo. Me ha parecido adecuado a su edad y muy tierno.

Ya para terminar comentar un detallito que me ha encantado. Miyako es cocinera y se dedican muchas páginas a hablar de cocina o mostrándola a ella cocinando. Además, hay varios extras con recetas sobre cómo cocinar esos platos. Tenía todo tan buena pinta que el otro día intenté hacer una y no quedó nada mal.

En conclusión, En la quinta hora guerra (sí, yo también creo que falta una coma en el título) es una historia con una premisa interesante que habla acerca del costumbrismo de la guerra. Las relaciones de personajes me han gustado, se lee con facilidad y es muy entretenido. Además, el dibujo es muy bonito y lo suficientemente sencillo como para que no te pierdas pero capaz de generar interés. La única pega es que la resolución del misterio es bastante insatisfactoria tanto por ser apresurada como algo incoherente, cosa que se hubiera resuelto desarrollando más algunos temas.

Cosas que he aprendido:

  • Por qué no hay que darle un arma a un niño
  • Los japoneses flipan con el costumbrismo
  • Platos interesantes

PUNTUACIÓN...3/5!

viernes, 13 de noviembre de 2020

Visto en las redes 38#

 ¡Hola! ¿Cómo va todo? Yo algo estresada, la verdad. Poco a poco me he ido adaptando al ritmo del colegio y dar clases se me hace cada vez más sencillo, pero se nota que aún tengo mucho que aprender. Como soy nueva en esto, me falta rodaje y material, así que cada tarde dedico dos o tres horas a preparar cosas. ¡Para que luego digan que los profes viven bien!

Eso ha hecho que mi actividad tanto por aquí como por las redes se vea reducida. ¡Pero si casi no tengo tiempo de leer! Tuve que hacer un pequeño parón de un par de semanas (lo necesitaba para coger ritmo), pero he vuelto con las pilas cargadas. Y como muestra de ello os traigo una nueva entrada de Visto en las redes. 

Esta es una sección que publicado bimestralmente y que me gusta mucho porque da pie a muchos debates. Espero que la disfrutéis y que podamos comentar un montón de temas interesantes. ¡No os olvidéis de comentar todo aquello con lo que estéis o no de acuerdo!

Eso sí, antes de nada, empezaré explicando en qué consiste la sección para aquellos que aún no lo sepan. Ya sé que estos párrafos que vienen a continuación son muy repetitivos, pero siempre hay gente nueva que no sabe en qué consiste la sección y me gusta informar de ello. Visto en las redes es una recopilación de todos aquellos tweets que me han parecido interesantes (y a los que he dado retweet) publicados estos dos últimos meses (en esta ocasión en septiembre y octubre) por diversas personas, y una selección de las reflexiones relacionadas con el mundo literario que he compartido por las diferentes redes sociales. Es decir que...¡atención, porque podríais salir mencionados en esta entrada! 

Me decidí a crear esta sección como excusa para hacer debates porque sé que algunos de vosotros no me seguís en las redes sociales tranquilos, estáis en la lista negra (tanto porque no os interesa como porque no tenéis una cuenta) y pensé que os podría parecer interesante tener una recopilación de esta información. Así, todos los que no tenéis redes podrías estar al tanto y los que me seguís, pero estáis saturados, podríais tener un resumen. 

Como sabéis, el blog está en varias redes: en Twitter, en Facebook, en Instagram, en Goodreads y en Bloguers (podéis acceder a mi perfil de cada red social haciendo click en los enlaces), pero estoy especialmente activa en Twitter, Facebook y Instagram, por lo que en esta sección me centraré en esas redes sociales.

Repito, como en cada ocasión, que la idea de esta sección no es completamente mía (siempre hay que dar créditos). Me inspiré en una sección muy parecida en el blog de Deja volar tu imaginación llamada Citando a Twitter. En ella, Patt recopilaba algunos de sus retweets favoritos, aunque siempre están relacionados con reflexiones sobre el mundo en general, no centradas en el ámbito literario.

