martes, 25 de junio de 2024

Cerrado por vacaciones

 

He sido muy poco constante estos últimos meses por falta de tiempo. Estoy leyendo mucho y tengo muchas reseñas pendientes de escribir, pero no soy capaz de encontrar el momento. Entre que he estado estudiando a la vez que trabajaba y me encargaba de la casa, aunque podía leer en el bus, casi no disponía de tiempo para redactar una reseña, y menos ahora que cada vez me salen más largas. A eso hay que sumarle que en julio voy a ir al Celsius 232 (ya veremos si este año escribo una crónica o no) y estaré más de una semana por Oviedo, completamente desconectada de todo.

Necesito recargar las pilas y tomármelo con calma. Por eso, voy a cerrar el blog y las redes hasta agosto (eso sí, ¡no pienso dejar de pasar por vuestros blogs!), y aprovecharé para ir preparando cosas para más adelante. ¡Os deseo un feliz verano y buenas lecturas!😊


viernes, 21 de junio de 2024

Frases memorables: Choque de reyes

 

"La brujería es la salsa que los idiotas vierten sobre el fracaso para ocultar el sabor de su incompetencia."

Choque de reyes, el libro del que extraigo la cita de hoy, de George R. R. Martin, no me gustó mucho. Mucha paja, personajes planos que no se encuentran entre ellos y poca trama. Tiene cosas buenas, como los personajes femeninos y los diálogos realistas, pero se me hizo bola. Si os interesa leer la reseña, la podéis encontrar aquí.

Puedo tener muchos problemas con esta saga, pero de lo que no me quejaré es de la política y de lo bien que escribe el autor. La cita que os traigo hoy es prueba de ello. Hace una crítica a las estrategias de los gobernantes que no saben admitir sus errores al mismo tiempo que explica de dónde surge la brujería como concepto. Y todo esto en una compleja metáfora con una salsa (usando palabras relacionadas con ella, como "vierten" o "sabor").

Cuando algo sale mal, hay que buscar a alguien a quien echar las culpas y en la Edad media, los candidatos favoritos eran las brujas o el Diablo. Cuando había una desgracia, los poderosos culpaban de ello a la brujería y así se lavaban las manos, al mismo tiempo unían al pueblo contra un enemigo común

En política actual, esta práctica se sigue haciendo y se suele echar la culpa de todo a la mala gestión del Gobierno anterior, pero lo más habitual es entretener al pueblo con otro conflicto menor para que no presten atención a los errores de los políticos de turno. 

Creo que hay que tener mucho cuidado a la hora de señalar culpables, porque no tenemos todo el contexto a nuestra disposición. Por ejemplo, ante un libro con muchos errores ortográficos, enseguida nos echamos a la yugular de la editorial o si la traducción es mala, lo primero que hacemos es criticar al traductor, sin tener en cuenta todo el proceso que hay detrás de la publicación de un libro. Quizás los de la editorial pagaron a un corrector, pero les engañó y no podían invertir en otra corrección. O quizás el manuscrito original era terrible y el corrector hizo lo que pudo. En el caso de la traducción, quizás el problema fue que las condiciones laborales no eran muy buenas (retrasos en los pagos, cambios de última hora, fechas de entrega muy ajustadas) o que era uno de los primeros trabajos del traductor (todos tenemos que empezar por alguna parte). Soy muy ingenua con estos temas, pero me siento incapaz de juzgar a nadie si no tengo toda la información.

Y eso es un poco la reflexión de hoy. ¿Cuál es vuestra cita favorita de esta saga?

martes, 18 de junio de 2024

Saga La tumba sellada, Libro II: Harrow la Novena, Tamsyn Muir

Traductor: David Tejera Expósito
Editorial: Nova
ISBN: 9788418037054
Número de páginas: 648
Encuadernación: Tapa dura
Fecha de lanzamiento: 14/10/2021
Serie/Saga: Saga de la Tumba Sellada

Sinopsis:

Nada es lo que parece en las estancias del Emperador, y el destino de la galaxia descansa sobre los hombros de una única mujer.
El Emperador ha reclutado a Harrowhark Nonagesimus, la última nigromante de la Novena Casa, para combatir en una guerra perdida de antemano. Harrow tendrá que aliarse con una rival detestable y perfeccionar sus habilidades para así convertirse en un ángel de la no-muerte, pero su salud empieza a flaquear, su espada le da náuseas e incluso su mente amenaza con traicionarla.
Presa en la gótica penumbra del Mitreo del Emperador con tres profesores nada amigables y perseguida por el fantasma demente de un planeta masacrado, Harrow deberá hacer frente a dos preguntas incómodas: ¿hay alguien que intenta matarla?
Y, en caso de conseguirlo, ¿será el universo un lugar mejor?

Opinión:

Aunque Gideon La novena no me gustó especialmente, quise darle una oportunidad a esta segunda parte porque me habían dicho que era mucho mejor. A mí no me lo ha parecido en absoluto. Si no he abandonado el libro ha sido por tres razones: tanto G como su mejor amigo se lo han leído y querían comentarlo; tengo el libro firmado por la autora (estaba tan convencida de que iba a gustarme que me lo llevé al Celsius 232); G me regaló la tercera parte (Nona. Lo novena) por mi cumpleaños.

De verdad que me he esforzado cuanto he podido por disfrutar de la novela, pero no lo he conseguido, al contrario, me he sentido muy crispada. Entiendo que es una novela que puede tener su público (al igual que las novelas de erótica de dinosaurios o la literatura ergódica), como el amigo de G, que es un gran fan, pero es un público muy concreto. Hay libros que no son para mí (como los que abandoné el primer cuatrimestre del año), pero que no tienen problemas en su narrativa. Ese no es el caso de Harrow. La novena: no solo se dirige a un público muy restringido, sino que tiene problemas en su narrativa.

Había un motivo más para seguir leyendo: quería comprender por qué a algunos les ha gustado tanto esta novela y encontrar argumentos objetivos para explicar por qué a mí me parece mala. Tanto G como yo nos sentimos bastante incomprendidos, porque hay muy pocas reseñas negativas sobre esta novela; quizás porque los que se arrepintieron de leer Gideon. La novena no son tan masocas como nosotros y han pasado olímpicamente de leer Harrow. La novena. Me gustaría que esta reseña, que os adelanto que será negativa (con alguna cosa buena aquí y allá) sirviera para advertir a lectores incautos que, como yo, se han dejado seducir por el reclamo publicitario (nigromantes lesbianas en el espacio) y al mismo tiempo establecer un diálogo con aquellos a los que les ha fascinado la obra para que comprendan mi punto de vista. 

No suelo hacer spoilers en mis reseñas, pero en esta ocasión me veo en la obligación de hacer un par si quiero justificar mis argumentos. Es inevitable que en esta novela haya spoilers de Gideon. La Novena (porque una de las cosas que me enfada es que la autora se pase por el forro la novela anterior), pero por lo demás, podéis leer esta reseña sin miedo, porque avisaré antes de hacer algún spoiler.

Por qué no me ha gustado Harrow. La novena

(Avisaré con mayúsculas cuando haya un spoiler. Podéis seleccionar el fragmento para poder leerlo)


El humor

La base del humor de Muir son los comentarios fuera de tono: interrumpir una escena con un comentario jocoso inesperado, el uso de un lenguaje vulgar por parte de personajes de apariencia ominosa, la reiteración de una pulla a lo largo de la escena o insistir mucho en algo hasta el absurdo. Todo son estrategias humorísticas completamente válidas y que me podrían hacer gracia en otras circunstancias. El problema es que el contexto en el que se sitúan esas bromas no es el adecuado. 

