miércoles, 29 de mayo de 2019

Viñeta del lector 54#

"«Solo voy a leer un par de páginas de mi libro»
Traducción: Voy a leer como mínimo 100 páginas. Déjame sola. Ya nos veremos."

He de decir que nunca he sido una persona muy sociable. De pequeña, era de las que leía entre clase y clase en lugar de charlar con los demás y que se quedaba en casa leyendo por las tardes en lugar de ir a dar una vuelta. Oh, venga, va, levantad la mano, estoy segura de que la mayoría de vosotros también erais así y que no os digo nada nuevo.

Con el tiempo las cosas han cambiado, ahora cuido mis amistades, vamos a comer de tanto en tanto, hablamos horas por teléfono o quedamos para ir a alguna parte. Y aún así, a veces vuelvo a ser aquella niña que se sentaba solitaria en un rincón del recreo a leer

Confieso que alguna que otra vez me he escapado a la biblioteca diciendo que tenía que estudiar, cuando simplemente quería leer tranquila. O he hecho como que no había visto a un conocido en el autobús para poder seguir leyendo. Incluso me he cambiado de vagón de metro (no he llegado al punto de perder el metro por eso) para no coincidir con esa persona y poder leer, no importa qué tan amigos seamos. Y es que ya sabéis que donde más leo es en el metro, so, mis momentos allí de lectura son sagrados.

¿Y vosotros? ¿Alguna vez os habéis escabullido para poder leer?




sábado, 25 de mayo de 2019

Si menges una llimona sense fer ganyotes, de Sergi Pàmies

Estaba bastante indecisa sobre si hacer reseña de este libro o no, sobre todo porque es muy corto y pequeño  (140 páginas y mide un palmo de alto). Pero he empezado a escribir y al ver que tenía tanto por decir, al final me he decidido.

Ya sabéis que no soy muy fan de los libros de relatos cortos, porque por lo general no suelen entusiasmarme, pero en este caso ya había leído unos cuantos de este libro para una asignatura del año pasado y me habían parecido interesantes, así que cuando vi el libro de segunda mano, quise darle una oportunidad. Y lo cierto es que ha estado bastante bien.

Título: Si menges una llimona sense fer ganyotes
Autor: Sergi Pàmies
Nº de páginas: 144
Editorial: Quaderns crema
Encuadernación: Tapa blanda
ISBN: 9788477274520
Año: 2006
Precio: 11.00 €

Sinopsis:
Als vint contes de "Si menges una llimona sense fer ganyotes" s'hi barregen situacions quotidianes i fantàstiques que aprofundeixen en emocions comunes. L'amor no correspost, la desconfiança, els lligams familiars, l'excés de solitud o de companyia són alguns dels elements que identifiquen aquest llibre. Amb una mirada irònica, penetrant i continguda, Sergi Pàmies tracta de les servituds d'uns personatges vulnerables, esclaus d'unes circumstàncies, com les llimones, combinen l'acidesa amb les propietats refrescants (Català)

Los veinte cuentos de Si te comes un limón sin hacer muecas combinan situaciones cotidianas y fantásticas que profundizan en emociones comunes con las que resulta fácil identificarse. El amor no correspondido, la desconfianza, las dependencias familiares, el exceso de soledad o de compañía y los deseos insatisfechos son algunos de los elementos que caracterizan este libro. Con una mirada irónica, incisiva y contenida, Sergi Pàmies retrata las servidumbres de unos personajes vulnerables, esclavos de unas circunstancias que, al igual que los limones, tienen el contradictorio poder de ser ácidas y refrescantes al mismo tiempo (Castellano)

Por qué este título
"No agafo el telèfon. Per la manera com sona, penso que deu ser ella. Però si l'agafés i fos una altra persona, com em sentiria? A la ràdio, he sentit que si menges una llimona sense fer ganyotes, s'acomplirà tot el que desitgis, però em fa por provar-ho, fer ganyotes i que cap desig no es faci mai més realitat"

Opinión:
Impresión: Cohesión

Hay algo que siempre busco en los libros de relatos: que los relatos tengan finales inesperados. Yo soy muy de giros, así que para mí eso era imprescindible. Era. En pasado. Con este libro me he dado cuenta de que quizás eso no sea lo más esencial.

En este libro, casi ninguno de los relatos cortos que incluye tiene un final inesperado, pero es que tampoco pretenden tenerlos, y aún así resultan sumamente interesantes. De los veinte que hay, puede que solo haya unos tres o cuatro que no me hayan dicho nada, el resto los he leído con sumo interés. Y es que esa es otra, la lectura de los relatos suelo espaciarla, ir leyéndolos a poco a poco, asimilándolos, pero en este caso los he devorado, porque la reflexión no se saca de cada relato individual, sino de la lectura del conjunto.
Pobre autor, no comments.

Y eso es a lo que me refería con cohesión. Todos los relatos tienen el mismo tono, el mismo tipo de personajes, el mismo tipo de mensaje y reflexiones, pero en ningún momento se hace repetitivo. En conjunto, el libro pretende mostrar una visión pesimista y decadente de la sociedad actual, a partir de personajes y situaciones cotidianas. Pero este mensaje no se entiende con un relato, sino que en todos los relatos insisten en esa idea, y eso hace que te percates.

Por otra parte, me ha gustado mucho el retrato social que hace, pese a lo pesimista que es. Todos los relatos contienen reflexiones, pero de forma implícita, aquí no se trata al lector de tonto y el objetivo es decir lo máximo posible con el mínimo número de palabras. Todos los relatos describen situaciones cotidianas y preocupaciones con las que cualquiera podría identificarse (el miedo a no ser querido, la envidia, la búsqueda desesperada y absurda de la felicidad, la falta de tiempo, el miedo al futuro y a tomar decisiones, la soledad, la lucha entre la creatividad y la rutina,...) y todo de forma muy sutil.