Por cierto, hay algunos mensajes que están en inglés, pero tranquilos, para aquellos que no dominen el idioma, los he traducido tan bien como he podido. Y sin más dilación, os dejo con la entrada:

Visto en Twitter

Fantástica cita la que nos comparte Alhana. Es por eso que un mismo texto puede tener múltiples interpretaciones. Es posible que el autor quisiera decir algo concreto pero que nosotros (con nuestro bagaje, nuestro conocimiento del mundo, nuestras expectativas) interpretemos algo completamente distinto. Nadie leerá un mismo libro de igual forma y aunque es cierto que el autor es quien más tiene la palabra, al final somos nosotros los que recibimos el mensaje y lo valoramos. 

Uf, muy de acuerdo con Paloma. El primer libro que vi con un título así (Una corte de rosas y espinas) me encantó, pero entonces hubo un boom y todos los libros se llamaban igual, hasta el punto de resultar indistinguibles. Es cierto que suena bien, pero en la mayoría de casos es ir por el camino fácil, pues no aporta nada y no dice nada del libro. ¿Se os ocurren más ejemplos?

Pues la verdad es que esto que comenta David Paradela López es algo que no se me había ocurrido. Al pensar que los libros quedaban libres de derechos de autor, nunca había tenido en cuenta que la traducción no lo era, pero es una verdad como un templo.

Me he aficionado a la cuenta de Laura Martín-Pérez, pues me gusta mucho descubrir palabras nuevas. Es increíble que existan palabras para cosas tan concretas y curiosas. En este caso parece ser que "trashojar" es la palabra exacta para "leer en diagonal". A ver si la incorporo a mi vocabulario.

Como podéis ver, en ese momento estaba de acuerdo con Carmen Sereno.Y aún lo estoy, pero solo en parte. He estado dando un vistazo a esas listas y sí aparecen ese tipo de obras, pero en menor medida. Entre esos imprescindibles siempre aparecen Orgullo y prejuicio y Cumbres borrascosas, que tienen un fuerte componente romántico. O El señor de los anillos, del género fantástico. Incluso hay clásicos juveniles como La isla del tesoro o Matar a un ruiseñor. Pero es cierto que son una minoría. ¿Añadiríais alguno a la lista?
 
"Estoy convencida de que leer libros y comprar libros son dos hobbies distintos"
Coincido con CaffeinatedCovers. A mí me emociona muchísimo leer libros pero, ¿y qué me decís del subidón de comprarlos? ¿De acariciar las portadas en las librerías? ¿De adquirir un libro a mitad de precio? ¿De descansar la vista sobre las estanterías repletas? Ojo, ¡que leer los libros también me gusta! Pero con la falta de tiempo, casi parece que me gusta más acumularlos que leerlos.

TOP a lo que dice Feyrestairs. En persona me cuesta mucho recomendar una obra fervientemente. Antes lo hacía sin miedo, pero tras varios chascos y decepciones ahora ya no estoy tan segura como antes. Y es que es muy duro escuchar durante horas hablar de lo terrible que es un libro que te ha encantado. Eso sí, resulta enriquecedor porque consigues verlo desde otro punto de vista.

Buah, esto que nos comparte Igua S me ha encantado. ¡Yo quiero ir! Los lugares con ambientación temática me parecen una pasada y si es sobre algo conocido, aún más. El único lugar de este estilo que he visitado era un bar temático de terror, pero más allá de eso, nada. ¡Ojalá visitar este lugar algún día y hospedarse ahí! ¿Qué ambientación os gustaría a vosotros?

Muy de acuerdo con Hollie Deschanel: algunos villanos molan mucho. Pero que te guste un villano no significa que compartas su forma de ver el mundo o que vayas a obviar todo lo malo que hace, sino que está bien construido y que es coherente. A mí me gusta mucho Hrathen porque entiendo sus motivaciones, pese a no compartirlas. Y lo mismo con Valentine de Cazadores de sombras, cuyo pasado y vivencias justifican muy ben cómo es y por qué hace lo que hace. Otro buen ejemplo es Heathcliff, aunque lo odié muchísimo. ¿Cuáles son vuestros villanos favoritos?

