viernes, 26 de junio de 2020

Los hijos de Anansi, de Neil Gaiman

Neil Gaiman nunca ha sido un autor para mí. Ya son varios los libros suyos que llevo leídos, pero ninguno ha terminado de convencerme. El libro del cementerio me pareció excesivamente infantil; El océano al final del camino me apreció confuso y con demasiado realismo mágico; Stardust me pareció que tenía un lenguaje muy simple y que tant la trama como los personajes eran superficiales; y Buenos presagios, escrito conjuntamente con Terry Pratchett, me gustó mucho y me hizo reír a carcajadas.

No hubiera leído nada más del autor de no haber sido por G, que me insistió en que este libro era maravilloso y además, que el estilo del autor era muy distinto. Así que nada, le hice caso. Sin duda, ha sido mejor que los demás, como mínimo no me ha enfadado, pero tampoco ha terminado de ser para mí.

Título: Los hijos de Anansi
Título original: Anansi boys
Autor: Neil Gaiman
Traducción: Mónica Faerna
Editorial: Roca
Lugar de edición: Barcelona
Año de edición: 2016.
Publicación original: 2005:
Páginas: 379
Precio: 8,95 euros.

Sinopsis:
Gordo Charlie lleva una aburrida vida en Londres junto a su prometida Rosie, hasta que recibe la noticia de la muerte de su padre, que es quien le puso el apodo del que no se ha conseguido despegar. Viaja hasta Florida para asistir al entierro y allí descubre que tiene un hermano completamente distinto a él, que le enseñará a relajarse y divertirse, tal y como solía hacer su padre: Anansi, el dios araña, un espíritu rebelde capaz de invertir el orden social, mofarse de la muerte e incluso engañarla.

Opinión:
Impresión: Indiferencia

Tengo la impresión de que esta reseña va a ser corta, puesto que tengo poco que decir. El libro en general me ha parecido que estaba bien, que era aceptable, sin sobresalir por nada en concreto. El estilo narrativo está bien, sin destacar en nada, es bastante funcional y va al grano, además de usar un lenguaje realista, pero yo soy más de un lenguaje más lírico (sin ser artificial).

Esta portada me parece
 una preciosidad
El humor es algo que está muy presente, pero siento decir que no me ha hecho gracia. Seguro que os ha pasado alguna vez, que habéis leído un libro y os habéis encontrado con escenas que están ahí para ser graciosas...pero que no te hacen gracia. Idò eso me ha pasado, no es mi tipo de humor, pero que eso no os desanime a leerlo, porque muchas reseñas que he leído destacan lo divertido que es, y G no me cree cuando le he dicho que no me hace gracia.

En cuanto a la trama, es buena de leer y llega a ser interesante, pero esperaba mucho más. Básicamente gira en torno a la relación que se va forjando entre Gordo Charlie y Araña, y poco más. Y es que lo importante no es a dónde quiere llegar la novela, sino cómo llega ahí. El problema es que el camino tampoco me ha parecido nada del otro mundo.

En cuanto a los personajes, sin duda son interesantes. Anansi, el padre carismático de Gordo Charlie, el cual además resulta ser un dios; Araña, a quién odié desde el primer momento; Rosie, novia de Gordo Charlie y su huraña madre; y Daisy, la policia. Y Gordo Charlie, por supuesto, que representa al inglés medio, un oficinista que odia su trabajo, que no tiene claro su futuro, que no tiene suerte en nada y con pocas aptitudes sociales.


En general me han gustado todos, pero también es cierto que tienen mucho potencial desperdiciado, pues solo se los conoce superficialmente: ya habéis visto que de Daisy, solo he sabido decir que es policía. Me hubiera gustado que los secundarios tuvieran mucha más presencia y ver más interacciones suyas. No me pareció que tuviera profundidad suficiente y esperaba mucho más de ellos

Araña, por ejemplo, no me ha convencido. El autor consigue que lo odies con mucha fuerza al principio, y luego trata de redimirlo, pero por mi parte, me parece que no lo logra. Además, como el protagonista es Gordo Charlie, él tiene poco espacio en la novela, de manera que no me he creído el romance (no sé qué tiene la chica de especial) ni tampoco el brusco cambio de personalidad que tiene Araña al final.