Las novelas de Pratchett rebosan de humor absurdo, pero cuando la situación lo requiere, sabe dejar respirar a las escenas serias y no las interrumpe arbitrariamente con pinceladas de humor. No es nada fácil conjugar drama y humor y, por desgracia, es algo que Tamsyn Muir no domina. Es lógico que un personaje no quiera enfrentarse a algo y rehúya una conversación seria con un comentario humorístico; lo que no es lógico es que lo hagan TODOS los personajes en TODAS las escenas serias en las que hay emoción y que nunca se retome la conversación. Que alguien utilice el lenguaje vulgar como escudo, puede ser un buen rasgo de personaje, que deja de serlo cuando todos los personajes actúan de la misma manera. Es divertido cuando la narración recupera una broma, excepto si la situación intenta ser seria, porque rompe con la atmósfera que pretendía crear. La exageración puede ser graciosa; alargar un chiste no lo es.

El humor de Muir (una autora que, para mi sorpresa, tiene casi cuarenta años) es un humor propio de la generación Z: la gracia no se fundamenta en la construcción del chiste o el ingenio, sino en la extrañeza, el desconcierto ante algo inesperado, y la banalización de las situaciones graves. No voy a entrar en el debate de qué tipo de humor es mejor, porque es algo generacional. Solo aviso de que esto es lo que hay y de que a mí no me hace gracia. 

No sé si esto tiene que resultar gracioso o no; a mí se me hace redundante.

Lo mismo que en el caso anterior. No sé qué aporta que haya dos ejemplos. Si es gracioso, no me hace gracia.
Si el uso de todos estos referentes tenía que resultar gracioso, a mí no me lo parece.

Los misterios y la narrativa confusa

El objetivo de esta novela es confundir al lector, empezando por la narración en segunda persona pasado que sigue los pasos de Harrow. Me ha gustado la idea, porque es un tipo de narración muy poco utilizado, pero resulta desconcertante, y más porque se alterna con capítulos sobre el pasado de Harrow en tercera persona. Al final justifican el uso de la segunda persona y te revelan quién es el misterioso narrador, pero no resulta coherente, porque ese narrador en segunda persona es completamente objetivo y no aporta nada, más allá de la confusión.

SPOILER

Como todos imaginábamos, la narradora es Gideon, que está atrapada en la mente y el cuerpo de Harrow. ¿Por qué es interesante que estén conectadas? Por cómo Gideon reacciona ante los pensamientos y las acciones de Harrow y por cómo eso le permitiría comprenderla mejor. La autora se empeña en mantener la identidad de Gideon en secreto, así que en ningún momento hace ningún comentario sobre nada y no se vislumbra al personaje. Podrían habernos dicho que el narrador era cualquier otra persona y hubiera sido creíble. Además, es absurdo que, a partir del momento en que se revela el percal, Gideon empieza a reflejarse muy claramente en la narración, cuando antes no lo hacía. Todo para engañar al lector.

FIN SPOILERS 

Ojalá los capítulos en tercera persona, más escasos, fueran un alivio; no es así. En esos capítulos profundizamos en el pasado de Harrow sin que eso nos permita conocer más al personaje, porque todas esas escenas son falsas, ya que no encajan con la novela anterior. O no, quizás ese sea el verdadero pasado de Harrow y la anterior novela fue un sueño. De nuevo, la autora pretende engañarte y te hace dudar de lo que es real y de lo que no lo es. Que eso estaría bien, si no fuera porque los cambios son tan sustanciales y entran tan en contradicción con lo que sabemos, que enseguida te das cuenta de que la autora solo pretende engañar. Una forma más orgánica de hacernos dudar hubiera sido que, en las intervenciones de Harrow o cuando pensara en su pasado, hiciera mención a recuerdos que no encajan con lo que sabemos. En cambio, al dedicarle capítulos enteros, se hace cansino y repetitivo. Por supuesto, está el misterio de a qué viene todo esto y qué es real y qué no, pero más allá de eso, solo tenemos páginas y páginas de un pasado inventado, que no nos permite conocer mejor al personaje y que solo aporta confusión.

Este es uno de los párrafos inciales de la novela. Ahora ya conozco la terminología (aunque no lo han explicado mucho), pero aun así, hay cosas sigo sin comprender, como lo de "una verminosa masa liminal"

Tenía muchas esperanzas puestas en esta novela porque la protagonista era Harrow, un personaje proactivo, en lugar de Gideon, que no se enteraba de la misa la mitad ni tenía ningún interés en ello. Pero claro, si Harrow se comportara como una persona normal, si hiciera preguntas y se encontrara mentalmente estable, no habría misterios por resolver. La Harrow de este libro no se parece en nada a la que conocíamos (el porqué es otro de los enigmas centrales): no investiga, no hace preguntas y no participa activamente en la trama, sino que se encierra en sí misma y se deja llevar por las circunstancias.

Harrow está empanada, y esa es la principal excusa de la autora para abrumarnos con misterios. Muchas veces, ni Harrow ni los demás personajes reaccionan de forma lógica por conveniencias de guion. Al parecer (porque en este libro todo son suposiciones, nadie dice nada y tienes que deducirlo todo tú), el Emperador rescató a Ianthe y a Harrow, que ahora son lictoras, y las lleva a la nave principal, donde se entrenarán para enfrentarse a las Bestias de la Resurrección. Al menos, eso es lo que dice la sinopsis, pero es mentira. Sí, ambas se han ido a vivir con el Emperador y el resto de lictores, pero no las entrenan ni les explican nada, solo lo mínimo, porque nadie pregunta. Imaginaos el nivel, que no explican qué son las Bestias de la Resurrección ni cómo enfrentarse a ellas hasta una semana antes de que aparezcan, cuando al fin a Ianthe se le ocurre preguntar, pese a que en teoría llevan meses entrenándose.

Hay un montón de cosas que Harrow no sabe (ni el lector) que no se molesta en preguntar porque es tan orgullosa que prefiere vivir en la ignorancia a demostrar que no sabe algo. Desde siempre ha sido un personaje muy orgulloso, pero en el anterior libro, sí que interrogaba a los demás o investigaba por su cuenta; aquí finge. Es por eso que no nos enteramos de la mitad de lo que está pasando y tenemos que deducirlo por nuestra cuenta.

A veces, los misterios son efímeros y se resuelven al cabo de un par de páginas, así que solo existen para captar tu atención y crear confusión, ya que no hay ningún otro motivo para ocultar esa información. La mayoría de estos misterios son detalles nimios, comentarios extraños, cosas fuera de lugar o elementos que confunden. Si toda la obra se centrara en descubrir qué le ha pasado a Harrow, podrías ir relacionando pistas. El problema es que hay muchos misterios centrales y no sabes qué tiene relación con qué: qué ha pasado con Harrow, por qué el pasado de Harrow se contradice con lo que sabíamos, qué ha pasado con Gideon y los demás personajes de la novela anterior, qué papel tienen los Sangre del Edén en la trama, qué pasa con la Bestia de la Resurrección, qué pasa con Ianthe, qué pasa con Cytherea, qué es el Cuerpo, quién hay en la Tumba Sellada, cuál es el objetivo del Emperador, por qué Ortus el Primero quiere matar a Harrow... Y claro, cuando Harrow, que tiene alucinaciones cuando lee (¿esto le pasa desde siempre o no? Misterio), ve una nota que pone "Los óvulos que me diste se estropearon todos y me engañaste", no sabes qué tiene que ver con nada. Esta novela se siente como si hubieras mezclado las piezas de varios puzles y no supieras qué imagen tienen que formar al final.