Los personajes también me han gustado, sobre todo por el hecho de que al ser tan normales y corrientes, enseguida te identificas con ellos. Son personas vulgares, genéricas, sin nombre, con vidas convencionales, como tú y como yo. Además, los situaciones son tan corrientes, que podrías creer que está basado todo en experiencias reales. A eso hay que sumarle que hay unos cuantos relatos escritos en segunda persona que son maravillosos. La única pega es que todos los narradores (excepto en los que están en segunda persona) son hombres, algo que me ha parecido curioso.
Aún estoy confundida. Os
 prometo que esta imagen no
 tiene NADA que ver, no hay
nada parecido en ningún relato.

Lo que pretende el autor con este libro es reflejar una sociedad desilusionada con la vida, que ha visto morir la idea de "el gran sueño americano". Los relatos son concisos, descarnados y reflejan paisajes urbanos habitados por personas solitarias, gente sin pasado ni futuro, cuya vida se reduce a sobrevivir de la mejor forma posible en una sociedad que los ha condenado a la incomunicación y al anonimato.  Los personajes son gente que no tiene grandes casas ni grandes coches, que trabajan en turnos de tarde o jornada partida, que se emborrachan en casa delante del televisor, que viven entre la miseria de la cotidianidad y el consumo rápido, que van de un lugar a otro sin saber muy bien por qué y que, en definitiva, no esperan nada nuevo del futuro. Todos comparten un mismo escepticismo, la misma propensión a la pasividad: viven en casas medias, de ciudades medias y se saben condenados a la mediocridad. Y pese a ese pesimismo, no puedes evitar verte reflejado en ellos.

En cuanto al estilo narrativo, también es coherente con lo que se pretende contar. Es un lenguaje minimalista, ligero y directo, que se basa en las frases cortas y el dinamismo. Hay una gran tendencia a la sobriedad, a la precisión y a la parquedad, en especial en lo que hace referencia a las descripciones, pues los personajes, por ejemplo, se definen en cuatro pinceladas y se construyen gracias a sus acciones. 

En conclusión, un libro de relatos cortos muy bien cohesionado, con personajes y situaciones con los que enseguida te sentirás identificado. Pese a no tener giros inesperados, la reflexiones y el retrato social que hace de la sociedad actual son impresionantes. Escrito con un estilo sobrio y un tono pesimista, es un libro que se lee en un suspiro y que vale cada página. Lo recomiendo.

Cosas que he aprendido:
  • Menos es más.
  • Los relatos en segunda persona molan mil.
  • Un buen relato no tiene por qué tener un final inesperado.
  • Un libro de relatos no se convierte en un libro de verdad si los relatos no están cohesionados, no solo temáticamente, sino también por el estilo, el tono y el mensaje.
Y para terminar, os dejo con mi avance en Goodreads:


PUNTUACIÓN...4/5!

Primeras Líneas...


martes, 21 de mayo de 2019

Aventuras y desventuras de una lectora en la gran ciudad: Book Con BCN

[Esta entrada ha sido escrita en colaboración con Patt, del blog Deja volar tu imaginación, pues vino conmigo a la Book Con BCN. Antes de cada párrafo está indicado a quién pertenece cada intervención]

Laura: No soy muy fan de escribir crónicas, porque quiero ser muy exhaustiva y al mismo tiempo no quiero aburriros. Además, siempre pienso, ¿y esto a quién va a interesarle?

Patt: Em… ¿a mí?

Laura: Pero si tú ya estabas ahí, ¿pa’ qué te interesa? Este tipo de entradas me recuerdan a cuando vas a visitar a unos amigos y te muestran el álbum de fotos de su maravilloso viaje a Egipto/Cancún/inserta-el-lugar-que-sea que nunca visitarás porque eres pobre. Y me da miedo ser igual de pesada que esos amigos. Pero, al mismo tiempo estoy cansá de hablar de lo mismo en el blog, así que, como Omaira me ha animado a hacer esta entrada (wii, como mínimo una persona interesada),...

Patt: Dos ¬¬

Laura: ...aquí estoy. Aventuras y desventuras de una lectora en la gran ciudad. Por difícil de creer que parezca, nunca había estado en Barcelona. Y eso que he estudiado filología catalana. Ya, los profes siempre se burlaban de mí, qué se le va a hacer. Pero es que a mí viajar me estresa mucho. MUCHO. Y sino, que lo confirme G, que la noche antes de partir parecía un yoyó con sobredosis de cafeína.

Patt: (Rueda por el suelo de la risa por la comparación).

Laura: Y eso que no tomo café. En mi ciudad los eventos literarios no son habituales (o si los hay, yo nunca me entero), y siempre me había apetecido ir a uno pero (Laura es muy tímida)...

Patt: ¡Hola, Milaaaa!

Laura: ...pero entre que viajar me estresa por tener que organizar muchas cosas (y también es algo rata con el dinero, siempre que lo que se vaya a comprar no sean libros), que tengo muy mala orientación (tanto si conoce como si no conoce el lugar. Es capaz de perderse en una calle recta o coger un atajo y dar una vuelta a la manzana sin darse cuenta) y tener que ir sola no me convencía, nunca me había decidido. Pero entonces Patt, del blog Deja volar tu imaginación, nos habló de la Book Con BCN y me convenció.

