No pueden soltar el móvil un instante. Cualquier rato libre de obligaciones y ya están con la maquinita jugando a videojuegos, con el ordenador en las redes sociales o enganchados a Netflix. ¿Estoy hablando de los jóvenes o de los adultos? Vemos la paja en el ojo ajeno, pero no la viga en el propio. Constantemente nos quejamos de que la juventud ha abandonado el hábito de la lectura y culpamos a la tecnología, pero cuando esa tecnología no existía, muchos adultos tampoco leían. Qué fácil es echarle la culpa a los demás: así no tenemos que esforzarnos en cambiar las cosas ni en mejorar. Es cierto que los jóvenes leen poco, pero muchos estudios demuestran que los adultos leen incluso menos.
Entiendo que es más sencillo moldear una mente joven que hacer cambiar a alguien adulto. Entiendo que cuantos más jóvenes lectores haya ahora, más adultos lectores habrá en el futuro, pero hay que dejar de convertir la lectura en una obligación, porque eso solo logra crear aversión.
Para empezar, hay que olvidarse de la idea de que los clásicos son imprescindibles; si se convierten en amantes de la literatura, tarde o temprano, cuando estén preparados, los leerán. En segundo lugar, es clave ayudarles a identificar sus gustos en lugar de obligar a leer aquello que a nosotros nos gusta. En tercer lugar, por increíble que parezca, hay otros formatos de lectura, como los audiolibros o los libros digitales que pueden captar mejor su atención, por no mencionar las novelas gráficas o los mangas.
Pero podemos ir más allá: la cultura no es solo un fajo de hojas de papel rectangular. Si nuestro objetivo es conseguir una sociedad más culta, hay que abandonar esa idea anticuada de que la literatura es la única forma de cultivarse. Está muy bien fomentar la lectura, pero cualquier forma artística, bajo un atento guiaje, puede resultar igual de beneficiosa. La película adecuada en el momento adecuado, puede significar un antes y un después en tu visión de la vida. Incluso un videojuego que no se limite al entretenimiento y que tenga como base algún mensaje o reflexión puede dejar un poso en ti.
No conozco la técnica perfecta para conseguir que los jóvenes lean, pero sí que sé lo que no funciona: la imposición. La lectura tiene que ofrecerse como un premio, nunca como un castigo. La variedad es algo clave: si no saben ni quiénes son, ¿cómo van a saber lo que les gusta? Es por eso que hay que estar a su lado, aconsejando, pero sin atosigar.
Y a vosotros, ¿cuál os parece que es la mejor forma de conseguir que los jóvenes lean? ¿Creéis que hay alguna de lograr que más adultos también lo hagan?
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Es muy difícil, pero deberíamos hacer todo lo que podemos para conseguirlo..
ResponderEliminarTOP, pero si somos demasiado pesados, corremos el riesgo de conseguir lo contrario de lo que pretendemos.
EliminarMuy graciosa la viñeta jeje. Y creo, sin duda, que el mejor modo es con el ejemplo. Si se ven rodeados de gente que lee tarde o temprano lo harán y lograrán disfrutar. Tampoco entiendo las lecturas obligatorias en los colegios e institutos; yo siempre he leído pero hubo ocasiones que le cogí manía. Qué suplicio. Deberían buscar otras opciones que les animen más
ResponderEliminarTOP en lo de las lecturas obligatorias y en lo de predicar con el ejemplo, aunque a veces esto último no es suficiente. Sé de bloggeras lectoras cuyas hijos no leen :/
EliminarHola! Realmente es una cuestión muy compleja. Muchas personas consideran que la lectura es una pérdida de tiempo, incluso recuerdo a mi propia madre diciéndome que gastarme la plata en libros era desperdiciarla en algo que no servía para nada. Creo que todos los que somos aficionados a la lectura de alguna manera hemos encontrado algo en los libros que en la vida real simplemente es muy difícil hallar: compañía y confort.
ResponderEliminarGracias por compartir! Un saludo ♥
Gracias a ti por pasarte por aquí!
EliminarQué mal que aún haya gente que piense así de los libros. Totalmente de acuerdo en que los libros son un refugio.
La lectura no debe ser impuesta.
ResponderEliminarAhora hay muchos formatos y libros,mangas y Miles de otras formas de leer y atractivos también.
Formo parte de la Biblioteca en mi país y los chicos se siguen acercando , por suerte, de a poco.
La pandemia afectó muchísimo a la lectura en papel.
Lo mismo pasa con los blog, cada vez son menos...
A no perder las esperanzas!
No sabía que trabajabas en una biblioteca. Me alegro de que los chicos sigan yendo. Y sí, es una lástima lo de los blogs, que cada vez están más en decadencia :/
EliminarHola!! a mi me paso con las lecturas obligatorias del cole que llegue al punto de no querer ver un libro porque estaba acostumbrada a que tengan un contexto que no refleje lo que interesaba, no obstante, gracias a una de esas mismas lecturas obligatorias encontré el libro que cambio mi perspectiva, abrió mi mente y le di la oportunidad a los libros. Si es cierto que hay muchas cosas que se hacen mal a la hora de inculcar el gustó por la lectura y eso hay que cambiar porque van formando una idea a raíz de lo que otras personas lo presentan y eso es malo.
ResponderEliminarPor curiosidad, ¿qué libro era?
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