Si hay algo de lo que no me puedo quejar es de la magia y el realismo mágico. Me parece razonable la reacción de Gordo Charlie respecto a los poderes de Araña y cómo lo acepta porque, después de todas las emociones que ha vivido recientemente, ya nada puede sorprenderle. Por otra parte, todo lo relacionado con el mito de Anansi, toda su historia y las historias que se cuentan de él me ha parecido muy interesante.

En cuanto al final, aceptable, previsible, con el que uno queda satisfecho. Siento si no he sonado muy animada, hay veces que uno se encuentra con un libro que no es de su estilo o con el que no se logra encajar, y este ha sido mi caso. Tampoco tengo mucho que criticar, como habéis visto, porque en general está bien y es entretenido, pero no ha sido para mí. Si aún no habéis leído anda de este autor, os animo a darle una oportunidad con esta obra.

En conclusión, Los hijos de Anansi ha sido un libro que ha estado bien, que se lee en un suspiro y con el que las páginas vuelan. Tiene personajes interesantes, tanto protagonistas como secundarios, pero por desgracia no se profundiza en demasiado en ellos y te quedas con muchas ganas de más. La trama es bastante simple y trata más de aceptarte a ti mismo que otra cosa. Tiene bastantes dosis de humor, pero por desgracia, a mí no me ha arrancado ni una sonrisa. Por desgracia, no ha sido un libro para mí.

Cosas que he aprendido:
  • Quién es Anansi.
Y para terminar, os dejo con mi avance en Goodreads:



PUNTUACIÓN...3/5!

Primeras Líneas...

martes, 23 de junio de 2020

Mis blogs favoritos y por qué los sigo, Parte VI

¡Hola a todos!

Ya vuelvo a estar aquí con una entrada que se sale de la tónica habitual, y en esta ocasión no hay más motivo que el hecho de que tenía pendiente publicar un Viñeta del lector...pero no tenía las viñetas a mano. Así que nada, me he animado a hacer esta entrada algo más compleja y desempolvar esta sección, de la que os traigo una entrada de uvas a peras.

A continuación voy a presentaros una selección de mis blogs literarios favoritos. Os contaré por qué me gustan y por qué merece la pena seguirlos. Como hay bastantes a los que quiero mencionar, he decidido que en cada entrada solo mencionaré a cinco, que tampoco quiero saturaros. Además, como ya dije en  ocasiones anteriores, os informo de que los iré mostrando por orden de antigüedad, empezando por los blogs que sigo desde hace más tiempo.

Espero que os guste la entrada y que os animéis a seguir alguno de estos blogs, porque realmente merecen la pena :)



Administradora: Omaira G
Descubrir el blog de Entre la lectura y el cine significó para mí un giro de 360º respecto a mi relación con la blogosfera literaria. Omaira es una joven de Canarias muy simpática y parlanchina (pero solo escribiendo, los audios de WhatsApp los odia, pese a que tiene una voz fantástica) con la que empecé intercambiándome comentarios en el blog (de hecho, ella es la razón por la que decidí acuñar el término "Omaira-comentarios" a los comentarios que superan el límite de Blogger) y con la que terminé hablando por WhatsApp para no llenar Blogger con nuestra cháchara. He leído recomendaciones suyas a puñados y, aunque no siempre me han convencido, con los thrillers siempre acierta. En su blog, que creó en el año 2013, podéis encontrar bastante variedad, aunque sus géneros favoritos son la novela romántica (con Nicholas Sparks como autor de cabecera) y las novelas de misterio. Me gustan mucho sus reseñas tanto por la estética como por ser muy completas y estar muy bien argumentadas. Además, su blog es diferente por el hecho de incluir con bastante frecuencia reseñas de adaptaciones literarias o hacer comparativas de estas con los libros. Es fan de las LCs (pese a que no suele acertar), es muy amable (dadle al seguimiento de comentarios, porque SIEMPRE responde y sus respuestas no son breves) y lee mucho (unos cien libros al año). En su blog también encontraréis algunas secciones bastante originales, aunque es verdad que las tiene algo olvidadas y me gustaría que las retomara. No sé qué hacéis que no la estáis siguiendo aún.