Patt: Jajajaja y eso que ni siquiera propuse ir esta vez. Solo lo mencioné. ¡Ha sido mi mejor indirecta! Tengo que apuntarme la estrategia…

Laura: Ya, cedí tan deprisa porque ya me habías insistido otras veces para ir a otros sitios...Además, esa es la parte resumida. Antes de convencerme me tuvo que prometer que lo organizaría todo, que se convertiría en mi GPS las 24 horas, que me construiría un monumento,...

Patt: Cachis... esto se quedó pendiente...

Laura: ...que buscaría restaurantes que me gustaran (ejem, Laura se alimenta de aire, pocas cosas más le gustan) y que sería Low cost.

Patt: Peroperopero, ¡no les engañes! ¡Si dijiste que sí a la primera! Luego vino todo eso que comentas...Además, yo siempre organizo todo low cost * emoticón de las gafas *

Laura: A eso hay que sumarle que convencí a G para que me acompañara; era clave que G viniera, porque conociéndome, era capaz de perderme en el aeropuerto y terminar en China. Odio los aeropuertos. En fin, voy a ir al grano.

Patt: ¡Bien! (se acomoda).

Laura: Al final fuimos Patt, G y yo a la quedada y, pese al cansancio (basta que os diga que el viernes me levanté tan pronto que me dio tiempo a saludar a Mientras leo), nos lo pasamos de maravilla. Voy a ahorrarme los detalles y anécdotas que no vienen a cuento. Así que no os contaré cómo Patt intentó timar a la dependienta del KFC,...

Patt: ¿Perdóóóón? Oyeeee, que lo de equivocarme y sacar la tarjeta de descuento del Carrefour en vez de la de crédito fue una confusióóóón...

Laura: (Ignorándola) También me saltaré cómo nos encontramos a un imitador de Pablo Escobar ensayando su monólogo, cómo volamos en un tobodragón, cómo entrenamos para hacer el camino de Santiago caminando 33 kilómetros en tres días y cómo conseguimos un máster en llegar tarde a todo.

Patt: Pues ahora que lo pienso yo aún no he recibido el título… Humm...

Laura: (hace rodar los ojos). En esta crónica voy a centrarme en dos aspectos: las presentaciones y charlas de la Book Con BCN, y por otra parte, la ruta de librerías que hicimos durante el tiempo libre.

Book Con BCN

Laura: He de empezar diciendo que, aunque al principio tenía un montón de ilusiones puestas en esta quedada (wow, ¡conocer a autores de verdad!), a medida que iba viendo cuales eran los autores invitados mis ánimos fueron decayendo. No quiero decir que sean malos autores, en absoluto. Simplemente, no eran de mi estilo. Había oído mencionar la mayoría y, aunque no había leído casi ningún libro de ninguno de ellos, de algunos sí que tenía apuntada alguna de sus publicaciones. De todas formas, no era lo que yo esperaba. Es por eso que, como no nos llamaban la atención las presentaciones de libros que se organizaban, decidimos saltárnoslas y acudir solo a las charlas (y aprovechar para ir a librerías de segunda mano, wiiiii).

Patt: Y caminar aún más para nuestro entrenamiento del Camino de Santiago...

Laura: La mayor parte de la Book Con BCN tuvo lugar en la librería Alibri y quiero dejar constancia de que el lugar me encantó y que fue todo un acierto organizarlo allí.



Patt: Amén.

Laura: La librería era muy grande y variada y disponía de un buen espacio para las conferencias con un gran ventanal que daba a la calle (desde el cual los transeúntes nos miraban y hacían muecas. Uno incluso se hizo pasar por mimo).

Patt: ¡Me lo perdí! T_T

Laura: Además, era un lugar acogedor y con buena acústica (¡y estábamos rodeados de libros que se podían robar!). Pero lo más importante: ¡en la librería regalaban piruletas!

Patt: ¡Cierto! Yo me llevé dos. Y cuando llegué, ¿sabes lo que dijo mi madre? "Jo, podías haberte llevado más" XD

Laura: Bueno, vamos al lío. Estructuraremos esto por días y charlas, espero que os resulte interesante...


VIERNES:
- "Hablando con editoriales independientes" (Editoras de Amanecer e Insomnia. Autoras: Heredia y Mercè Homar Mas)


Laura: La idea de la charla me pareció interesante. Últimamente no paran de salir editoriales pequeñas e independientes, por lo que me parecía muy interesante saber cómo había surgido la idea y cómo habían logrado establecerse. Por desgracia, no hablaron mucho de ello. Sí que dijeron que al principio tuvieron problemas a causa de la desinformación que hay acerca de cómo montar una editorial (ejem, en realidad hay incluso un máster sobre ello).

Patt: Realmente hay por lo menos 3 XD Además de este de la Autónoma tienes otro en la Complutense y otro no oficial llamado Taller de los Libros (que yo sepa).

Laura: Por tanto, la profesionalización es posible. Pero ellas decían que habían empezado desde cero sin saber absolutamente nada, así que yo esperaba que profundizaran y dieran más detalles concretos, pero no. De todas formas, me gustó que hablaran de las virtudes (no vayamos a hablar de los defectos, por supuesto) de las editoriales independientes: el trato personal con el autor, una mayor preocupación y esmero por los libros que publican, la ilusión con la que se embarcan en cada proyecto,...

- "Qué es eso de escribir" (Anna Casanovas, Inma Cerezo, Iria G. Parente y Geo Costa)


Laura: Aunque en el momento la conferencia me gustó…, siento decir que no sé muy bien de qué se habló en ella.