Aunque la novela está protagonizada por Harrow, siento que sé menos de ella que antes de empezar, porque no sé hasta qué punto los recuerdos son falsos y porque nos muestran a una Harrow muy distinta a la de la novela anterior. La narración en segunda persona nos ofrece los pensamientos de Harrow muy de vez en cuando, pero en general, no se tratan los sentimientos del personaje. Y no es la única: ante la mayoría de revelaciones del final, los personajes no reaccionan.

La ausencia de sentimientos es un problema en una novela que pretende tratar el duelo, en especial porque solo se habla de ello solo en una escena. Allí se critica la decisión de fingir que todo va bien y no aceptar la muerte de la otra persona, sin plantear ninguna solución al drama ni profundizar en los sentimientos de una persona que está pasando por eso.

SPOILERS 

Al parecer (con esta novela todo son suposiciones), Harrow se borró de la memoria la presencia de Gideon para no sufrir. Y claro, no piensa en ella en toda la novela, hasta que en una página del final le recriminan su actitud. En ningún momento exploramos cómo se siente Harrow ni cómo lo va a sobrellevar si decide recuperar sus recuerdos. 

FIN SPOILERS

Entiendo que, en parte, esta historia se narra de forma tan confusa porque, la base es muy sencilla y la historia es previsible, por lo que de seguir una narrativa tradicional, se quedaría en nada. Desde el principio puedes imaginarte cuál va a ser la resolución de los principales interrogantes, por mera lógica, y aunque hay algunas sorpresas, a mí me han causado indiferencia, porque todo es tan ambiguo que cualquier respuesta sería válida. Para mí eso no es buena narrativa, porque no es que la autora lo tuviera todo pensado, sino que ha dejado espacio para que cualquier solución encaje.  

Tengo claro que la autora prioriza la creación de misterios por encima de los personajes, la narrativa y los temas. Puedo entender que si eres una persona a la que le gusta mucho montarte teorías, apuntar detalles y encontrar pistas que no parecen pistas, así como releer la obra para captar su significado, siempre y cuando no te moleste que todo esto sea artificial, puede gustarte. No es mi caso.

Como muestra de todo esto, os dejo el enlace a esta reseña de GR (la reseñadora está confundidísima con la novela y, aun así, le ha puesto cinco estrellas), que me parece desternillante, porque la parte con spoilers refleja perfectamente todas las preguntas que me hacía durante la lectura (y también tras terminarla).


El worldbuilding

El worldbuilding de esta novela es una pasada; lástima que no se explique nada.  La historia se ambienta en un sistema solar con nueve Casas, cada una en un planeta distinto. Cada Casa se especializa en un tipo de nigromancia distinto, pero no se explica ninguno, ni tampoco las políticas entre Casas o la cultura de cada una. No se nos muestra ninguna de las sociedades que habitan el sistema solar ni cómo la nigromancia afecta a las estructuras sociales o cómo interfiere en el funcionamiento del mundo y es absurdo que no conozcamos las características de las Casas más que por comentarios al vuelo que sueltan los personajes. Teniendo en cuenta que la mayoría de las Casas perdió a sus herederos en la novela anterior, debería haber algún tipo de reacción política. No sabemos qué dinámica hay entre ellas ni tampoco su fidelidad por el Emperador.

Las nueve Casas están gobernadas por el Nigrolord Supremo, al que consideran Dios, y por los lictores, sus manos derechas. Más allá de luchar contra las Bestias de la Resurrección, cosa que hacen una vez cada mucho, el Nigrolord Supremo es un dictador que deja bastante a su aire a los planetas, porque participa muy poco en política, y lo mismo pasa con sus lictores, así que no sé muy bien que hacen en su día a día. Hay muchas cosas sobre ellos que deberían ser de conocimiento común (cómo y por qué se asentaron en el poder, por ejemplo) que no se explican. Sí que se profundiza en cómo surgieron los lictores, pero hay muchas cosas que quedan en el aire, como la razón por la que no se crearon más ni qué meta persigue el Emperador. En un momento cuentan que se dedican a destruir planetas por un motivo X, algunos con vida en su interior, sin que eso dé pie a ningún debate moral.

Está bien reflejada la reverencia que la población siente por el Emperador, como si realmente fuera un ser divino, pero más allá de la fe ciega en él, no sabemos nada del mundo religioso de las Nueve Casas: qué rituales y celebraciones hay, qué mitos e historias, cuál es el código moral, si hay religiones disidentes, qué figuras religiosas (sacerdotes) regulan la religión y como se organizan, etc. No hay casi nada de todo esto. En la primera novela nos hablaron superficialmente de algunos detalles de la Novena Casa, pero no se sabe qué pasa en el resto de Casas.

Por ahí están el Séquito y la Armada Imperial (que no sé si son la misma cosa), algo así como policías espaciales, que no se sabe muy bien qué hacen ni contra quién luchan ni cómo se organizan. Tienen un papel relevante en la sociedad, pero no se habla de ellos. También hay por ahí una facción disidente, los Sangre del Edén, que se presentan en esta novela y de los que se sabe incluso menos, si cabe.

Tampoco sabemos nada de este mundo a nivel tecnológico. Hay naves y una forma de hacer saltos espaciales, pero no te explican nada (ni el tamaño de las naves, ni cómo se organizan, ni quién puede conducirlas ni cómo hacer esos saltos espaciales). Más allá de controlar los viajes espaciales, parece un mundo bastante similar al nuestro (con tablets y electricidad). El problema es que no se siente como tal porque los personajes rara vez usan tecnología y hablan con bastante pompa y circunstancia, por lo que la novela se siente bastante anclada en la Edad Media.

La idea de escribir una novela protagonizada por nigromantes sonaba bien, hasta que la autora decidió no explicar cómo funciona la magia. Cada Casa se especializa en un tipo de nigromancia, pero solo conocemos más o menos bien la nigromancia de huesos, la de la Novena Casa. Las habilidades de los nigromantes son muy espectaculares, pero no conocemos los límites del poder de ningún personaje y parece que pueden hacer cualquier cosa con poco esfuerzo. Es cierto que todo lo que hace Harrow está relacionado con los huesos (alzar esqueletos a partir de partículas de hueso, crear construcciones de hueso), pero el resto de nigromantes no sabes muy bien qué hacen. Hay por ahí algo relacionado con sellos, pero no se explican los tipos ni qué ni cómo se hacen. La mayoría de las luchas en esta novela son con espada, así que tiene poca gracia. Tampoco aprecio mucha diferencia entre los nigromantes normales y los lictores. Sí, pueden luchar mientras están en el Río y tienen más fuerza, así que a Harrow ya no le sangra la nariz, que no es una gran mejora, teniendo en cuenta el sacrificio que ha hecho.

En general, sabemos muy poco del mundo a todos los niveles: social, religioso, político, cultural, mágico... Y aunque algunas cosas las sabe Harrow desde pequeña, porque es parte de su mundo, la mayoría las desconoce, porque ha pasado todo su vida aislada. Podría ser una buena excusa para preguntar y que nosotros lo descubriéramos junto a ella, pero la autora prefiere mantener el misterio. 