Muy buen ejemplo de ello es el que nos pone Isaías Lafuente Zorrilla. Es cierto que en este tipo de casos es necesario, pues sino hay releer la frase, pero también es verdad que se trata de casos muy excepcionales. A mí me cuesta mucho ponerlo en las preguntas cortas, en parte por influencia catalana, en parte porque da pereza. Aquí siempre uso ambos signos de interrogación, pues con el teclado es un momento, pero al hablar por chat no lo hago casi nunca. ¿Vosotros soléis poner ambos signos de interrogación? 

"Es fácil escribir "este libro es feminista porque la chica es la más lista", pero difícil crear un libro en el que las chicas no necesitan ser "las mejores" para ser dignas de estar junto a dos chicos mediocres (que la tratan mal)"
Muy de acuerdo con esta crítica de Za-Boo Ellor. Últimanente se ven muchas novelas protagonizadas por mujeres "fuertes e independientes" que o son las más listas del lugar o las más fuertes o las más atrevidas. Eso deja en muy mal lugar al resto de mujeres de la obra. ¿Por qué tenemos que esforzarnos más y ser las mejores? Ese es un gran peso que llevamos en la espalda, las expectativas. Nos vemos en la necesidad de demostrar que somos mejores, de esforzarnos más, cuando a los hombres no se les exige eso. ¿Qué hubiera pasado si Hermione fuera como Ron y Ron como ella? ¿Ya no sería un buen personaje femenino? 
 
Lo que dice Omaira G es una verdad como un templo, aunque por mi parte he recibido pocos mensajes de ese estilo. Ya sabéis que yo reseño tanto libros que me han gustado como los que no, pues me parece tan necesario recomendar como desrecomendar. Es cierto que esas reseñas negativas suelen ser algo incisivas (aún no he publicado la de Hijo del hierro, pero lo vais a flipar), pero siempre lo hago justificando todo aquello que digo, ofreciendo argumentos y ejemplos. No me molesta en absoluto que otras personas disientan, al contrario, me encanta profundizar en por qué una obra que he odiado tanto puede gustarle a otra persona (me ha pasado con Juego de tronos), pero que sea siempre desde el respeto y haciendo uso de argumentos.

En esta ocasión me pasa lo contrario que a Sara Ramírez. No soy muy partidaria de las novelas de personajes. Aunque estén muy bien tratados y tengan mucha profundidad, a mí eso me aburre. Necesito una trama que me motive a seguir leyendo, que me haga pensar y hacer teorías, que me sorprenda con giros inesperados. La situación ideal es cuando un libro consigue equilibrar ambas cosas y ofrecer personajes bien caracterizados con evolución junto a una trama emocionante y compleja, pero sé que es difícil. ¿Vosotros qué preferís?

Amén a todo lo que ha dicho Alhana, creo que no podría haberlo argumentado mejor. Sí, la cultura es un derecho y debería ser accesible para todo el mundo, pero no tiene por qué ser la última novedad de turno. Antes que piratear hay muchas opciones y sí, es cierto que en los países latinoamericanos la situación es la que es, pero sigue habiendo bibliotecas y estoy segura de que los móviles con los que se descargan libros costaron un dinero.

Me gusta que Rafael Velis ofrezca cifras y porcentajes sobre el precio del libro. A mí un 10% para los autores también me parece muy poco, pero viendo cómo se reparte el pastel, entiendo que no se puede dar más. ¡Y eso que no se han tenido en cuenta costes como la corrección o la maquetación de portada y de la obra! A mi ver tanto las librerías como los distribuidores ganan demasiado. 