Patt: Me pasa igual :s

Laura: Pero guardo un buen recuerdo, eso debería contar para algo, ¿no?

Patt: Espero…

Laura: ¿Y por qué no me enteré de nada? Puede que fuera porque quedé obnubilada con Iria G. Parente, que se adueñó por completo de la charla. De verdad, me he vuelto fan suya. Me gustó mucho la forma tan directa que tenía de expresarse y cómo lograba conectar con el público. Tengo que admitir que es algo radical y que debatir con ella sería difícil…

Patt: Lo cuál para ti es definitivamente un GRAN problema, miss Debate… :p

Laura: Cierto...pero me gustó como persona.

- "Experiencia con los premios literarios + Taller" (Carmen Sereno, Georgia Moon, Lorena Concepción y Belén Martínez, con Clara Cortés como moderadora)



Laura:  Esta charla no fue lo que yo esperaba. Pensaba que las autoras iban a darnos consejos sobre cómo presentarse a premios literarios (cómo presentar originales, en qué premios presentarse, cómo debían ser los libros...), pero en su lugar se limitaron a contar su experiencia en ellos, pues todas habían publicado algún título gracias a un premio. Pues ok. Y en cuanto al "taller"..., pues se les debió olvidar o algo (Laura se encoge de hombros).


SÁBADO:
- "Youtube como plataforma de impulso" (Paola Calasanz [Dulcinea], Patricia García [Little Red] y Rolly Haacht)

Laura: Otra charla con la que me llevé una decepción. Pensaba que hablarían de cómo Youtube ayuda a promocionar a los autores (no sé por qué creías eso...¿Por el título de la charla?), pero no. En general hablaron un poco de lo de siempre: su experiencia con Youtube, cómo la plataforma les ha ayudado a hacer contactos y conocer gente, cómo han tratado con los haters…, y un poco ya. Destacar un comentario que se hizo: según las autoras, no porque alguien sea famoso una editorial va a publicar su obra, pues las editoriales tienen en cuenta la calidad y si un libro no tiene calidad, no importa lo famosa que sea la persona, no lo publicarán. ¿Vosotros qué opináis?

Patt: Yo quiero decir que decir eso es muy bonito, pero que lamentablemente no es así; a veces solo se mira la ganancia que puede dar. Y, no nos engañemos, un nombre vende. Aunque el libro no tenga calidad. Y no lo digo por decir. Lo he escuchado de boca de un editor. Que sí, que vale, que no todos son iguales, eso está claro. Pero afirmar lo que dijeron en esa charla y quedarse tan panchos… hummm… Por otro lado, me gustaría citar un vídeo de Javier Ruescas, en el que reflexionó sobre el tema y apuntó algunos argumentos muy interesantes. Tres años después hizo otro en el que amplió la reflexión, incluyendo cómo había evolucionado el tema de los libros de Youtubers en ese tiempo. Me parece un punto de vista intermedio y con bastante sentido, aunque no esté de acuerdo totalmente.

- "Literatura para distintas edades" (Laia Soler, Jordi Sierra i Fabra y Estefanía Yepes)

Laura: Pese a que no se dijo nada que no supiera ya, creo que esta fue la charla que más disfruté. Y es que si el día anterior Iria se había apoderado de una de las charlas, en esta ocasión fue Jordi Sierra i Fabra quien llevó la voz cantante. Mirad que ha hecho conferencias este señor, pero yo no había ido a ninguna y quedé muy impresionada. ¡Menudo poder de oratoria tiene este hombre! Y su forma de expresarse también es muy divertida. Es alguien que te convence por su entusiasmo, pero que una vez te paras a analizar en detalles sus argumentos, ves que no se sostiene. No estuve de acuerdo con la mitad de cosas que dijo, pero lo pasé de maravilla.

Patt: Ídem.

Laura: Entre esas cosas polémicas que dijo, está que, según él, toda persona tiene una parte femenina y otra masculina dentro, y según si está más potenciada o no, escribe de una forma u otra (aja...). Por otra parte, habló de cómo los autores influenciaban a sus lectores, y según él, si alguien decidía no suicidarse gracias a sus libros, era porque le había influenciado, pero si alguien se suicidaba a causa de sus libros, en realidad él no tenía culpa de nada; es que esa persona ya estaba mal. No sé vosotros, ¿opináis que los libros pueden influenciarnos para hacer cosas?

Patt: Yo creo que todo puede influirnos, quizás no de una manera tan radical, pero puede. Aunque mirad la noticia que salió el otro día de una chica que se suicidó tras hacer una encuesta en instagram sobre si lo hacía o no o este otro caso. Sí, probablemente en ambos casos simplemente fueron las gotas que colmaron el vaso o las excusas perfectas para dar el paso. No creo que fueran EL motivo para ello. Pero claro, si aceptamos que algo puede influir para bien, también podrá hacerlo para mal, ¿no? El argumento de Sierra i Fabra en ese aspecto es demasiado… mmm… ¿interesado? Es decir, si mi obra hace el bien, entonces obviamente es la causante. Si hace el mal… ay, entonces es que la persona ya venía así de casa. Pues bueno.

Laura: Sobre el tema de la charla, en general estuvieron defendiendo el género de la literatura infantil y juvenil, diciendo que eso no era más que una etiqueta de mercado, y que a cualquiera le puede gustar cualquier libro a cualquier edad. Yo no termino de estar de acuerdo con eso. Según Sierra i Fabra esos libros no tienen personajes más planos ni tampoco son simples ni tienen un lenguaje más fácil. Yo he leído unas diez obras suyas y no me han gustado precisamente porque tienen esas características que él menciona. Entiendo que a alguien más mayor le puedan gustar esos libros...pero creo que son casos excepcionales. ¿Qué opináis?