El único momento en el que tenemos explicaciones sobre el mundo es en el material adicional que hay al final de la novela. El glosario de conceptos básicos aporta mucha información esencial, pero no lo puedes leer hasta el final de la novela porque tiene spoilers. Incluso de no ser así, este tipo de documentos deben complementar la novela, no ofrecer información necesaria que debería estar integrada dentro de la propia obra. Diría que es porque no sabe cómo meter la información, pero estoy segura de que no lo añadió para mantener el misterio. El manual para luchar contra nigromantes es de lo mejor que ha escrito la autora porque expone muy bien estrategias de combate para que la gente de a pie puede enfrentarse a un nigromante. Qué lástima que no lo hayamos visto aplicado en la novela. Por último, tenemos el diario de una persona del Séquito que ha sido secuestrada por los Sangre del Edén, cosa que nos permite conocerles mejor, aunque debido a su importancia, esto no debería ser un extra, sino formar parte de la novela. Este relato no sería tan terrible si la protagonista y varios secundarios no fueran importantes en Harrow, por lo que solo crea más misterios: cómo han llegado ahí, en qué momento de la historia principal sucede este relato, a qué se refieren con un montón de cosas que dejan en el aire, etc.


Personajes mal construidos debido al misterio

Harrow, como ya he comentado antes, es un personaje completamente distinto. Su cambio de personalidad está justificado, pero se transforma en alguien pasivo y con problemas mentales (no sabe qué es real y qué es una alucinación y tiene fallos de memoria), así que es mucho menos interesante, porque no podemos profundizar en ella ni en sus sentimientos.

En cuanto al resto, Ianthe, que cobra protagonismo, no tiene nada que ver con el personaje que conocíamos, sino que se comporta como Coronabeth. Es una chica guapa (y eso que, según la novela anterior, era un cardo), con carácter, seductora, ambiciosa, de lengua afilada e irascible. De los lictores tengo poco que decir porque los conocemos muy superficialmente y dos de ellos tienen una personalidad muy similar (el otro no habla y su único papel es intentar matar a Harrow).

El único personaje que me ha gustado es Dios. Me parece una buena forma de subvertir el tropo convertir el imponente Nigrolord Supremo en un tipo majo, ingenuo y amigable, que hace lo que puede y que está al mando porque le ha tocado, no porque lo desee. Eso sí, al final tiene un cambio de actitud que no encaja con su personaje y no me ha quedado claro si es por las circunstancias o porque fingía todo este tiempo. 

Una de las pocas escenas que me ha parecido graciosa, protagonizada por Dios.

El principal problema que he tenido tanto con el Emperador como con los lictores es que no me he creído que sean seres que han vivido diez mil años. Solo me podría creer que tienen un par de cientos de años, porque no parece que la soledad ni las pérdidas les hayan afectado lo más mínimo. No entiendo esa pasión que siguen teniendo por la vida, que se hayan adaptado a la tecnología y al lenguaje de la época y que a veces hagan comentarios propios de adolescentes. Quizás sería comprensible que uno de ellos adoptara esa actitud, si no fuera porque los cuatro son iguales.

El parecido entre los personajes no se limita a su actitud frente a la vida. En la anterior novela tenía la teoría de que Gideon era un trasunto de la autora, que reflejaba su manera de ser y de comportarse, y Harrow la Novena, por desgracia, me lo ha confirmado, porque la voz de la autora es una presencia constante. Todos los personajes tienen o una actitud muy similar a la de Gideon (es el caso de Ianthe) o como mínimo su mismo tipo de humor (que debe de ser el de la autora). He sentido que no tenían una personalidad propia porque cada dos por tres hacían comentarios que no eran propios de los personajes que nos habían presentado.

Por desgracia, este libro tampoco profundiza en el vínculo entre caballeros y nigromantes. En la anterior novela, parecían personas que se compenetraban bastante bien y que se entendía, con algunas excepciones: Harrow y Gideon y Ianthe y Naberius (los de la octava Casa aparecen tan poco que no sabría deciros). Pues precisamente estas dos parejas son las que alcanzan la lictoridad, que se fundamenta en una comprensión total entre las dos personas, es decir, cuando el vínculo es muy estrecho. Se nota que los lictores que nos quedan querían mucho a sus caballeros, a diferencia de Ianthe y Harrow. Harrow y Gideon sentían rechazo la una por la otra hasta el final de la novela anterior, donde hicieron las paces, así que su relación de amistad no tuvo tiempo de desarrollarse y mucho menos se estableció que Gideon fuera capaz de hacer lo que hizo.

Se vende que esta saga tiene nigromantes lesbianas y es cierto, porque casi todas las mujeres lo son (algo que me ha parecido muy exagerado, la verdad, casi se diría que hay poca representación hetero), pero su amor ni es correspondido ni se expresa en voz alta, así que no hay romance. De todas formas, como todos los personajes se desarrollan muy poco y pocas veces hablan de sus sentimientos porque no puede haber momentos serios que no se interrumpan con una broma, no sabemos cuál es la intensidad de lo que sienten.

Para terminar con este apartado, me gustaría hablar del elenco de personajes de la trama del pasado que, además de crear confusión, está al servicio del fanservice. En estos capítulos tienen bastante protagonismo algunos personajes que aparecieron muy poco en Gideon la Novena: Magnus, Abigail y Ortus. Ortus salía tan poco que aquí es un personaje completamente nuevo, aficionado a la poesía. Me ha gustado su caracterización, pero al estar todo envuelto en un halo de confusión, no sabemos si el personaje era así o es todo producto de la imaginación de Harrow. Magnus y Abigail, que siguen haciendo muy buena pareja y su dinámica es fantástica, por desgracia son muy secundarios. También aparecen en un par de capítulos otros personajes de la novela anterior, pero son escenas confusas que parecen un Qué hubiera pasado si..., es decir, fanfics escritos por la propia autora. Todo esto contribuye a desarrollar tarde a estos personajes secundarios, porque por circunstancias de la vida, no tienen cabida en esta historia ni pueden evolucionar.


El final abierto

Puede parecer que he odiado cada página de la novela; no es así, alguna sesalva. Después de 500 páginas de la nada más absoluta, hubo algunas escenas bien: el brazo de Ianthe, Harrow la cocinera, la fiesta de los lictores y el diálogo con Palamades. Cuando pensaba que la obra iba a remontar, llegamos al final y mi interés cayó en picado.

El final no es tan horrible como me lo había vendido G, ni mucho menos. El problema es que las respuestas que te da son las que ya esperabas, así que confirma que todas las páginas anteriores no aportaban nada, porque el conflicto que se había ido construyendo desde el principio (la amenaza del ataque de una Bestia de la Resurrección) queda relegado a un segundo plano porque aparece otro enemigo completamente sacado de la manga. No hay una catarsis de la tensión que se había ido creando y la batalla final solo me causó indiferencia porque no conocía a nadie ni ninguno de los personajes que lucha es relevante.

Por supuesto, se desvelan algunas incógnitas (y la resolución es previsible o arbitraria), pero muchas quedan sin respuesta. No tengo nada en contra de los finales abiertos, siempre y cuando no sea confuso y se resuelva el conflicto que articula la novela. Aquí no pasa ni lo uno ni lo otro. El final es muy ambiguo y no sabemos qué pasa exactamente ni con el alma ni con el cuerpo de Harrow y el epílogo solo sirve para crear más misterios y presentarte a la protagonista de la siguiente novela, Nona, por lo que no podremos entender el desenlace hasta termina la otra novela (y quizás ni allí se explique). La tengo en papel, pero paso; ya he sufrido suficiente.


Una escritura deficiente

Gideon la Novena es una novela que transcurre en un espacio cerrado (un castillo medio abandonado, con unos laboratorios mugrientos y aterradores), con poca trama, y que busca crear una atmósfera de terror. No lo consigue, porque las descripciones son confusas. Harrow la Novena, por suerte, no es una novela tan ambiental, pero las descripciones siguen siendo desastrosas. Todas las escenas de acción son confusas, así como las descripciones del Mitreo y del Río. Hay una serie de reglas a la hora de describir que Muir rompe constantemente: no puedes decirme que en la sala hay un escritorio antiguo y después que las paredes están cubiertas de huesos, lo relevante se menciona primero; y en una batalla, no puedes describir las acciones sin antes haber presentado el escenario. Además, sus descripciones están llenas de adjetivos vacíos y de expresiones que no significan nada o que resultan imposibles de imaginar. 