Flipando con esta "oferta" que le ofrecieron a Clara Álbori. Eso para mí no sería una reseña, sino publicidad pura y dura. "Reseñas honestas", claro que sí. También me ha sorprendido lo de que "los escritores pagan para que un editor lea su libro". Eh... ¿no? Lo más triste es que seguro que más de un escritor en ciernes habrá caído en esta trampa y creerá que el mundillo funciona así.


Visto en Facebook
No os podéis hacer una idea de lo bien que me lo pasé siguiendo este debate planteado por Galena Sanz. ¿La novela romántica tiene que tener un final feliz? Hubo una gran participación y la mayoría estaba de acuerdo en que sí, la novela romántica o novela rosa tiene que tener un final feliz; en caso contrario debería ser clasificada como "novela sentimental". Yo no comparto esta opinión. Para mí una novela romántica es aquella que se centra en una relación romántica, independientemente de si esta termina bien o mal. Entiendo que haya gente que quiera estar de sobreaviso para no llevarse un disgusto pero en ese caso para mí sería hacer spoiler. La diferenciación entre romántica que termina bien y romántica que termina mal no me parece necesaria.

Este banco que comparte Can Sales Biblioteca Pública me parece muy original. Puede que no sea cómodo del todo porque faltan respaldos, pero me gusta. 

Visto en Instagram
Quedé alucinada con esta foto de @mybooks_fan. ¡Menudo equilibrio! ¡Y encima con taconazos! La composición me parece preciosa y creo que hay mucho trabajo detrás de esa foto. Eso sí: menos mal que los libros están bien. Son los de Una serie de catastróficas desdichas, muy recomendados.


Y hasta aquí la entrada de hoy. Espero que la hayáis disfrutado y que tengáis muchas cosas que decir. ¡Nos leemos en los comentarios!  

lunes, 9 de noviembre de 2020

Saga Mundodisco, Libro XXIX: Ronda de noche, de Terry Pratchett

Título: Ronda de noche
Autor: Terry Pratchett
Nº de páginas: 400
Editorial: DEBOLSILLO
Idioma: Castellano
Encuadernación: Tapa blanda
ISBN: 9788499089027
Año de edición: 2017
Traductor: Javier Calvo Perales

Sinopsis:
Sam Vimes, de la Guardia Nocturna de Ankh-Morpork, lo tenía todo. Pero ahora una tormenta lo ha enviado de regreso a su tumultuoso y violento pasado. Vivir en el pasado resulta duro, aunque morir allí sea increíblemente sencillo.
Vimes debe sobrevivir a toda costa, porque tiene trabajo por delante: calzarse unas botas de suelas desgastadas para seguir la pista a un asesino maníaco, enseñar a ser un buen poli al joven que el mismo fue y, sobre todo, cambiar el final de una revolución sangrienta. Solo hay un problema: si lo hace bien, puede perder a su esposa, al hijo que está por nacer y todo su futuro.

