
Autora: Maggie Stiefvater
Editorial: SM
Saga: Los Lobos de Mercy Falls #3
ISBN: 9788467551259
Precio: 15,95 €
Páginas: 440
Sinopsis:
Se acabó el juego, ahora las apuestas son a vida...o muerte. Los lobos de Mercy Fall vuelven a salir en las noticias. Hace diez años la manada atacó a una chica. Los periodistas manejaron la palabra accidente. Una década más tarde ha muerto otra chica. Ahora la palabra es exterminio. El tiempo se agota para Sam y Grace, para Isabel y Cole. Esta vez las despedidas pueden ser para siempre.
Opinión:
Impresión: Lento
La verdad es que esta última parte me ha parecido una broma de mal gusto. Primero Sam es lobo, luego se vuelve humano, luego, cuando estaban todos felices y contentos, Grace se vuelve lobo, y su amiga también, y luego Sam se vuelve lobo y luego vuelven los dos a ser normales y luego...
¿Pero qué es esto? Y claro resulta que "no pueden controlar las transformaciones". Sí, y por eso se transforman siempre en el peor momento. Y es que llega a ser muy previsible. Basta que los protagonistas piensen "No, ahora no" para que sepas que se van a transformar.
En fin, me parece a mi que esta no es la mejor forma de empezar una reseña, sino una crítica. Siento haberme dejado llevar, pero es que acabo de terminarlo y necesitaba a alguien con quién desahogarme.
A ver, mirándolo de lejos, el libro no es malo, solo aburrido. De nuevo, nos encontramos con personajes muy profundos que se concentran más en lo que sienten que en lo que les rodea. Y en medio de sus pensamientos, muy de tanto en tanto, nos cuentan algo que hile algo la trama. Porque, es que además, cada uno vive a su bola:
Cole solo piensa en encontrar una cura; Isabel solo piensa en Cole; Sam solo piensa en Grace; Grace solo piensa en su situación de mujer loba y su futuro. Pero, ¿qué futuro? ¿Hola? ¡Qué en unos días exterminarán a todos los lobos de la zona! ¡Moveos! ¡Tiraos de los pelos, chillad hasta quedaros sin voz, llamad a la Interpol! ¡No sé, pero haced algo! ¡No os quedéis allí como pasmarotes!
Y de entre todos, Sam, uno de los personajes más importantes, es el que menos se mueve. Si para caminar tuviera que pensar y no lo hiciera automático, me parece a mi que tendríamos a un protagonista en silla de ruedas. ¡Por favor, es que yo no lo veo normal!
La que mejor se ha portado ha sido Isabel, pues es la única que se preocupa un poco por la situación y les insiste, aunque no sirva de mucho.
En fin, acabo de releer lo que he escrito y me doy cuenta de que he vuelto a dejarme llevar. ¡Lo siento!
Tanto quejarme pero, ¿y al final qué? ¿Se resuelve el problema o se quedan durmiendo la mona pasando de todo? Pues nada, que tanto perder el tiempo y no se dan cuenta y la fecha de la cacería es ya al día siguiente. Y es aquí cuando se precipitan las cosas.
¡Oh! ¡Al fin! ¡Resulta que los personajes tienen piernas! ¡Se mueven! ¡Ay, que me emociono! pero claro, tan acostumbrada a que no pasara nada que me he quedado bastante confundida. Pero, bueno, la buena noticia es que ¡los personajes se mueven!
Lo que sí que no me ha convencido de ninguna manera es el final final.
Una recomendación: si no habéis empezado la trilogía o te has leído el primer libro, quedate allí; y si habéis leído el segundo, lamento decir que es mejor que leáis el tercero, aunque no merezca la pena, porque sino os quedareis en la incógnita.
Eso sí, que conste que estáis avisados
PUNTUACIÓN...1'5/5!