Patt: Que entonces yo soy un caso excepcional XD No sé, ya sabes que en este aspecto no estoy muy acuerdo contigo. Creo que cada historia tiene sus necesidades y no por ello son mejores ni peores (y entendedme, una historia que esté bien escrita, etc., etc.). No a todas hay por qué pedirles una profundidad exhaustiva. ¿Los cuentos entonces no son buena literatura porque son simples o tienen personajes más planos? ¿Un cuento de esos de moraleja realmente es tan simple? Ais… es que con este tema me pasa lo mismo que con lo de las pelis de animación. El público general asocial “animación” con “para niños”. Y no tiene por qué. De hecho, hay películas/series de animación que no tengo claro que un niño las deba ver… o que son muy, muy profundas. Pero bueno, que me enrollo, lo que quería decir es que, a pesar de los problemas técnicos, conseguí grabar parte de esta charla. Puedes escuchar los fragmentos pinchando aquí: Parte 1, Parte 2, Parte 3, Parte 4.

- "Ilustrando historias" (Núria Aparicio, Judit Mallol, Marina Vidal y Noëlle Stephanie como moderadora)


Laura: Esta charla me llamaba mucho la atención porque me parece fascinante el tema de ilustrar historias y creo que es algo de lo que se habla bastante poco. Y es que las ilustradoras tienen mucho mérito, pero se les reconoce muy poco. La charla estuvo bien, aunque me decepcionó que hablaran de su experiencia y no del proceso de ilustrar. Hubiera sido interesante ver cómo se gestaban paso a paso las ilustraciones de una historia y que hubieran repartido bocetos (Laura, tanto quejarte, la próxima lo organizas tú).

Patt: Yo lo veo ;)

Laura: Una cosa que dijeron y que me impactó mucho fue "ilustrar no es un arte". No había reflexionado nunca sobre ello y me pareció una afirmación curiosa. Según las ilustradoras, los dibujos los hacían por encargo, no porque les saliera del alma, y por eso no era arte. Pero, ¿es que acaso no hay hoy en día obras de arte en museos que fueron encargadas? ¿Qué opináis?

Patt: Esto creo que me lo reservo para los comentarios, que si no esto se hace muy largo… :)

- "Sexo en la literatura juvenil" (Paula Gallego, Alice Kellen, Mercedes Ron, Anaïs Ansen como moderadora)

Laura: (¡Tu charla favorita! Ya te vale. Me bastó el bullying que me hicieron Patt y G ¬¬)

Patt: ¿Cómooooor? ¿Qué bullying? O.o

Laura: Vuestras sonrisitas burlonas y comentarios os delataban.

Patt: No sé de qué me hablas…

Laura: Y es que, como os podéis imaginar, no estaba muy entusiasmada con esta charla, pero en fin. No, no, lo cierto es que a mí en general me pareció bien, pese a no aportarme nada.

Patt: ¿Perdón?

Laura: Me refiero a que duró menos de lo que debería y no hablaron acerca de nada que me azorase. Pero eso tampoco está bien. Es como si prometes dar una charla sobre tartas de marihuana, pero solo hablas sobre tartas en general (¿esa era la mejor comparación que se te ha ocurrido? Me siento muy orgullosa de ella). Hablaron sobre el tema de forma muy superficial, nos querían vender que el sexo ya no era un tema tabú, pero ellas lo trataban como si lo fuera, cuidando muchos sus palabras y sin atreverse a decir según qué. No sé, a mí me dio la impresión de que se avergonzaban de ello, y eso es muy triste.

Patt: Totalmente de acuerdo. Fue una charla de sexo en la que teóricamente las ponentes afirmaban que había que romper con los tabúes mientras que ellas mismas hablaban con esos mismos tabúes que criticaban. Una paradoja.

Laura: Un ejemplo de cómo escurrieron el bulto fue cuando la moderadora les preguntó algo así: "¿Y vosotras cómo lo hacéis para documentaros para escribir según qué escenas de vuestras novelas?". Ante el silencio de las conferenciantes añadió: "¿Escucháis música, o cómo lo hacéis?" CLARAMENTE les preguntaba sobre cómo se documentaban para escribir las escenas eróticas, si se basaban en experiencias personales, en vídeos, la lectura de libros del género… Pero no, ellas se agarraron a lo de la música como a un clavo ardiente "Oh, yo al escribir no puedo escuchar música porque me desconcentra y blablabla". En fin.

Patt: Fue una verdadera pena.

Laura: Patt grabó esta charla en audio. Podéis juzgar vosotros mismos y opinar en los comentarios…

Patt: A ver qué les parece a tus comentaristas...

Laura: Dejando eso de lado, hubo dos cosas que dijeron con las que no estuve de acuerdo y que me llamaron la atención. Una de las autoras afirmó que al presentar su manuscrito a una editorial le dijeron que se lo publicarían si cambiaba la edad de los protagonistas, para que así tuvieran cinco años menos y pudieran vender el libro como juvenil. Y ella aceptó sin problemas. Y aquí es cuando yo pienso: sí que tienen que estar mal caracterizados sus personajes como para quitarles cinco años y que no se note.

Patt: Esto a mí me cortocircuitó el cerebro y, de hecho, hice una encuesta en twitter al respecto. No tuvo demasiada participación, pero parece que las personas que lo hicieron están con nosotras dos.