Opinión:
Impresión: Brillante

He de confesar que no llevaba una buena racha con este autor; eran ya varios los libros que había leído que, aunque estaban bien tampoco me habían supuesto una revelación. Este libro ha hecho girar las tornas y no solo está a la altura del primero (¡Guardias! ¿Guardias?), sino que diría incluso que lo supera. Quizás sea porque es muy parecido, pero con el extra que ofrece la madurez de los personajes (que sí, que Vimes en el primer libro ya era un madurito, pero no me refiero a eso).
«Pues claro que no iba a haber uno solo, se regañó a sí mismo Vimes. El trabajo de este no era más que vigilar hasta que hubieran llegado todos. Y después regresar tranquilamente y llamar a la artillería. Deben de ser una docena. Nos van a hacer potito.
Nota al pie: Que es como hacer papilla, pero durante mucho más tiempo»
Para empezar, rompe completamente con el esquema establecido al partir de una premisa muy innovadora: Vimes viaja en el tiempo treinta años atrás. Es cierto que volvemos a estar encerrados en la ciudad y que Vimes está haciendo cosas, pero en esta ocasión el hilo conductor de la trama es mucho más claro y no tenemos tanto escenas sueltas como una trama bien hilada. Además, el protagonista absoluto es Vimes (aunque tengamos algunas escenas desde el punto de vista de otros personajes, pero son muy escasas), cosa que ha ayudado a centrar mucho más la obra. En el libro anterior, las tramas secundarias habían quedado muy de fondo y por suerte, aquí desaparecen por completo: si no eres capaz de mantener dos tramas, céntrate en una.
«Llevaba una ballesta de asedio que no podían levantar ni entre tres hombres, modificada para que disparara un grueso haz de flechas todas a la vez. La mayoría se hacían añicos en el aire debido a las fuerzas que entraban en acción, de manera que lo que llegaba al objetivo era una nube en expansión de astillas en llamas. Vimes le había prohibido que la usara contra personas, pero resultaba condenadamente útil para entrar en edificios. Con aquella arma se podía abrir la puerta principal y la de atrás al mismo tiempo.»
En parte he echado de menos a Zanahoria y al resto de la guardia, pero creo que ha sido una decisión acertada. Además, conocemos a la antigua Guardia, entre la que se cuentan muchos personajes ya conocidos, cosa que me parece excelente, pues permite hacer el contraste de una forma espectacular. Los únicos personajes en concreto que me gustaría mencionar (más allá de Vimes, que merece un párrafo para él solito) son Sybil, solo para hacer notar su ausencia y como aún no se ha hecho hincapié en su relación tóxica con Vimes, y Vetinari, que sigue siendo un personaje fascinante por el misterio y su inteligencia. Siempre me quedo con ganas de saber más, pero Pratchett solo nos da miguitas.
«—Una noticia bastante esperanzadora, señor —dijo Zanahoria, sonriente—. ¿Conoce a los Jumes? ¿La banda callejera?
—¿Qué pasa con ellos?
—Han iniciado a su primer miembro troll.
—¿Cómo? ¡Yo pensaba que se dedicaban a dar palizas a los trolls! ¡Creía que era su objetivo!
—Bueno, parece ser que al joven Calcita también le gusta dar palizas a los trolls.
—¿Y eso es bueno?
—En cierta manera, señor, yo supongo que es un paso adelante.»
Sobre Vimes, poco tengo que añadir a lo ya mencionado en libros anteriores. Estamos ante un personaje de 10. Me gusta mucho cómo va evolucionando en cada novela, de forma lógica y sin dejar de ser él mismo. En especial, lo que me gusta de él, es que es el héroe, pero sin serlo. Nadie le reconoce el mérito de lo que hace (a excepción de Vetinari, que a este paso, en el siguiente libro le regalará un país entero), pero él se esfuerza por mejorar día a día. Además, quizás por el hecho de que en este libro mole tanto y sea admirado por ello, haya ganado a mis ojos. Y es que en este libro, Vimes es Dios (no literalmente). Demuestra ser un gran estratega, inteligente, hábil, capaz de dominar a las masas y de hacer política. Y todo sin dejar de ser buena persona. El libro básicamente se podría resumir en Vimes molando a cada página. No necesitas saber más para lanzarte a por el libro. De cabeza.
«—Ya lo he pillado —dijo el prisionero—. Poli bueno y poli malo, ¿eh?
—Si usted quiere —dijo Vimes—. Pero andamos un poco cortos de personal, así que si le doy un cigarrillo, ¿le importaría pegarse una patada a sí mismo en los dientes?»
En cuanto a las reflexiones, en esta ocasión encontramos una sátira a las revoluciones y guerras civiles. Vengo de leer Hijo del hierro, donde no tienen ni idea, pero Pratchett sí sabe cómo se mete y, aunque sea en clave de humor, sabe cómo se desarrolla una revolución a nivel social.
«De niño había leído libros sobre grandes campañas militares; había visitado los museos para contemplar con orgullo patriótico los cuadros de grandes cargas de caballería, heroicas defensas y victorias gloriosas. Cuando más adelante empezó a participar en alguna de aquellas cosas, le había dejado de piedra descubrir que los pintores se habían olvidado inexplicablemente de los intestinos.»
Por otra parte podemos encontrar una fuerte crítica al sistema policial. Me ha gustado mucho ir comparando la antigua Guardia con la nueva. Os lo resumo: la diferencia es abismal. Lo mejor es Vimes criticando los métodos antiguos y cómo los guardias lo hacen todo mal, aunque sea la forma de apresarle o golpearle. Como os dije, es Vimes másmolando.
«aquello era malo en un policía de alta graduación. Quería decir que acudía a la Autoridad en busca de órdenes y que las obedecía, mientras que a Vimes le parecía mejor mirar a la Autoridad en busca de órdenes y luego filtrar aquellas órdenes por una fina malla de sentido común, añadiendo una ración generosa de malentendidos creativos y tal vez incluso de sordera incipiente si las circunstancias lo exigían, porque la Autoridad casi nunca descendía a nivel de calle»
Pero lo bueno de estos libros, es que sabe aunar muy bien temas serios con el humor. Aunque la segunda mitad se centra mucho más en la revolución y en los temas de cariz más grave, las pullas no se dejan de lado y cualquier situación está bien sazonada con humor. La primera mitad sí que es mucho más distendida y graciosa, y lo cierto es que me lo he pasado pipa. Como en libros anteriores, encontramos numerosos juegos de palabras y bromas inteligentes, pero es que además, el humor es más situacional que en escenas sueltas, cosa que hace que gane mucho y que no resulte tan artificial. Casi desde el primer libro no os compartía escenas que me habían parecido graciosas, pero ya veis que en esta ocasión plagan la reseña.
«—Vaya, vaya, ¿qué tenemos aquí? Una daga muy fea. ¿Ve esto, guardia interino Vimes? ¡Un arma, no hay ninguna duda! Eso va contra la ley. ¡Y la lleva de noche, que aún va más contra la ley ! ¡Y es un arma oculta!
—¿Cómo que oculta? —gritó el prisionero, retorciéndose—. ¡Qué mala sangre, si estaba en una puta vaina!
—Sangre, ¿eh? ¿Ya la ha usado entonces, señor? —dijo Vimes. Metió una mano en el bolsillo del abrigo negro—. Y… ¿qué es esto? Un rollito de terciopelo negro donde hay, me da a mí, un juego completo de ganzúas… Eso es Ir Equipado Para el Allanamiento, nada menos.
—¡No son mías y lo sabes muy bien! —gruñó el hombre.
—¿Está seguro, señor? —dijo Vimes.
—¡Sí! Porque las mías las llevo en el bolsillo interior, cabronazo.
—Eso es Usar Lenguaje susceptible de causar un Altercado —replicó Vimes.
—¿Eh? ¡Si habéis ahuy entado a todo el mundo, idiotas! ¿Quién se va a ofender?
—Bueno, puede que yo. Seguro que no le interesa que pase eso, señor.»
La única pega que le he encontrado al libro y que ayuda a bajarle ese medio punto (además de otros factores, como que en general podría ser mejorable un pelín más en todo) es que me he perdido en la parte de explicación de los viajes en el tiempo. Que se nota que está pensado, pero es que todo lo de los guardianes del tiempo me ha parecido confuso y complicado. Tampoco es exactamente culpa de la novela, pues hay una anterior que no he leído (Ladrón del tiempo) que se centra precisamente en desarrollar todo esto, por lo que sería repetitivo, así que aquí se limitan a explicar lo básico. Es culpa mía por leerlo por arcos y no de forma cronológica (en realidad es culpa de G, mi guía pratchiano)