En su defensa, los escenarios que imagina son poco habituales, llenos de elementos sombríos y mórbidos. Entiendo que si no te fijas en la escritura, si te dejas llevar por las palabras clave y te lo imaginas como tú quieras, los espacios son verdaderamente grotescos. Además, se nota que la autora domina la terminología relativa a los huesos y la anatomía humana, porque es muy exacta al hablar de ello. Esto contribuye a crear la atmósfera y al mismo tiempo encaja con el personaje de Harrow.

«Después probaste un nuevo truco: hiciste brotar una estrecha banda de hueso desde el metacarpiano con la que rodeaste el tendón flexor antes de sacarla por el dorso de la mano»

«Te pusiste de rodillas, no sin tambalearte un poco, y la viste allí tal y como era: un bellísimo conglomerado de huesos debajo de piel y carne que albergaba en su interior las tersas riquezas que eran los músculos y el parénquima. Cuando colocaste tus manos sobre sus costillas, fuiste capaz de ver su esqueleto como si se hubiese desnudado tímidamente frente a ti, como si hubiese mudado capilares y glándulas de la rosa incipiente que era su escápula, a la luz diurna de tono anaranjado de la estación»

 

Una de las pocas buenas descripciones que he encontrado.

Al igual que en la anterior novela, se abusa de los referentes, pero es menos molesto porque no hay tantos personajes. En lugar de repetir el nombre del personaje, usar pronombres o caracterizar el habla del personaje para que podamos identificarlo, usa distintos referentes y uno se pierde. En lugar de "Ianthe" dice «La hermana que tenía una edad más parecida a la tuya» y en lugar de "Ortus" dice «El caballero vestido de negro de Harrow». A modo de botón, en una escena de cinco páginas que me molestó especialmente, la narración se refiere a Harrow de 11 maneras distintas (Harrowhark Nonagesimus, la nigromante sin maquillar de la Novena, le exreverenda hija, Novena, la profesa, Nonagesimus, la nigromante de la Novena, la sectaria sombría, la lictora de la Novena Casa, hermana, la profesa de la Novena Casa).

Este uso del paréntesis (para indicar que dos personajes hablan a la vez) solo se lo he visto a esta autora y me encanta. Lástima que lo use tan pocas veces.

Otro aspecto de la narrativa de la autora que no me ha gustado son las comparaciones. En teoría, deberían servir para intensificar o para ayudar a crear la atmósfera. En lugar de eso, rompen por completo con el tono (porque son muy extrañas y están poco relacionadas con la situación), son redundantes (porque a veces hay dos seguidas o tres seguidas) o interrumpen la narración (porque son muy largas). Si fuera algo esporádico, podría pasarlo por alto; no se puede obviar si pasa en cada página. No sé cuál es el objetivo de estas comparaciones tan extrañas, quizás tengan una función humorística, pero a mí no me lo ha parecido. He hecho una recopilación de las más desconcertantes:

  • «Golpeó la mandíbula de la caballera con la culata de la otra arma, lo que hizo que cayese al suelo como un saco de puerros en la nieve que se resbala de los brazos de uno de los zánganos tambaleantes de Elogioburgo». Funcionaría mejor con "como un saco de patatas". ¿Por qué puerros? ¿Y qué aporta que sea tan larga? Estamos en una escena de acción, así que se rompe el ritmo. 
  • «Todos se acercaron a ella, como plantas que se mueven hacia la luz del sol, como si fuese el ojo de una tormenta». ¿Qué aporta la segunda comparación? No refuerza nada, solo es relleno.
  • «Se oyó un terrible estruendo procedente del pasillo, al que siguió un chirrido sobrecogedor, como si se hubiese caído una viga. El ruido fue impresionante, como si el mundo gritase y se retorciese a su alrededor». La segunda oración significa lo mismo que la primera. Es repetitivo y relleno.
  • «Ella te miró con hastiado asombro, como si fueses un zurullo que hubiese aprendido a bailar». Esta comparación es muy extraña y mirar una mierda que baila causa "asombro", no "hastiado asombro".
  • «Te pusieron bocarriba, y la funda del mandoble hizo que te mecieses un poco a izquierda y derecha, como una tortuga con un bulto en la concha». No sé cómo imaginarme esto.
  • «Tenías el aspecto de una cucaracha aplastada contra una tarta de cumpleaños». No sé cómo imaginarme esto.
  • «El lienzo que albergaba el retrato que era su rostro se arrugó con furia apasionada» ¿Por qué complicarse tanto y no decir simplemente "Arrugó el rostro con furia"?
  • «No se produjo cambio alguno ni en la cadencia ni en el tono de Dios, pero su voz sonaba diferente. Sonaba como una herramienta de acero desmontada». No sé cómo suena una herramienta de acero desmontada (no sé cómo puede emitir siquiera un sonido) ni cómo una voz puede sonar así.
  • «El hombrecillo se acomodó en el taburete, del que no sobresalía parte alguno de su cuerpo por los lados, como un rollito de crema que encajase a la perfección en el asiento». Comparación extraña. ¿Por qué un rollito de crema y no de cualquier otra cosa? ¿Qué aporta?
  • «Mercy alzó las manos y gesticuló como si ordeñase una vaca invisible y gigante para intentar contener su arrebato». ¿Por qué esa gesticulación iba a significar que estaba enfadada?
  • «Tu profesora se encontraba frente al grupo allí reunido, ataviada con su túnica canaanita, frágil como una florecilla blanca con un melocotón podrido en lugar de corazón». Es una comparación muy extraña y larga. No puedo imaginármelo porque las flores no tienen corazón.

He querido poner un ejemplo con algo más de contexto. ¿Veis que la comparación de las salchichas rompe por completo el tono tétrico?
Todo esto es cosa de la autora, pero hay que decir que la traducción tampoco ayuda. He leído comentario que alaban la traducción, porque hay cierta localización en algunas expresiones que usan los personajes, pero lo he comparado con la obra original y hay muchas oraciones que no están bien traducidas.

Sé que esta entrada me ha quedado mucho más larga de lo habitual, pero es que ante un libro que ha tenido un éxito tan apabullante entre los lectores del género y que a mí me ha gustado tan poco, me sentía en la necesidad de explicarme con rigor. Por una parte, es un libro que no encaja conmigo, sobre todo por el tipo de humor, propio de la generación Z, como por el uso de los misterios como motor narrativo. Entiendo que a otros lectores esta novela tan irreverente les pueda hacer gracia y también que sientan interés por unir piezas, releer la obra y descubrir cada uno de los pequeños misterios que esconde. En esta entrevista a la autora podéis ver que lo que le apasiona es poner memes y citas en la obra, referencias ocultas y ver si la gente las encuentra.