Laura: Otra cosa que comentaron fue que en las novelas de romance, los chicos al final tenían que ser perfectos para que a los lectores les gustaran. O en todo caso tenían que redimirse. Es decir, al final no podía terminar la novela con lo que consideraríamos una relación tóxica o que el chico siguiera dedicándose al negocio de la droga/robando (¿qué te pasa hoy a ti con las drogas?)...

Patt: Buena pregunta, Mila.

Laura: ...porque eso no dejaría a los lectores satisfechos, pese a que es algo que suele ocurrir (lo de las drogas lo dudo. Me refiero a que las relaciones reales no son perfectas) ¿Es así? ¿Se os ocurre una historia (no me vale que sea la primera parte de una trilogía y que se arregle en las continuaciones) que termine con que la pareja no es perfecta y eso os deje satisfechos?


DOMINGO:
- Desayuno literario

Laura: Como no podía ser de otro modo, llegamos tarde y nos perdimos, pero eso no es novedad. Creo que las organizadoras nos ficharon como "los tardones".

Patt: ¡Eso son imaginaciones tuyas! Ya verás como, si se pasan por aquí, lo desmienten...

Laura: El caso es que el desayuno literario se celebró en el restaurante Viena y nosotros, como ya habíamos desayunado antes de salir… pues no comimos nada (es que a quién se le ocurre desayunar antes de ir a un desayuno literario...

(Patt: ¿A nosotros?)

Laura: … ¡Había que coger fuerzas para caminar hasta allí!). Lo primero que hicimos fue charlar sobre novedades literarias que se iban a publicar próximamente...algo que hubiera estado genial si hubiera estado mejor organizado. Estaba muy mal preparado: las organizadoras no se habían mirado las novedades antes, desde la otra punta de la mesa no se veía la pantalla del ordenador donde las enseñaban (ya se podían haber puesto en medio de la mesa ¬¬) y casi no se las oía (tampoco es que se esforzaran mucho en hacerse oír).

Patt: Pues ahora que lo dices... es cierto.

Laura: Luego jugamos al quién es quién con personajes literarios y fue entretenido. Además, socializamos un poco (ya era hora). Y aunque en principio tenía que haber algún que otro juego más… lo dejaron aquí.


OPINIÓN GENERAL SOBRE EL EVENTO:

Laura: Punto número 1. La mayoría de autores que vinieron a hacer las charlas no tenían ni la experiencia ni la trayectoria suficiente como para aportarme nada nuevo. Me hubiera gustado que vinieran más autores consagrados, aunque entiendo que estén cansados de dar charlas (a excepción de Jordi Sierra i Fabra, que al parecer no se cansa).

Patt: Bueno, es que con la cantidad de libros que lleva publicados creo que podemos afirmar que es un fuera de serie total :)

Laura: Punto número 2. El evento estaba muy bien organizado (a excepción del desayuno literario): no había ruido en la sala, se cumplían los plazos y horarios, no hubo desacuerdos, en general había sitio para todo el mundo y todo tuvo lugar tal y como estaba planeado. Eso sí, para ello, las dos organizadoras no podían andarse con romances y sonrisas…

Patt: ¿No decías que a ti el romance no te iba mucho? ¿A qué viene esta crítica ahora?

Laura: (hace rodar los ojos) Pobrecitas, parecían un poco estresadas...

Laura: Punto número 3. Deberíamos haber socializado más. Lo cierto es que tenía como propósito conocer más bloggers…, pero se quedó en eso: en una intención. En parte fue culpa mía por no charlar con otros, solo hablé en el desayuno literario y con una chica que tenía una fantástica camiseta de El nombre del viento. En mi defensa, de los tres fui quién más socialicé.

Patt: Ñañañaña, yo es que... estaba cumpliendo mi función de difusión bloguera... Y bueno, socialicé tres días con G y contigo... Eso cuenta, ¿no? * cara de angelito *

Laura: ¡Yo también socialicé contigo! Así que no, no cuenta.
Patt: Bu.

Laura: También se podrían haber organizado más dinámicas de interacción…

Patt: En otras quedadas las hay. Aunque personalmente me resultan algo forzadas y no me terminan de convencer...

Laura: Pasemos al punto número 4. Dieron un montón de premios. Tras cada charla se sorteaban libros o merchandising. Fue muy guay. Por desgracia, me tocó uno que no me llamaba especialmente la atención, If I fix you de Abigail Johnson. Por otra parte, el sistema de sorteo no me terminó de convencer. En la primera charla a la que ibas te daban un número y una vez que te tocaba, ya no entrabas en más sorteos. A ver, era equitativo porque así a todo el mundo le tocaba algo...pero no era justo para los que asistían a más de una charla.

Patt: Pero recuerda que también estuvo el sorteo del hashtag y el sorteo final en el que volvían a entrar todas las papeletas que tuvieran al menos 10 sellos...

Laura: Verdad (Laura se queja solo porque no le tocó ningún libro que le interesara).

Patt: Lo sabemos.

Laura: Punto número 5. Había demasiados autores y con eso me refiero a que algunas charlas las daban cuatro o cinco personas. Yo hubiera preferido que fueran más intensas y que hablara menos gente. Me estoy dando cuenta de que me quejo mucho, así que en el punto número 6 voy a decir que, partiendo del hecho de que el presupuesto inicial era nulo, fue todo una maravilla.

Patt: ¡Aleluya! ¡Por fin algo positivo!

Laura: Se podrían haber invitado a muchos más autores y haber hecho más actividades, cierto, pero hay que tener en cuenta que todo lo ponían las organizadoras de su propio bolsillo (que sí, que los libros se los daban gratis y el espacio supongo que también), así que si hubieran hecho más cosas, hubieran tenido que cobrar entrada o vender merchandising para no salir perdiendo. ¡Y las organizadoras eran solo dos!

