Hay muchos artículos hablando de los efectos nocivos de la televisión: sobrepeso, diabetes, enfermedades cardiovasculares y cáncer, resultado del sedentarismo; depresión y ansiedad, trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH), problemas de sueño y mayor impulsividad infantil, a causa del contenido. Pero como pasa con todo, es el exceso lo que hace daño. Si os fijáis, un abuso de la lectura (permanecer sentado todo el día leyendo, consumir irreflexivamente libros violentos o idealistas, perder horas de sueño a causa de la lectura) puede derivar en unas consecuencias similares.
Es cierto que consumir productos audiovisuales es más fácil que leer, puesto que es una actividad más pasiva que no requiere de tanto esfuerzo mental. Es por ello que en los niños se promueve la lectura en lugar del consumo de películas, pues es más fácil que caigan en las redes de lo segundo que de lo primero. Y es que la televisión te lo da mascado. Te pone música triste para que sepas cuando llorar, te da las descripciones en bandeja de plata para que no tengas que hacer el esfuerzo de imaginarlo tú, la cámara se centra en la expresión del personaje para que sepas cómo se siente, su duración es mucho menor... Pero también hay libros que te ofrecen muchas facilidades, libros que usan un lenguaje sencillo y cercano, donde te recuerdan constantemente la trama, donde te explicitan qué sienten los personajes para que no tengas que pensarlo.
Es por eso que ya no solo depende de la cantidad, sino también de la calidad, es decir, del tipo de libro/programa/película que consumimos. Sí, la telebasura hace daño, sí, ver películas de forma irreflexiva hace daño, pero lo mismo puede suceder con los libros. Todas las obras tienen un mensaje, aunque sea de forma subliminal, por lo que leer el mismo tipo de libro continuamente sin cuestionar su contenido es igual de pernicioso.
La televisión no incita a la violencia; algunos de sus contenidos lo hacen. Igual que pasa con los libros. Hay libros que han inspirado a la gente a cometer crímenes, incluso hay gente que se ha sentido incitada al suicidio tras la lectura de obras clásicas como Las penas del joven Werther. En todos estos casos, el problema surge a raíz de no reflexionar acerca de lo que se consume.
Ver películas o series, incluso documentales, puede ser tan positivo como leer libros, siempre y cuando no se abuse de ello y se dedique tiempo a la reflexión. ¿Creéis que es mejor que los niños están enganchados a la televisión o a los libros? ¿Os parece que los libros también pueden ser negativos para la salud? ¿Cómo podríamos quitar a los productos audiovisuales ese estigma social con el que cargan?
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Totalmente, todo en exceso hace daño, eso es con todo.
ResponderEliminarMi hijo tiene 3 años, no le pongo tanta tele, pero tampoco lo prohibo, la tv esta prendida casi todo el dia con musica, nos gusta mucho, la tv suspende la pantalla pero se escucha la musica. Luego veo series y el ni presta atencion, y otras veces 1 o 2h ve lo que el quiere que por lo general son canciones, no le gusta ver capi de caricaturas, entonces bailamos y cantamos :) aun esta pequeño nunca pide ver tv, le encanta jugar n.n y por ahora disfrutamos eso.
saludos
Ohhhh, qué mono, espero que siga así mucho tiempo.
EliminarAhí tienes a don Quijote, como ejemplo del abuso de la lectura... Todo en su justa medida está bien. El problema está ahí. En saber cuándo parar. Aunque en los últimos tiempos, más que la televisión, lo que preocupa son las horas que se pierden con el móvil y la infinidad de redes sociales. Y no solo la juventud...
ResponderEliminarBesotes!!!
TOP, TOP
EliminarAhora la televisión ha pasado de moda y se consume mucho móvil. Dices que son horas perdidas pero, ¿qué diferencia hay entre pasar dos horas mirando vídeos de YouTube o fotos de Instagram que viendo una película de sábado por la tarde de esas alemanas?
¿Te echan pelis alemanas? El problema es que son más de dos horas si te pones a sumar todos los ratos del día. Y la dependencia que tenemos de los aparatitos, que somos incapaces de hacer algo sin estar mirando el móvil de cinco en cinco minutos. La capacidad de concentrarte, de enfocarte en algo, se ha perdido. Se está perdiendo hasta la memoria. Antes tú, cuando algo te sonaba, intentabas recordar. Ahora está ahí San Google al que acudes y te lo recuerda todo. La cultura del mínimo esfuerzo... Que el móvil, ordenadores y demás tienes sus ventajas no lo dudo, pero no le estamos dando su mejor uso.
EliminarY espero que no te importe, pero te dejo el enlace a un artículo que seguro te interesa:
https://www.niusdiario.es/espana/andalucia/20230109/carta-universitario-alumnos-portatiles-moviles-profesor-policia_18_08406480.html
¿Pelis alemanas? Todos los sábados. En fin.