Por otra parte, hay determinados aspectos de la novela que son deficientes. En cuanto al tono, no puedes pretender tratar un tema como el duelo sacando hierro al asunto y sin llegar a hablar seriamente sobre ello. El worldbuilding es muy interesante, pero no está nada trabajado y sabemos muy poco del mundo a todos los niveles: social, religioso, tecnológico, político, cultural, mágico... La nigromancia es fascinante, pero no se establecen los límites de la magia ni las reglas básicas. El misterio y la confusión reinante hacen que no sepamos nada de los personajes y que estos no tengan ni profundidad (no sabemos si lo que nos cuentan es real o no) ni desarrollo ni conozcamos sus sentimientos. Además, no solo son distintos de la novela anterior, sino que todos se hacen eco de la voz de la autora y suelen actuar o hablar de forma discordante con su personalidad. En cuanto a la ciencia ficción es básicamente inexistente, al igual que el romance: es cierto que la mayoría de mujeres son lesbianas, pero nadie sale con nadie ni sus sentimientos son correspondidos ni el amor es algo que le quite el sueño a nadie. El final me ha convencido para no seguir con la saga: los misterios o se resuelven de forma arbitraria (como todo es tan ambiguo, la solución es esa, pero podría ser cualquier otra) o de forma previsible (ya se sabía desde el principio, por lo que toda la novela es relleno) o no se resuelven (ni se van a resolver). Un final puede ser abierto y satisfactorio, pero no es el caso. A todo esto hay que sumarle los problemas narrativos: descripciones confusas, abuso de comparaciones y referentes y errores de traducción. Nunca más.

Cosas que he aprendido:

  • Las descripciones con terminología específica de huesos son molonas.
  • Los nigromantes, como personajes literarios, tienen mucho que ofrecer.
  • No se puede sostener una novela en segunda persona.

Y ya para terminar, os dejo con mis avances en Goodreads:


PUNTUACIÓN...2/5!


Primeras Líneas...


viernes, 7 de junio de 2024

Visto en las redes 66#

 ¡Hola a todos!

Ya vuelvo a estar por aquí con una nueva entrada de Visto en las redes. Entre finales de abril y principios de mayo hice un pequeño paréntesis en el blog y las redes para centrarme en leer, ya que tenía varios tochos libros en marcha al mismo tiempo. Como no estuve tan activa en redes como suele ser habitual, decidí posponer esta entrada para que englobara los dos meses. 

Para los que no lo sepa, esta sección me gusta mucho porque da pie a muchos debates, (aunque no os veo muy por la labor de debatir). Espero que la disfrutéis y que podamos comentar un montón de temas interesantes. ¡No os olvidéis de comentar todo aquello con lo que estéis o no de acuerdo!

Eso sí, antes de nada, empezaré explicando en qué consiste la sección para aquellos que aún no lo sepan. Ya sé que estos párrafos que vienen a continuación son muy repetitivos, pero siempre hay gente nueva que no sabe en qué consiste la sección y me gusta informar de ello. Visto en las redes es una recopilación de todos aquellos tweets que me han parecido interesantes (y a los que he dado retweet) publicados estos dos últimos meses (abril-mayo) por diversas personas, y una selección de las reflexiones relacionadas con el mundo literario que he compartido por las diferentes redes sociales. Es decir que... ¡atención, porque podríais salir mencionados en esta entrada! 

Me decidí a crear esta sección como excusa para hacer debates porque sé que algunos de vosotros no me seguís en las redes sociales tranquilos, estáis en la lista negra (tanto porque no os interesa como porque no tenéis una cuenta) y pensé que os podría parecer interesante tener una recopilación de esta información. Así, todos los que no tenéis redes podrías estar al tanto y los que me seguís, pero estáis saturados, podríais tener un resumen. 

Como sabéis, el blog está en varias redes: en Twitter, en Facebook, en Instagram, en The Storygraph, en Goodreads y en Bloguers (podéis acceder a mi perfil de cada red social haciendo click en los enlaces), pero estoy especialmente activa en Twitter, Facebook e Instagram, por lo que en esta sección me centraré en esas redes sociales.  

Repito, como en cada ocasión, que la idea de esta sección no es completamente mía (siempre hay que dar créditos). Me inspiré en una sección muy parecida en el blog de Deja volar tu imaginación llamada Citando a Twitter. En ella, Patt recopilaba algunos de sus retweets favoritos, aunque siempre están relacionados con reflexiones sobre el mundo en general, no centradas en el ámbito literario. 

Y sin más dilación, os dejo con la entrada:

Visto en Twitter
Me siento muy identificada con lo que dice C. G. Drews. Todo lector cree sinceramente que algún día tendrá tiempo para leer el montón de pendientes que se acumula en sus estanterías, como si el tiempo o la mortalidad fueran un constructo y no un factor importante. Tenemos suficientes libros en nuestras estanterías como para varias vidas, y aun así, seguimos comprando. ¿No os entristece pensar en los libros que tenéis y que jamáis podréis leer?

Hace un par de años que me pasa lo mismo que a Jennifer. ¡Hubo una época en que leía libros traducidos por fans! Ahora veo una coma mal puesta y me tiro de los pelos. ¿En qué me he convertido? Antes disfrutaba de libros que ahora considero mediocres o directamente malos. Me da miedo releer algunos de mis favoritos porque solo veré sus fallos. Con el tiempo, nos volvemos más exigentes y aunque en un principio eso puede parecer malo, porque nos cuesta más disfrutar de las obras, creo que es positivo, porque las obras que disfrutamos, nos gustan incluso más porque entendemos qué hace que esos libros sean tan buenos. La primera vez que leí El nombre del viento me gustó mucho más que cualquier otro libro que había leído hasta el momento, pero era incapaz de explicar por qué. Cuando lo releí, lo hice con más atención, me fijé en  los entresijos de la historia y paladeé cada página. 

Estoy muy de acuerdo con Carmen Sereno. Aunque parece que siempre voy a la caza del error ortográfico, porque os suelo compartir muchos ejemplos, en realidad solo los apunto cuando son muy notorios o se acumulan. Siempre se nos puede escapar una letra o un guion, pero cuando los hay a puñados, es porque falta profesionalidad. Los errores que más me molestan son los básicos, aquellos que incluso te marca el autocorrector. ¡Hay una línea roja gigante debajo, ¿Cómo no lo has visto?!

Entiendo que el principal problema es que esa niña era demasiado pequeña para obras como esa, pero es que es muy difícil como padre controlar todo lo que consumen los hijos. Por otra parte, puede que aunque la niña tuviera 16 años, leyera ese mismo libro y se quedara con el mismo mensaje. Como dice Vale Ivs Percy Jackson, estos libros hacen mucho daño. Puede que tú seas un adulto maduro capaz de discernir el mensaje negativo y obviarlo, pero la mayor parte de los lectores no lo hacen y menos si es un mensaje que se repite en todas las historias que lees. 

Es muy interesante esta pregunta de Mientrasleo, porque el fenómeno de los retellings lleva un par de años en auge, en concreto las reescrituras de cuentos clásicos con el objetivo de criticar el machismo. A mí los retellings me gustan, siempre que no sea exactamente la misma historia solo con un pequeño elemento diferenciador o cuando se usa el retelling como reclamo para captar a un determinado público, cuando en realidad la novela se parece muy poco al cuento original. No uses una historia como base si podrías estar usando cualquier otra, porque es aprovecharse. Me gustaron mucho Susurros, de A. G. Howard y Belleza cruel, de Rosamund Hodge, aunque tendría que releerlo. El de Cinder, de Marissa Meyer estuvo bien, pero las continuaciones me parecieron un desastre. ¿Os gustan los retellings? ¿Hay alguno que recomendéis?

Que sí, que yo soy la primera que no se informa ni un ápice sobre los autores, y que parte de la culpa la tiene la autora por usar un pseudónimo inglés, pero es que vaya tela. En la situación de Aisha, le hubiera hecho ver a la chica lo equivocada que estaba. Hay muchos prejuicios contra la literatura patria, aunque por suerte cada vez menos. Todo es más cool en inglés, así que por eso hubo una época en que los autores empezaron a usar pseudónimos de nombres ingleses, como Megan Maxwell. ¿Os parece que esa moda está decayendo? ¿Qué otros autores españoles conocéis que tengan un pseudónimo inglés?