Patt: Lo del merchandising fue justo la solución que encontraron en la ya desaparecida Blogger Lit Con de Madrid. Vendían chapitas y con ese dinero recuperaban la inversión. Además, tener una chapa te daba un número para un sorteo especial de libros…

Laura: Buah, pero por lo que me has contado de esa quedada, no hay color, tanto al nivel de actividades como de charlas.

Patt: Bueno, también piensa que estuvo muchos años en activo. Los organizadores fueron recabando experiencia y eso también se notaba. Tiempo al tiempo :)

Laura: En fin… que a mí estas charlas no me aportaron gran cosa en general. Me gustó el evento porque fue toda una experiencia y era la primera vez que acudía a algo así, pero esperaba mucho más.



Ruta de librerías de segunda mano


"Mamá Lau: Oh, ¿paseasteis por la ciudad?
Laura: Claro, no paramos de caminar en todo el día.
Mamá Lau: ¿Y viste las Ramblas? ¿Y el Mercado de la Boquería? ¿Y la estatua de Colón? ¿Y la casa Batlló?
Laura: Eh...no.
Mamá Lau: Esto… ¿por qué en tus fotos solo salen libros y librerías?"

Patt: ¡Ey! ¿Pero qué le has contado a tu madre, Laura? ¡Las ramblas sí las vimos! De hecho, subimos y bajamos un par de veces.... El mercado... pasamos al lado como 4 veces... La estatua de Colón también la vimos, aunque no fuimos conscientes de que era esa estatua en ese momento... Y la casa Batlló... estaba a dos calles de la librería Alibri, por lo que estoy casi segura de que pasamos por la puerta en algún momento... Si es que... ¡vaya memoria!

Laura: Cierto, por las Ramblas pasamos, el mercado… pues no lo vi y lo demás… a eso yo no lo llamaría hacer turismo cultural. Dime, ¿cuántas fotos hiciste de los monumentos y cuántas de las librerías? ¿Eh? ¿EH?

Patt: ¡Bah! Menudencias...

Laura: Y es que aprovechábamos cada hueco libre de la Book Con BCN para escabullirnos e ir a librerías de segunda mano. Sí, sí, el resto de gente se marca los lugares más emblemáticos de la ciudad que va a visitar: nosotros organizamos una ruta de librerías de segunda mano, teniendo en cuenta las distancias y los horarios.


Patt: ¡Con mapa y todo!

Laura: Vamos… que casi se puede decir que fuimos a Barcelona más por las librerías que por el evento (?)

Patt: Lo cual no deja de tener gracia. Ni que en nuestras localidades no hubiera. En especial en la capital del reino…

Laura: Sacto, me parece muy mal que tú que vives en Madrid no vayas a más librerías de segunda mano, que seguro que hay muchas. En cambio, en Mallorca no tantas.

Patt: Existen las bibliotecas… Que por cierto, fuiste tú la que me impulsó a visitarlas con asiduidad de nuevo, así que… ¡menos quejas! Jum.

Laura: Ja ho sé, pero ¿qué hay mejor que tener los libros en propiedad por un precio muy bajo? Así que nos organizamos bien para ir a todas las librerías de segunda mano posibles de Barcelona. De esa manera, durante las presentaciones que no nos interesaban o durante la hora de comer íbamos una a una todas las librerías de segunda mano que podíamos. A ver, a ver, como ha dicho Patt, también visitamos las Ramblas y la Sagrada familia, que conste, no os penséis aquí que no somos personas normales (esto… fuisteis a esos sitios porque las librerías estaban cerradas en domingo y os habían echado del hotel. Tú chitón).

Patt: Jajajajaaja, ¡tocada y hundida!

Laura: En general fuimos a tres sitios. Para empezar, a todas las librerías Re-Read que encontramos. Por si no la conocéis, aquí os dejo un enlace para que busquéis la que hay en vuestra ciudad. En segundo lugar, fuimos a Tuuulibrería, para variar un poco. Por último, fuimos a Gigamesh, una librería que no es de segunda mano, pero que por Twitter me habían recomendado encarecidamente, en especial Mientras leo. Vamos a hablaros un poco de ellas:


RE-READ:

Laura: Es una cadena de librerías de segunda mano que también está en mi ciudad, y a la que G y yo vamos mucho (demasiado. Sobre todo G).

Patt: Claro, échale las culpas a G, que no puede defenderse en esta entrada… Bueno espera… ¡que existen los comentarios!

Laura: (hace rodar los ojos) Cuando descubrí que la sede de estas librerías es Barcelona… mi gozo en un pozo. Fuimos a todas las que pudimos, un total de 6. En general he de admitir que no son muy diferentes a las que hay en mi ciudad. Al haber tantas librerías, había más variedad y algunas de ellas eran muy grandes. Una cosa que valoro mucho de estas librerías es el orden.

Patt: Totalmente de acuerdo. Tuuulibrería en ese aspecto es una auténtica tortura. Aunque bueno, siempre puedes encontrar algo que no buscabas...

Laura: A ver, ni que en Re-Read fuera tan fácil encontrar cosas concretas XD.

Patt: Más fácil sí…

Laura: Además, aunque la mayoría estaban bien organizadas por géneros y orden alfabético, es cierto que había algunas mejor ordenadas que otras. En cuanto al precio, una maravilla, 2€ por libro.

Patt: Si te llevabas más de 5 claro…

Laura: ¿Y qué problema es ese?

Patt: Eh… ¿no decías que el que compraba mucho era G?