Ya para terminar me gustaría recordar lo maravillosa que es la narrativa de Pratchett, tanto porque innova en el lenguaje, como por el hecho de jugar con él para mostrar características del habla de los personajes o de las situaciones. Además, no trata al lector de tonto y la obra está plagada de sutilezas que muestran en lugar de contarte lo que ocurre.
«No lo estáis haciendo bien. Si vais a detener a alguien, hay que hacerlo de inmediato. Lleváis una placa y un arma, ¿verdad? Y él tiene las manos en alto y la conciencia culpable. Todo el mundo tiene la conciencia culpable. Así que él se está preguntando qué sabéis de él y qué vais a hacer, y lo que vosotros hacéis es disparar preguntas una tras otra. No hay que soltar chistes tontos, porque eso te hace demasiado humano; tú le mantienes desorientado para que le cueste pensar una frase clara, y sobre todo no le dejas moverse así ni agarrarte el brazo y tirar hasta casi rompértelo y cogerte la espada y ponértela contra la garganta así. Di a tus hombres que bajen las espadas, ¿quieres? Si las siguen agitando así, le pueden hacer daño a alguien.»
En conclusión, Ronda de noche es una obra soberbia. Con una trama innovadora que permite jugar con los contrastes esta obra plagada de humor inteligente, reflexiones y crítica social, resulta ser una de las mejores de la saga de la Guardia. Cuenta con un protagonista que evoluciona de forma coherente que brilla en todas las escenas y una trama bien hilada en la que el humor situacional te arranca carcajadas mientras hace que reflexiones sobre el sistema policial y el funcionamiento de las revoluciones sociales. Además, la narración está llena de sutilezas y en ningún momento se trata de tonto al lector. Poco más se le puede pedir para ser más redonda, sin duda una de mis mejores lecturas del año.