Administradora: No solo leo
La administradora del blog No solo leo es una chica muy maja cuyo blog se caracteriza por la diversidad de reseñas que se pueden encontrar. Son reseñas cortas y concisas, que van al grano, perfectas para aquellos que quieren saber cuanto menos mejor de los libros reseñados y a los que les basta con saber si merecen la pena. Si algo me gusta de No solo leo, es lo natural que es y cómo podría ser cualquiera de nosotros: también se siente asediada por la cantidad de pendientes (aunque te recuerdo que me dijiste que ibas a leer La corte de los espejos y La mujer del viajero en el tiempo) y se ha pasado más de una noche sin dormir solo para terminar un libro. No le falta nada para llegar a los mil seguidores, ¿a qué esperáis para seguirla?



Administradora: Eva Fraile
Si hay alguien que con cada reseña atenta contra mis prejuicios contra los autores autopublicados, esa es Eva Fraile. En su blog hay principalmente reseñas de autores que están empezando o que no tienen el apoyo de una editorial grande. ¿Y por qué la sigo, si yo no soy de leer este tipo de autores? Oh, porque le encanta La emperatriz de los etéreos tanto como yo. No, ahora en serio, me gustan mucho sus reseñas porque tiene un estilo único, usando un tono cercano, como si hablaras con tu vecina, pero al mismo tiempo, muy profesional. Aunque principalmente hace reseñas, en el blog también hay entrevistas a autores (en general las entrevistas me parecen aburridas y no las leo, pero las de La reina lectora me atrapan, especialmente por la cercanía y por cómo lo hila todo) y otras secciones, como recursos para escritores. Porque Eva Fraile es además una agente literaria que conoce muy bien el mercado, asesora editorial y experta en posicionamiento de escritores a través de proyectos creativos. Y todo lo ha conseguido a pulso, trabajando duro. De verdad, tiene ideas brillantes para promocionar las obras, yo siempre quedo sorprendida, y si un día escribo un libro quiero que me represente, especialmente si me apunto al premio de Amazon. Por supuesto, tengo que hacer una mención especial a su compañero, que está en las sombras pero que es un gran apoyo para ella. Es un diseñador gráfico de primera (es suyo el dibujo de La reina lectora) que ha hecho varias portadas de libros y que de vez en cuando hace reseñas de cómics. Os invito a leer ni que sea una reseña del blog y seguro que después decidiréis quedaros una buena temporada.
Nota: ¿Al final te hiciste con el libro de Cómo no ser una drama mamá, tal y cómo me dijiste?


Administradora: Lurei Book
Conocía a Lurei Book a partir de un sorteo que organizó y en el que fui una de las ganadoras. Esto fue allá por 2016 y desde entonces estoy por su rincón. Es una chica muy simpática y vivaracha, que publica reseñas de gran variedad de libros (excepto de novela histórica), aunque destaque principalmente la novela juvenil. Tiene secciones curiosas como Visto en Netflix (donde reseña series que ha visto en la plataforma) o Conociendo a (donde profundiza en la vida de algunos de sus autores favoritos), además de unas entradas que estéticamente, te entran por los ojos. Lo único que no le perdono es que aún no se haya leído los libros de Harry Potter. ¿Me ayudáis a convencerla de que lo haga de una vez?

Administradora: Patricia Bonet
Confieso que durante un tiempo creía que había más de una administradora, pero no, solo está Patricia Bonet. Si estoy al día de las novedades editoriales del mes, es gracias a Las hermanastras de cenicienta. Eso sí, sus reseñas y las novedades que comparte se enfocan sobre todo a su género favorito, la novela chick lit y el romance contemporáneo, dando bastante importancia a autores nacionales y autopublicados. Sus reseñas se caracterizan por incluir unos aesthetics muy currados de todos los libros que lee. A mí me gustan porque transmiten mucho de la persona que los ha hecho. Por último, mencionar que Patricia Bonet es también autora de varios libros, pero es de esas autoras discretas, que no te aturullan con mensajes de promoción, y eso me gusta. ¿A qué esperáis a darle un vistazo a su blog y comprobar que estoy en lo cierto?