EliminarMuy de acuerdo contigo en que llegan a ser más de dos horas. Y lo peor es lo que dices, esa dependencia y esa pérdida de la concentración y la memoria. ¿Pero que perdamos la memoria es realmente malo? Si siempre vamos a tener Internet a nuestra disposición, ¿para qué realmente necesitamos la memoria? Nos quejamos que los niños de hoy en día no tienen tanta memoria como nosotros... pero es que nosotros tenemos mucha menos memoria que nuestros abuelos/padres, pues en nuestra época, cualquier podía consultar un libro. La sociedad, inevitablemente, evoluciona. Solo el tiempo dirá si para bien o para mal.
Me he pasado por el enlace. Muy lícita la queja de ese profesor y yo, que he trabajado en un colegio de secundaria, lo secundo. Cuesta mucho que los niños tengan un mínimo de atención; por muy lúdica que hagas la clase, cada vez retienen menos porque necesitan nuevos estímulos. Y en la Universidad un poco lo mismo. Es cierto que parte del alumnado no se presenta y del resto, la mitad están con sus dispositivos haciendo otras cosas. No me convence nada que se permita el móvil en clase.
Sin memoria, difícil resulta aprender. Creo yo. Como soy andaluza, voy a exagerar. No me veo yo a un cirujano consultando youtube para saber cómo operar a un paciente. Que es una exageración, lo sé, pero al paso qué vamos. Es que tengo el mejor ejemplo en mi casa. Mi hija lo consulta todo con el móvil, pero si le preguntas al día siguiente sobre lo mismo, no lo recuerda. Es que es un conjunto de todo, falta de concentración, de memoria, de interés. Van de foto en foto, de video en video, pero contra más corto mejor, que parece que les falta la vida si no son capaces de verlo todo. Y no asimilan nada. Es consumir por consumir.
EliminarY no me imagino lo difícil que tiene que ser dar clase hoy día. Sobre todo en la universidad, donde el portátil es un elemento más de la clase. Y a saber si están viendo los apuntes o la última serie de moda...
Y de verdad que no sabía que echaban pelis alemanas los sábados. Yo es que me quedé en la época en que te echaban clásicos, Ivanhoe, Robin Hood, El temible burlón... ¡Después de Los tres mosqueperros o David el gnomo! Ya tengo yo una edad, sí.
¡Qué gracia que no supieras lo de las películas alemanas! Son esas típicas de comedia romántica. Ya te fijarás un sábado.
EliminarPor lo demás, enhorabuena, muy bien defendido. Reflexionaré sobre lo que has dicho.
Al final todo es cuestión de equilibrio. Un saludo.
ResponderEliminarTOP TOP
Eliminarla verdad que las preguntas que planteas da para muchas tazas de té o cañitas jeje. Es un tema complicado. Yo no soy de ver mucho la tele, desde nunca pero reconozco que algunas series o documentales son increíbles, que promueven la imaginación y el querer saber. Pero yo sigo prefiriendo los libros y supongo que para motivar a otros lo mejor es el ejemplo.
ResponderEliminarComo tú, prefiero los libros, la tele solo la veo muy de vez en cuando.
EliminarTodo en exceso y en edades equivocadas puedes ser peligroso. Por ejemplo a mi la saga de juegos de Assassin me gusta mucho y no voy asesinando por allí. Puedo leer un libro "wattpad" y disfrutarlo pero sé que tienen 4000 red flags. Me encantan las películas slashers y repito, no voy asesinando por allí. Y aunque me encanta leer se que a partir de cierta hora me tengo que ir a dormir si no quiero ser un zombie en el trabajo, o si debo hacer tareas del hogar o estudiar, es lo primero, y el ocio en mis tiempos libres
ResponderEliminarun beso
TOP, TOP, muy de acuerdo contigo. Hay que ser consciente de aquello que se consume.
EliminarNo sé... trob que no hi ha punt de comparació. Un llibre té un inici i un final, mentre que a la tele et pots enganxar, fins i tot si el que fan no t'agrada. A un llibre et pots enganxar, però tard o prest acaba, i degut a que no és una activitat tan passiva com mirar sa tele, és més fàcil de deixar si has de fer altres coses. I sí, totalment cert que el problema és l'abús, però tant en la tele, com en els llibres, com en qualsevol altra cosa (videojocs, beure alcohol...).
ResponderEliminarI sí, totalment d'acord en lo de que no nomès la televisió incita a la violència... Dubto que una persona es torni violenta nomès per veure la tele. De fet, Vlad el Empalador o n'Atila no eren persones precisament pacífiques, i a ses seves èpoques no havia televisió. Això nomès em sembla una excusa barata. El problema és que la gent no és conscient del que veu i no en reflexiona, com és el cas del p0rn, que ha creat tantes expectatives falses i encara així, hi ha adults que es creuen que tot funciona com a aquests videos.
1. Bueno, bueno, això depèn del llibre. Hi ha gent que es pot llegir una manga de 12 toms seguits o una trilogia en tres dies. És cert que hi ha menos gent enganxada fins a tal punt amb els llibres, per això que deim, que mirar la tele és molt més passiu, però també n'hi ha. Ojo, que és això, no està bé ni en un cas ni en l'altre.
Eliminar2. Totalment d'acord amb el segon paràgraf
Hola Laura!! Muy elocuente la viñeta. Besos!!
ResponderEliminarMe alegro que te haya gustado.
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