Como mau, me voy a dormir-leer pronto y, si el libro me engancha, me quedo hasta muy tarde leyendo y me arrepiento durante todo el día siguiente. Pero es que es algo que no podemos evitar. ¿Cuál fue el último libro que os mantuvo despiertos hasta tarde?

En respuesta a Marta Madrid Ribas, no creo que todo valga en el camino de la autopromoción. No me gusta cuando las grandes editoriales mienten en cuanto a cifras, reediciones y halagos, por lo que tampoco me parece lícito en el caso de los autopublicados. Puede que no sea mentir afirmar que miles de lectores conocen una novela, porque tienes ese número de seguidores y, como mínimo, conocen la novela, pero sí que me parece engañar deliberadamente. ¿Es posible que tengas miles de lectores y solo treinta reseñas? Sí, pero también es improbable. Cuando un libro me gusta, quiero contarlo a los cuatro vientos. Eso será que a esos miles de personas les ha resultado indiferente, lo han abandonado o lo tienen criando polvo en un rincón.

Cuando echo la vista atrás y paso por alguna de mis primeras reseñas, se me cae la cara de vergüenza. Es increíble lo mucho que he evolucionado. Entiendo que los inicios no son fáciles, que tienes que encontrar tu estilo y que tienes que leer muchas reseñas para descubrir cómo estructurar las tuyas. Aun así, coincido con Leyna que incluso cuando estaba empezando con el blog, tenía claro que la parte clave de una reseña es la opinión, no el resumen. Cuando leo una reseña no es para descubrir de qué va el libro (para eso ya lo leeré), sino por qué le ha gustado (o no) a otra persona y por qué podría (o no) gustarme a mí.

Como comenta Alba G. Callejas, esto es absurdo. La literatura juvenil es introductoria y te ayuda adentrarte por primera vez en temas espinosos, con más tacto y con más sencillez. Hace que descubras el amor por las letras y que te familiarices con distintos tipos de narrativa. Si no eres un lector asiduo, da igual la edad que tengas, es perfecta para empezar. Incluso si ya tienes la costumbre de leer, un libro juvenil siempre puede ir bien para despejarte o acercarte a un tema del que no has leído nada. Tengo 28 años, estoy leyendo Moriré besando a Simon Snow y soy feliz con ello. En el caso de los jóvenes, me parece que son el sector al que más está enfocada la literatura juvenil (de allí la etiqueta, además de la edad de los personajes protagonista). Si se les obliga a leer clásicos, no solo no  comprenderán su complejidad, sino que aburrirán la lectura. Por supuesto, el nivel de madurez y los gustos de cada persona son distintos y claro que a algunos jóvenes les gustará Guerra y paz, pero serán una minoría.  Lo importante es leer lo que quieras y cuando quieras, sin imposiciones.

Hace unos años me sentía completamente identificada con este miedo de Vale Ivs Percy Jackson. No tenía pareja ni la había tenido, porque quería una relación como la que me habían prometido los libros y mis expectativas eran muy altas. Mis amigas ya habían tenido varias relaciones y yo seguía sin encontrar a nadie, así que ya estaba empezando a plantearme bajar el listón cuando encontré a G. Soy consciente de lo afortunada que soy y de lo difícil que es encontrar a alguien tan compatible. ¿Merece la pena haber esperado para encontrar a G? SÍ. ¿Merecería la pena esperar durante toda mi vida? No lo sé. Las relaciones ideales que venden los libros existen y son reales, porque es el tipo de relación que tengo. ¿Pero hasta qué punto merece la pena estar sola toda tu vida porque esas son tus expectativas? El amor que nos venden los libros es el que nos merecemos, el tipo de relación a la que deberíamos aspirar, pero, ¿a partir de qué momento hay que rendirse y bajar el listón? No sé qué pensáis vosotros sobre esto, pero yo no lo tengo nada claro.

Hay que ser muy descuidado para hacer algo así. Quizás justamente cogieron un maquetador distinto, pero el editor debería haberse dado cuenta. Pienso como Javier MartosJavier Martos: cuando haces una colección, tienes que ser consciente de cómo quedan los libros en la estantería y que todos se rijan por un mismo criterio. Por otra parte, no sé cuál es la ventaja de poner el título en el lomo hacia una dirección o hacia otra y por qué no hay una normativa que obligue a ponerlos a todos en una misma dirección. Me cansa mirar las estanterías de las tiendas e ir girando el cuello hacia un lado o hacia otro constantemente. Cuando coloqué los libros en mis estanterías, decidí ponerlos todos en una misma dirección, aunque eso implicara colocarlos al revés, y es mucho más cómodo.

Muy interesante este estudio que nos muestra Carmen Sereno y la infografía es concisa y bonita. Los datos se ven un poco pequeños, así que os animo a pulsarle para ampliar la imagen. No me sorprenden mucho los resultados (¿poesía en Canadá? ¿Hay realmente algún país en el que triunfe la poesía?) y me parece lógico que lo más leído en España sea el romance.

Este tropo está muy de moda, pero se suele meter en él cualquier cosa. Me gusta la distinción que hace  Marta Cuchelo entre el rivals to lovers y el enemies to lovers, aunque a veces los límites no están claros. ¿Qué son Harry Potter y Draco Malfoy, por ejemplo? Me gusta más el rivals to lovers porque el enemies to lovers se me hace más difícil de creer. ¿Recomendáis alguno en el que esté bien trabajada la justificación de cómo llegan al amor? Por lo general suelo encontrarme historias donde el odio no es en realidad tan profundo como nos quieren hacer creer y se resuelve hablando. O cuando uno de los dos se da cuenta de que todo eran prejuicios. Para mí, Orgullo y prejuicio no es un enemies to lovers, en cambio un romance entre Harry Potter y Voldemort sí que lo sería.

¿Sois más de magia blanda o magia dura? A mí me gusta que todo esté justificado y tenga una explicación, como en la obra de Sanderson. Eso no significa que no haya sorpresas, sino que estas vienen de una interpretación de las reglas que yo no había pensado. Prefiero conocer los límites y jugar con ellos. La magia blanda también está bien, pero a mí siempre me deja con ganas de más, como pasa en La corte de los espejos. Además, el problema de la magia blanda es que los autores suelen usarla como excusa para resolver cualquier conflicto. Como dice Marta Cuchelo, que no se explique todo no significa que no haya unas normas básicas: si en ningún momento nos han establecido que hay un hechizo para resucitar gente, no puedes usarlo al final para salvar al protagonista.

Me sumo a la campaña de promoción de sergio sobre la eBiblio. Si aún no conocéis este servicio, buscadlo ya mismo, porque hay uno en cada comunidad autónoma. Es un catálogo de libros muy completo y que se renueva con frecuencia. Está ligado a la biblioteca y es completamente gratuito. Hay novedades, revistas, libros infantiles, audiolibros, etc. No sé las vuestras, pero la mía está muy surtida. Como ya tengo muchos libros en físico para leer, la uso sobre todo para leer audiolibros.

Me sumo a la denuncia de ines scamander madrid n2 y Memphis. Me parece terrible que estemos normalizando precios tan abusivos y con cada año que pasa, con una excusa u otra, suben más. Entiendo que en inglés las tiradas son mucho más largas y por eso pueden abaratar costes, pero es que la diferencia, en algunos casos, es abismal. Además, los tirajes son bajos porque no se confía que el libro vaya a vender y porque da más caché decir que es la catorcena edición que no la segunda, pese a que se hayan impreso la misma cantidad de libros. En cuanto a lo de los libros digitales, eso sí que es un robo. Es verdad que publicar en este formato tiene un coste, pero no es tan elevado ni por asomo. Y aquí no puedes agarrarte a la excusa de la tirada para justificar la diferencia con la edición inglesa...