Y hasta aquí los blogs que os recomiendo hoy. ¿Conocíais alguno? ¡Se admiten halagos para todos!

jueves, 18 de junio de 2020

La ciudad de los libros soñadores, de Walter Moers

No me hubiera acercado a este libro si no hubiera sido por la reseña que hizo Patt en su momento. Y es que los libros infantiles no suelen ser muy de mi estilo. Hace unos tres años que está en mi lista de pendientes, y allí seguiría si no fuera porque lo cogí de la biblioteca (justo antes de que esta cerrara). Pese a que no ha sido todo lo que esperaba, no me arrepiento en absoluto de haberlo leído. Os dejo con la reseña.

Título: La ciudad de los libros soñadores
Título original: Die Stadt Der Träumenden Bücher
Autor: Walter Moers
Traductor: Miguel Sáenz
Editorial: Maeva Young
Encuadernación: Tapa blanda
Número de páginas: 464
ISBN: 978-84-96231-91-7

Sinopsis:
Tras la muerte de su mentor, el joven poeta Hildegunst von Mythenmetz llega a la ciudad de los libros soñadores, donde espera encontrar al autor de un extraño manuscrito que tiene un don único, el Orm; se da cuenta de que las catacumbas de la ciudad son un lugar sumamente peligroso y poblado por insólitas criaturas obsesionadas con la literatura, libreros de viejo y coleccionistas de rarezas literarias, cazadores de libros capaces de matar por un manuscrito deseado y el temible rey de las sombras. Entonces Hildegunst deberá reunir todo su valor para adentrarse en este misterioso reino de los libro.

Por qué este título...
«Y allí estaban, los libros soñadores. Así llamaban en aquella ciudad las existencias de las librerías de viejo, porque, desde el punto de vista de los comerciantes, aquellos libros no estaban ya exactamente vivos ni tampoco exactamente muertos, sino que se encontraban en un estado intermedio, semejante al sueño. Habían dejado atrás su existencia real, tenían delante su descomposición, y por eso dormitaban, a millones y millones de millones, en todas las estanterías y cajas, en los sótanos y catacumbas de Bibliópolis. Solo cuando una mano curiosa cogía un libro y lo abría, cuando era adquirido y llevado, podía despertar a una nueva vida. Y eso era con lo que todos los libros soñaban»

Opinión:
Impresión: Quiero ir a vivir a Bibliópolis

Imaginad cómo sería la ciudad de la literatura, el Disneyland de los lectores. Una ciudad en la que se vive por y para los libros. Hay cafeterías en las que leer, bares en los que cada noche se interpretan recitales, papelerías de todo tipo, músicos que narran con música, lectores en voz alta que encandilan al público y actores que recitan y se disfrazan de tus personajes favoritos. Puedes dejarte caer por el cementerio de poetas y pedir que alguno te escriba algo o pasarte por el callejón de los críticos y conseguir hundir a tu rival. Levantas una alfombra, y de allí salen editores y agentes literarios a puñados. Y mires donde mires, hay librerías: de primera mano, de segunda mano, especializadas, de libros con el lomo amarillo, de autores zurdos, de clásicos, de libros encuadernados en piel,... cualquier libro que seas capaz de desear jamás. Bibliópolis es eso y mucho más, así que, a falta de palabras, dejaré que hable el propio libro:
«Bibliópolis contaba con más de cinco mil librerías de viejo oficialmente registradas y, más o menos, mil tiendas de libros en las que, además de libros, se ofrecían bebidas alcohólicas, tabaco, y hierbas y esencias embriagadoras cuyo consumo, supuestamente, aumentaba la alegría de leer y la concentración. Había un número difícil de estimar de vendedores ambulantes, que en estanterías rodantes, carritos de mano, bolsos en bandolera y carretillas ofrecían obras impresas en todas las formas imaginables. En Bibliópolis había más de seiscientas editoriales, cincuenta y cinco imprentas, una docena de fábricas de papel y un número continuamente en aumento de talleres que se ocupaban de producir tipos de imprenta de plomo y tinta de imprimir. Había tiendas que ofrecían miles de puntos de lectura y ex libris, canteros especializados en soportes para libros, carpinterías y negocios de muebles llenos de atriles y estanterías. Había ópticos, que hacían gafas de leer y lupas, y en cada esquina un café, casi siempre con una chimenea encendida y lecturas literarias las veinticuatro horas del día.»
Esta novela se dirige a los amantes de la lectura, sin importar la edad. Solo para pasear por la ciudad y conocer sus entresijos, merece la pena. Bibliópolis es un sueño hecho realidad, la meta de cualquier lector. He quedado embelesada con esta ciudad y también con la desbordante imaginación del autor. No solo ha sido capaz de crear un mundo sólido entorno a los libros, sino que crea dos: las Catacumbas.