Cosas que he aprendido:
  • Cómo crear personajes más listos que el hambre
  • Cómo hacer barricadas
  • El uso de abuelitas en la guerra
  • Cómo desarrollar una buena guerra civil
  • Choque entre seriedad y humor.
  • Releer: está TODO bien.
  • Los asesinos no tienen por qué ir siempre de negro

Y ya para terminar, os dejo con mi avance en Goodreads:


PUNTUACIÓN...4'5/5!

Primeras Líneas...

viernes, 6 de noviembre de 2020

Viñeta del lector 71#

 
«Admítelo: deseabas más su muerte que la de Voldemort»

Creo que aquí no hay discusión: Dolores Umbridge es una persona terrible y se merece todo lo que le pasa. ¿Y por qué es peor que Voldemort? Pues porque este último lo conocemos con más profundidad y sabemos que, tras sus acciones, hay una motivación que se justifica a partir de las experiencias que ha vivido. En cambio, Umbridge es malvada sin razón alguna, más allá de querer dañar a los demás. Por otra parte, es la adalid de la injusticia y eso es algo que, como lectores nos enfada mucho. A todo esto hay que sumarle que la mayoría de atrocidades de Voldemort sucedieron en el pasado, mientras que la maldad de Umbridge la vivimos en carne propia en el presente.

Que un secuaz sea más odiado que el propio villano es algo que no suele encontrarse. No sé si a vosotros se os viene algo a la mente, pero por mi parte se me han ocurrido pocos ejemplos. Aunque estoy segura de que hay más ahora mismo el único que se me ocurre es Ric-Ric, protagonista de Fungus. Este «señor» es un mindundi, un maleante del tres al cuarto, perezoso y borracho, que se ampara bajo unos supuestos ideales para cometer sus fechorías. Solo se preocupa por su propio beneficio y no hay absolutamente nada que le redima. Es intencional que el protagonista nos caiga tan mal, por lo que está bien, pero de verdad que no podía con él.

Y hasta aquí la entrada de hoy, pero siento curiosidad por saber qué pensáis. ¿Cuál es vuestro villano más odiado? ¿Conocéis algún caso en el que un secuaz sea más odioso que el villano final? ¡Nos leemos en los comentarios!