Laura: Yo me llevo cinco. El se suele llevar veinte. Ves ahí la diferencia, ¿verdad?

                 


TUUULIBRERÍA:

Laura: Para no ir solo a las Re-Read, marqué unas cuantas librerías de segunda mano que fueran diferentes, pero solo nos dio tiempo a ir a esta. Y sí, sin duda fue diferente. Resulta que Patt ya había ido en Madrid, de lo que yo no me acordaba (qué raro), así que no se sorprendió tanto como yo.

Patt: Ains esa memoria… Te tengo que comprar rabitos de pasa. Dicen que van bien para este problemilla memorístico tuyo.

Laura: A ver, cómo os digo yo esto: las paredes de la librería estaban forradas de libros hasta el techo. Había MUCHOS libros, y sin duda, había más de una ganga. En cuanto al precio, era a tu elección, algo que me parece fantástico. ¿Las pegas? No había orden y los libros que estaban arriba del todo no se veían bien. Más o menos estaban ordenados por géneros, pero no mucho. Es una buena librería en la que pasarte toda la tarde, pero por desgracia, no teníamos tanto tiempo.

GIGAMESH:

Laura: A ver, por donde empiezo. Pregunté por Twitter qué lugares literarios me recomendaban visitar y todo el mundo saltó con que tenía que ir a Gigamesh. Lo cierto es que a mí no me parecía pa' tanto. ¡No será por librerías normales que hay en el mundo! Pero al final cedí…

Patt: ¡Milagro!

Laura: … y gracias a dios que lo hice porque ¡qué maravilla! De verdad, es visita obligada, no importa que no sea una librería de segunda mano.

Patt: De hecho, fuiste la única que se hizo con librito, ¿no?

Laura: Y porque G me detuvo, porque me hubiera llevado más. Y es que para empezar, está El Librero del Mal. Pese a su nombre es una persona simpatiquísima y nos recibió estupendamente. Es el tipo de dependiente que me encanta: responde a tus preguntas con una sonrisa (y con palabras, por supuesto), siente pasión y orgullo por lo que hace, cuenta cosas interesantes y no te atosiga. En segundo lugar, el sitio me encantó. La decoración es increíble, hay un mural flipante y todos los libros son de fantasía y ciencia ficción. ¡Quiero alquilar el local, es una necesidad vital! De verdad, deberías haberme visto, con los ojos que me hacían chiribitas, saltando entre las estanterías, arrastrando a G o a Patt…
Aquí podéis ver cómo estaban
organizados los estantes

Patt: Doy fe.

Laura: … para enseñarles los maravillosos libros que había… y no solo libros. Resulta que también había figuritas, merchandising y juegos de mesa. ¡Con lo que me gustan los juegos de mesa! A eso hay que sumarle que tenía una organización de lo más particular: los libros estaban ordenados por editorial, que a su vez estaban en orden cronológico de fundación. Sé que puede parecer una idea fabulosa, pero… Al principio lo estaba alucinando, pero a mí no me termina de parecer práctico, pues hay autores que publican en varias editoriales, y si a mí me cuesta recordar el título de los libros, imaginad tener que saber también la editorial. Ahora que lo pienso, no me sé la editorial a la que pertenece ninguno de los libros que he leído.

Patt: Ay, madre mía...

Laura: Eso te obliga como comprador a bucear entre las estanterías… cosa que puede ser buena para el negocio…

Patt: … o un poco Tuuulibrería-style -.-’

Laura: ¿Y pensabais que eso era todo? Pues no. Pese a ser una librería normal, sin libros de segunda mano, El Librero del Mal me contó que iba a saldos editoriales, y allí conseguía libros que podía vender luego por tres, cuatro o cinco euros. Y no penséis que eran antiguallas, para nada; la mayoría estaban muy bien.

Patt: Porque las antiguallas no lo están, claro... ¡Laura!

Laura: Perdona, pero en Re-Read, por ejemplo hay MUCHAS antiguallas, ¿y cuántas te llevaste? Eso solo le interesa a G.

Patt: Ña.
Aquí podéis ver la disposición de la librería
Y aquí podéis ver una de los escaparates de merchandising que había


RESUMEN LIBROS COMPRADOS:
Esta es una parte de los libros que me llevé. No he puesto los libros de G porque tendría que haber hecho una panorámica.
Laura: G y yo vinimos preparados. Patt no tenía problemas, porque podía llevar tanto peso como quisiera…


Patt: Claro, claro, para hacerme otro esguince T_T

Laura: ¡Los libros lo merecen!

Patt: (hace rodar los ojos) Realmente me preocupa esta no-preocupación tuya por mi salud.

Laura: El caso... como nosotros íbamos en avión y solo llevábamos una maleta cada uno que no podía pesar más de diez kilos...Así que fuimos con las mochilas casi vacías y regresamos rezando para que los de seguridad no las pesaran (tuvimos suerte). Patt se llevó…

Patt: A ver… Déjame contar… Cinco comprados, más uno que me tocó en Alibri, más el que te regalaron a ti (terminó en mis manos, a mí no me miréis...), más el que me regalaste (¡graciaaaaaas! ¡Me hizo muchísima ilusión!). Ocho libros en total. Buff… ¡muchos más de los que esperaba! Mis estanterías protestaron.

Laura: Yo me llevé diez y G, 21. Ya, yo también veo un problema ahí. Deberíamos haber cogido una mochila más grande.

Patt: Y haber visto este programa para que vuestra espalda no muriera por el camino...

Laura: En fin, por mi parte, poco más me queda por añadir ¡Espero que os haya gustado la crónica!