A mí los libros que tratan el amor por los libros (sin ser moralistas, ejem) me calan hondo. Y si a esto le sumamos investigar unas catacumbas llenas de pasadizos que no ha cruzado nadie en centenares de años llenos de insondables estanterías de libros...que no se diga más, lo compro.

Pero qué es un mundo sin su gente y aquí el autor también se luce porque el libro está plagado de todo tipo de criaturas y monstruos que se escapan a cualquier clasificación. La gran mayoría son invenciones del propio autor: librillos, nebelheimerinos, trompebones, araññññas (se llaman así, no se me han ido los dedos), libros vivientes, gusano-tiburones, eideetas, aterradoras,... por no hablar de los que ni siquiera tienen nombre. Tratar de esbozarlos uno a uno sería demasiado complejo, pero os dejo con la descripción de uno de esos seres sin nombre:
«Aquel monstruo era con seguridad el más repugnante y repulsivo de todos los que había visto nunca. Imaginaos un cerdo adulto, al que acaban de quitar la piel, de forma que se le ve la carne con todos los tendones. Su cuerpo era transportado por cinco mangueras de un blanco lechoso, sin articulaciones, con ventosas al extremo. Por todo el cuerpo había repartidos docenas de ojos de facetas, e igualmente mandíbulas semejantes a picos de ave. Lo más inverosímil de la criatura era, sin embargo, que, con ayuda de ventosas, podía pasear como una mosca por la pared de cristal del frasco.»
Me ha parecido fascinante el hecho de que el autor fuera capaz de crear a tantos seres. Es cierto que en general no están descritos en profundidad ni conocemos más que pequeños pinceladas de cada uno, pero aún así, es un trabajo loable. Es cierto que me hubiera gustado saber más a nivel de sociedad de los dragones, por ejemplo, puesto que el protagonista es uno, pero no voy a pedir más descripciones a un libro que es puramente descriptivo.

Sí, puede que os hayáis dado cuenta de que me lanzado de lleno a hablaros de la ambientación y me he saltado por completo la trama, pero no he sido la única a la que le ha pasado eso: al autor también se le ha olvidado. Y es que la trama es lo de menos y todo lo que sucede también, una simple excusa para describirnos la ciudad de arriba a abajo, nunca mejor dicho.
La trama gira en torno a Hildegunst von Mythenmetz, un dragón que viaja a la ciudad en busca del autor del mejor manuscrito que ha leído nunca y que, a causa de su encontronazo con el villano, termina deambulando perdido por las catacumbas de la ciudad. Con eso se resume todo el libro. Y ese ha sido uno de mis problemas, que la trama es inexistente, una mera excusa, enseguida la acción deja paso a la descripción. Todo es previsible, no hay ninguna tensión y son pocas las sorpresas, por lo que lo he ido leyendo con calma.


Ni siquiera tengo nada que decir del protagonista, no me cae ni bien ni mal, porque pese a que la historia está contada en primera persona pasado, no sé nada de él. Y no solo eso, la novela no ha sabido transmitirme. No sé para en ningún momento a analizar la psicología de sus personajes y sabemos cómo se siente el personaje porque lo dice, no porque lo muestre.

