Antes de partir, de Jessica Warman

La verdad es que enseguida que salió este libro no me llamó mucho la atención, pues la sinopsis auguraba un libro de misterio que no era nada de otro mundo. Pero, tras verlo tantas veces por la blogosfera y leer por encima opiniones más que positivas, decidí que echarle un vistazo tampoco me haría ningún mal.

Título: Antes de partir.

Autora: Jessica Warman.

Año: 2013
Género: Juvenil, Paranormal.
Editorial: Plaza & Janes editores.
Páginas: 352
Encuadernación: Tapa blanda

Sinopsis:

Aquella noche durmieron seis personas en el barco. Por la mañana solo quedaban cinco. Elizabeth Valchar celebra los dieciocho años con sus cinco mejores amigos en el barco de sus padres. Allí se quedan a dormir. De madrugada, un ruido constante la despierta, como un golpeo pesado, de algo vivo contra el barco, un pez grande quizá atrapado entre el muelle y la popa... Hace frío en la cubierta y Elizabeth se agarra con fuerza a la barandilla. Al llegar justo encima del sonido, mira hacia abajo y ve una persona, una chica como ella, empapada, anegada, boca abajo. Una historia de amor y de fantasmas.

Opinión:

Impresión: Mejor de lo esperado

Antes de todo, he de admitir que, como yo temía, se trata de una novela de misterio juvenil, como cualquier otra. Aún así, me ha gustado más de lo esperado, pues la trama no es tan sencilla como parece.

En esta novela destacan sobretodo los personajes, a cada cual más intrincado y con más secretos. Estos personajes, de los cuales os hablaré más detalladamente más tarde son Elizabeth, Josie, Richie, Mera, Caroline y Topher, el grupo de los populares y Alex, el rarito de turno que murió atropellado hace un año.

Sinceramente, yo no sé de donde se han sacado ese estereotipo sobre la gente popular en las películas americanas, esos que son siempre ricos, guapos, deportistas, materialistas y malos. Eso es mentira, o al menos me lo parece, tras mi experiencia en las decenas de libros que he leído dónde los populares son los protagonistas. Resulta que, casualmente, en esas novelas, no cumplen con el estereotipo. Bueno, alguna vez sí, pero todos, todos, todos, todos, todos, absolutamente todos, resultan ser en el fondo, personas con sentimientos, o que tras la experiencia X se dan cuenta de lo mal que se han portado y se arrepienten.

Elizabeth, la protagonista, no es una excepción a ello. Al principio, me caía, no mal, sino fatal. Si hubiera podido la habría matado aunque, afortunadamente, ya estaba muerta. Por suerte, a lo largo del libro, va recapacitando, y pasa del odio hacia Alex a la  aceptación. Eso, eso, aceptación, no amor. Ya estoy harta de todas esas protagonistas cursis y pijas que, al morir, se enamoran del marginado de turno, que hasta entonces odiaban. Con Elizabeth es algo totalmente diferente. Ella tiene claros sus sentimientos por Richie desde el primer momento. Aunque tras convivir tanto con Alex, se hacen amigos, pero en ningún momento sienten nada el uno por el otro.

 Alex es un personaje bastante regular. A pesar de acompañar siempre a la protagonista, enfadado al principio y amigable al final, se mantiene muy misterioso durante toda la novela. Aparte de un par de retazos vagos de su vida, no llegamos a saber más. Esto me ha parecido muy mal, pues es un personaje bastante importante.

Los otros cinco que faltan, sin contar a la protagonista, son en general, bastante complejos, y cada cual guarda en su interior sus inseguridades y secretos. Aún así, creo que la novela se centra más en Richie y Josie, a pesar de que todos por igual son sospechosos de la muerte de Elizabeth. Por culpa de eso, se fastidiado un poco el misterio.

He de hacer referencia también al espacio de tiempo. En la mayoría de los libros que he leído sobre chicas populares que se vuelven fantasmas y que deben resolver sus asuntos antes de ir al más allá, la historia suele transcurrir en pocas semanas, no mucho más. eso se debe a que, a parte de observar a los vivos, la vida de un fantasma es bastante aburrida. En este libro, no sucede eso, pues la historia se desarrolla a lo largo de casi un año entero. Y si, puedo asegurar que no me he aburrido.

Pero lo dicho, el misterio se mantiene en incógnita hasta el final. Me habría gustado que hubiera más investigación policial, que no se resolviera todo mediante los recuerdos de Elizabeth, que lo va recordando todo poco a poco. Pero bueno, tanto no se puede pedir.

En cuanto al final.... pff, pff.... esperaba algo más impactante, la verdad. Tanto misterio, tanto misterio, y en lugar de soltar la bomba de golpe, lo va soltando todo a trocitos, de manera que te sorprendes, sí, pero no lo suficiente.

En conclusión, este es un libro de verano, para leer tranquilamente bajo la sombra de un árbol una tarde aburrida. No os esperéis la joya del año, porque no lo es, pero entre los estereotipos en que se ha llenado la novela juvenil, este libro destaca.

PUNTUACIÓN...2'5/5!