Estoy de acuerdo con C. G. Drews en que es muy difícil recomendar tu libro favorito a un amigo. Como comento más arriba, G ha leído algunos de mis favoritos y tras su lectura, ya no puedo seguir viendo a Sanderson con los mismos ojos. Me sigue encantando, pero ahora le veo fallos que antes no sabía que estaban ahí y eso me estropea la lectura. Pero también he estado en la posición de G y justo ahora he terminado Harrow. La novena, por recomendación de un amigo, y le he comentado poca cosa porque solo quería despotricar del libro. Aunque conozcas mucho a alguien, no siempre puedes acertar con tus recomendaciones. ¿Qué recomendación habéis hecho que no ha dado en el clavo? ¿Habéis odiado alguna vez el libro favorito de un amigo? Lo que nunca me ha pasado es recomendar un libro y que a la otra persona le guste incluso más que a mí. ¿A vosotros sí?

Durante la época en la que trabajé en una librería no me pasó eso ni una vez. Por norma general, la gente tenía muy claro lo que quería y pocas veces me preguntaban por recomendaciones. De todas maneras, me alegro de la bonita experiencia de Vale Ivs Percy Jackson y que además fuera un padre que quisiera educar a sus hijas en el feminismo.

Esta respuesta de Joe Abercrombie es a raíz de la experiencia de un lector: el autor solo firmaba libros que acabaran de comprar en el evento. Me parece una actitud muy egoísta. Normalmente, cuando voy a una firma de libros, es porque el autor me gusta y he leído y comprado sus libros hace tiempo. No sé vosotros. Es por eso que la respuesta de Abercrombie, afirmando que él firma cualquier cosa, me parece muy noble. He ido a varias presentaciones del autor y a firmas de libros y os puedo confirmar que es muy majo (pese a los libros tan chungos que escribe).  


Vaya descubrimiento esto que nos cuenta Ana Bustelo Tortella. No tenía ni idea. Yo lo hubiera separado con comas, porque queda muy raro ver escrita dos veces la misma palabra seguida. Es interesante descubrir estas cosas.

Bastante de acuerdo con Mientrasleo. No es lo mismo tener un par de estantes que un par de estanterías, como es mi caso. No sabía que tenía tantos libros hasta que hice una mudanza. Y que la mayoría de libros que compro sean gordos es algo que también se nota porque en nada me quedo sin espacio. Un drama.

Visto en Facebook
Ahora están muy de moda las ediciones especiales, pero seguro que no habéis visto algo así por ninguna parte. Esta edición de Fahrenheit 451 que nos enseña 
Proyecto Lectores Por Pasión me encanta. Sin duda, es muy poco práctico tener que quemar las páginas (y quizás cabe la posibilidad de prenderle fuego al libro sin querer), pero no es una edición al uso, sino de coleccionista, para aquellos que ya han leído la obra y son grandes admiradores del autor. Es una idea muy original y está intrínsecamente relacionada con el libro. No sé qué precio tendrá esta edición, pero seguro que no fue barato ni fácil de fabricar. Si estuviera en español y según el precio, lo compraría. ¿Sabéis de alguna otra publicación especial que sea tan original?

Leí Los capullos no regalan flores hace ya casi diez años. Fue una de las primeras novelas gráficas que pasó por mis manos y me pareció divertida aunque superficial. No sé qué pensaría ahora si la releyera. Muchos autores reniegan de obras que publicaron hace mucho tiempo porque ya no encaja con su estilo o porque han madurado como autores y ahora harían algo distinto. Lo que pocas veces hacen es revisar la obra y volver a publicarla con las modificaciones. Es lógico que 
Moderna de pueblo, tras tantos años, se haya percatado de que en su primera novela había algunos mensajes tóxicos que todas tenemos interiorizados y me alegra mucho que haya querido sacar una edición revisada en la que no borra nada del contenido original, pero sí que señala las modificaciones que haría, porque es una forma de actualizar el libro a los tiempos modernos sin cambiar el contenido original. En caso de querer hacer una relectura, optaría por esta edición sin dudarlo. ¿Sabéis de algún otro caso en el que el autor haya decidido publicar una versión revisada de su obra? ¿Os parece lícito o se debería dejar el texto tal y como está?


Visto en Instagram

Las primeras fotos que me gustaría compartiros son de Mónica Serendipia. Es la autora de ambas obras, así que supongo que ya tendrá práctica buscando espacios donde sacar bonitas fotografías. En el caso de la primera foto, ya sabéis que me enamoran las flores. Aquí no solo el azul combina con la portada, sino que, por el posicionamiento, a mí me hace pensar en un corazón. En el caso de la segunda foto, es verdad que la guirnalda con luces queda muy bien porque recuerda a las flores de la portada y le da un toque navideño, pero seamos sinceros, lo que hace que la foto me encante en la bolsa de fondo de Gigamesh. Quise comprarla una vez que fui a la tienda, pero por desgracia no les quedaban.

Menudo contraste hay entre ambas fotos de Babelreader. La primera me gusta porque recuerda al peligro y a la oscuridad, y más con esa daga que acompaña la trilogía. Los elementos oscuros y las plumas blancas encajan muy bien con las portadas, y más porque hay unas alas en el centro de todo. A eso hay que sumarle el fleco azul, a conjunto con la portada del libro que más destaca. La segunda foto está protagonizada por un libro muy cozy y acompañada por elementos muy cozys: flores, un collar de perlas, una taza de té... todo en rosa pálido a conjunto con la portada y destacando la feminidad. 

El estilo de Andrés y Susana Atrapada me gusta porque es muy similar al mío: sus composiciones son simples, con un elemento o dos que represente la obra. En el caso de la primera foto, al igual que en el de la última, ha usado bisutería, porque las protagonistas son mujeres, que parece hecha a mano y que recuerda a la época. Además, en la primera incluso ha usado unas columnas decorativas que parecen antiguas y que no tengo ni idea de dónde ha sacado. En el caso de la segunda foto, no era difícil encontrar productos alimentarios, pero me gusta cómo queda el conjunto en cuanto a color y composición.


MientrasleoS es una de las mayores fans de El principito que conozco, así que esta novedad no podía faltar en su estantería. Me encanta el merchandising que tiene de la obra, tanto la rosa como las figuritas de cartón desplegables. En cuanto a la segunda foto, no conocía esta edición de Orgullo y prejuicio y me parece muy elegante. Ojalá la edición que está a la venta incluya todo ese material que hay alrededor relacionado con la obra.


Se ve que esta saga no solo le ha encantado a Omairagtz, sino que también ha logrado inspirarla. La primera fotografía es un poco oscura, pero es algo muy adecuado con la novela. Además, los tonos marrones del edificio, que recuerdan a un caserón antiguo, combinan muy bien con la obra y la portada. En el caso de la segunda foto, el entorno natural me gusta mucho y la cascada no solo me parece preciosa, sino que encaja con el título. Un poco más de lo mismo pasa con la última foto. ¡Me sorprende que haya un encontrado un cañón y que llevara encima el libro!

Y eso es todo por hoy. Espero que os haya gustado la entrada y que os haya hecho reflexionar un poco. Ahora la que es todo oídos soy yo. Contadme, ¿qué opináis vosotros? ¿Estáis de acuerdo conmigo? ¿Qué os ha llamado más la atención? Nos leemos en los comentarios!