Al hecho de que el libro no transmite y que le falta emoción hay que sumarle que la prosa me ha parecido muy inmadura. Es simple y funcional, no busca la belleza del lenguaje ni demuestra gran riqueza de vocabulario, algo que debería ser intrínseco de una novela sobre el amor a la literatura. En general me ha parecido una prosa infantil, algo acorde con el público al que va destinado el libro. Y aún así, dudo que realmente los más jóvenes, sin tener en cuenta a los que son amantes de la literatura, puedan disfrutar de este libro porque no hay aventuras, no sucede realmente nada.
El villano es terrible
Que sea infantil se nota también en el hecho de que no hay complicados juegos de palabras (más allá de los anagramas de escritores explicados al final) y también por eso se desaprovecha la oportunidad perfecta para hacer crítica social, especialmente en torno al mundo de los libros y la publicación. Sí que podemos encontrarnos fragmentos como este (proferido por un agente literario), pero poco más:
«En mi profesión no importa saber qué literatura es buena o mala. La literatura realmente buena rara vez se aprecia en su época. Los mejores escritores mueren pobres. Y los malos ganan dinero. Siempre ha sido así. ¿Qué me importa, como agente, un genio literario que sólo será descubierto el próximo siglo? Estaré muerto yo también. Lo que necesito son nulidades con éxito».
Seguramente es inútil quejarse, pero una de mis pegas es que el libro no es el libro que yo quería. Si tuviera una trama sólida e interesante, estuviera plagado de críticas al mundo editorial, si tuviera una prosa madura que transmitiera emociones y usara un vocabulario rico y cuidado, posiblemente hubiera sido una de mis mejores lecturas del año. Pero no se pueden pedir peras al olmo.

Para no dejaros con mal sabor de boca, quiero terminar hablando de la edición, que me parece espectacular. No solo está muy cuidada, sino que las ilustraciones, del propio autor, me parecen muy acertadas y acompañan muy bien la lectura.


Además, la idea del narrador es extraordinaria. Resulta que el autor "realmente" es Hildegunst von Mythenmetz, y Walter Moers lo que ha hecho ha sido "traducir" la novela del zamónico al alemán. Por eso, se permite la licencia de poner notas al pie aclaratorias sobre traducción. Divertidísimo y muy trabajado.
«N. del T.: Lo siento, pero por desgracia no puedo imaginar qué significa la palabra «rechimbar». Me la he inventado para traducir un verbo zamonio que me es totalmente desconocido, probablemente es dialecto de la Fortaleza de los Dragones. Parece bastante seguro que designa algo que sólo los dragones pueden hacer con los dientes, quizá producir un ruido de satisfacción. Me he pasado días enteros tratando de hacer con los dientes ruidos de satisfacción... pero no lo he conseguido.»
 

En cuanto al final, previsible, como era de esperar. Es cierto que me ha parecido un poco abierto, me hubiera gustado saber qué pasaba después con el protagonista, pero en un epílogo del "traductor" lo arregla de una forma muy original.

En conclusión, La ciudad de los libros soñadores es un libro infantil, pero que gustará a los amantes de la lectura de cualquier edad. Se percibe el amor por la literatura en cada página y el libro está plagado de descripciones que exaltan la imaginación. Cuenta con una edición cuidada, ilustraciones muy adecuadas y un gran derroche de imaginación. Sin duda es una obra muy imaginativa y con una gran construcción de mundo, pero se queda solo en eso, pues es mucho más descriptivo que narrativo. Pese a la falta de trama y sentimiento, se lee con facilidad debido al lenguaje simple y querrás continuar solo por ver con qué novedad te sorprende el autor. Pese a no ser el libro que me hubiera gustado, no me arrepiento en absoluto de haberlo leído, y se lo recomiendo especialmente a El aventurero de papel, sé que te gustará.

Cosas que he aprendido:
  • La idea del autor-traductor mola.
  • Descripciones de seres fantásticos de todo tipo.
  • La palabra "apesdecir", que ya he añadido a mi vocabulario.
  • Dónde quiero ir a vivir cuando sea mayor.

Y para terminar, os dejo con mi avance en Goodreads:


PUNTUACIÓN...3'5/5!

Primeras Líneas...