viernes, 24 de abril de 2015

La gallina que soñaba con volar, de Sun-Mi Hwang

Sí, a mí tampoco me parece una gran historia, esa es la primera impresión. Basta con el título y la portada para desinteresar a cualquiera. Espero que vosotros hagáis como yo y os preguntéis: ¿qué clase de bloggera de más de cinco años de edad reseñaría este libro? Bueno, pues yo. Y no he sido la única.

Estos últimos días he visto este librito reseñado en varios blogs y, motivada por su corta extensión, me decidí. Y este es el resultado:

Título: “La galllina que soñaba con volar”
Autora: Sun-Mi Mwang
Título original: The hen who dreamed about fly
Autoconclusivo
Traductora: Matilde Fernández de Villavicencio
Editorial: Nube de tinta
Edición: tapa blanda con solapas
Fecha de publicación: septiembre de 2014
144 páginas
ISBN: 978-84-15594-29-1
Precio: 13,95 € en papel /7,99 euros el ebook

Sinopsis:
Esta es la historia de una gallina ponedora llamada Brote. Desde su jaula, ansía escapar a la libertad del corral y cumplir sus sueños. En su búsqueda de la felicidad, Brote se enfrentará al miedo a lo desconocido, al rechazo de los demás animales y al peligro que conlleva recorrer su propio camino.

Opinión:
Impresión: Había una vez...

Sin duda, este libro me ha recordado a mi infancia. Es como uno de esos cuentos que te contaba tu madre para dormir, pero en versión adulta. Nada de dibujitos ni de lenguaje simple, si no una prosa muy bien redactada y con profundidad.

Seamos sinceros: la trama no es gran cosa. Es tan simple como la de cualquier otro cuento, pero la belleza se encuentra en la forma de contarlo y de transmitirlo.

La protagonista es Brote, una gallina ponedora exhausta y triste  que quiere vivir en el corral y incubar su propio huevo. Aquí es cuando me quejo sobre el título. El mayor sueño de Brote es "incubar un huevo", no volar. Sí, al final menciona su deseo de volar, pero no insiste demasiado, a diferencia de lo del huevo, que lo repite constantemente. Aún así, puede entender el cambio de título: La gallina que quería incubar un huevo, no queda bien, lo mires por donde lo mires.

En fin, como iba diciendo, Brote me ha parecido una gallina muy humana, pero al mismo tiempo, muy gallina. Sus sentimientos y su actitud frente al mundo es completamente humana, pero no así su forma de ver el mundo adaptada a esperanza de vida de una gallina: ve la muerte como un hecho natural, no con el mismo temor que nosotros.


Además de las decenas de pequeños mensajes subliminales y moralejas que contiene la historia, nos ofrece un buen número de frases preciosas y pequeñas lecciones de vida.


En conclusión, que no os asuste la apariencia infantil del libro: nada es lo que parece. Es más profunda de lo que parece a simple vista y se lee en unas horas. A mí, me ha gustado, aunque sea un poco triste, es sin duda una historia muy tierna y bonita, que sin duda recomiendo.
Así, puntuándola en relación no a una novela de verdad, si no a un libro de enseñanzas, mi nota es de un 3'5/5

PUNTUACIÓN...3'5/5!

Primeras Líneas

4 comentarios:

"Sabes que has leído un buen libro cuando al cerrar la tapa después de haber leído la última página te sientes como si hubieras perdido a un amigo." Paul Sweeney