domingo, 22 de diciembre de 2013

The survival kit, de Donna Freitas

Título: The survival kit
Autor: Donna Freitas
Edad: 12-17 años
Páginas: 368
Editorial: Farrar Straus and Giroux (BYR)
Edición: Octubre, 2011
ISBN: 978-0374399177

Sinopsis
Cuando la mama de Rose muere, deja detrás una bolsa de papel café marcada como “El equipo de Supervivencia de Rose”.
Dentro de la bolsa, Rose encuentra un iPod, con una lista de canciones para llenar; la fotografía de unas peonias, para crecer; un corazón de cristal, para amar; una estrella de papel, para pedir un deseo; y una cometa de papel, para dejar ir las cosas.
Mientras Rose medita sobre el significado de cada objeto, se encuentra regresando una y otra vez a una inesperada fuente de consuelo. Will es el jardinero de su familia, la estrella de hockey de la escuela y la única persona que comprende realmente por lo que ella está pasando. ¿Puede la perdida provocar amor?

Opinión:
Impresión: Bonito

Últimamente, mis lecturas me están decepcionando: nada es lo que parece. ¿Y si la sinopsis te induce a pensar que un libro será de una manera y luego es de otra? ¿Puede llegar a gustarte? En mi caso la respuesta es sí.
La madre de Rose ha muerto (de cáncer, no un accidente ni un asesinato, como yo pensaba) y ha dejado a la traumatizada, sola con su padre y su hermano Jim. Pero el día después del funeral, Rose descubre un último regalo de su madre: un kit de supervivencia. Este contiene algunos objetos (una estrella dorada, el dibujo de una cometa un aparato de música, entre otros) que ayudaran a Rose a salir a flote.

Para empezar, yo pensaba que se iba a dar mucho más importancia al kit, un elemento que me ha resultado curioso. Pero no: son solamente objetos inconexos, a los que tú puedes darles el significado que quieras. No hay nota ni nada. Libre a tu interpretación. ¡Y yo que esperaba algo entretenido! Aunque es una buena idea, es algo demasiado subjetivo.

Otra cosa que tampoco me esperaba es el trauma de Rose. De verdad, vale que sea duro perder a una madre, pero creo que la protagonista es una exagerada. ¡Vale! ¡Criticadme! Ya sé que cada uno lo siente a su manera y que a mí no me ha pasado nunca por lo que no debería poder opinar, pero primero os lo explico y luego me juzgáis.
La madre de Rose superó un cáncer y todos esperaban que iba a superar el segundo, cosa que no fue así. Hasta aquí bien, entiendo perfectamente la decepción y la sorpresa, pero es que, si veían que iba empeorando, se podían preparar un poco ¿no? Además, deberías conocer al reacción de Rose ante la muerte de su madre, situación que se mantiene durante más de cuatro meses: está deprimida (hasta aquí normal), apenas habla u sonríe, ni se plantea salir de fiesta, se niega en redondo a tocar a su novio al que ni siquiera besa (pobre Chris), deja las animadoras, es incapaz de entrar en un campo de fútbol (allí fue donde se enteró de la noticia) se encierra en si misma y empieza a odiar la música. Esto último es exagerado: no puede soportar ni que enciendan la radio en el coche.

En un principio, pensé que se sentía culpable por la muerte de su madre, o algo, pero no, ¡la madre se muere de cáncer! ¡No hay por qué mortificarse tanto! Y así, es normal que Chris abandone a la amargada de Rose. El personaje de Chris, a pesar de lo poco que se le conoce, me ha gustado, pues es un chico muy dulce (¡oh!¡Tenéis que leer lo que hace por San Valentín!) y que tiene que aguantar mucho.
Rose, por su parte, no me ha emocionado. Conocemos a fondo sus pensamientos, sí, casi todos sobre su depresión, y cómo empieza a vivir de nuevo, gracias a la ayuda de Will, del cual se va enamorando.

El caso de Will es realmente impresionante. Resulta que él es el joven jardinero de Rose, y aunque hace años y años que trabaja en su casa ¡casi no habían intercambiado palabra! Y de repente, hablan una vez y se hacen amigos. No lo entiendo de verdad. O sea, que tienes en tu casa, casi cada día, durante más de tres años a un chico de tu edad (bueno, un año más), guapo y que va a tu instituto, ¿y nunca le dices nada? ¿Quién se traga eso?

A parte de eso, me ha gustado ir conociendo a Will, como evoluciona, como se va abriendo, como pasa de ser un chico tímido a alguien genial. Su relación con Rose también va floreciendo poco a poco y es que la novela trascurre tiene una duración de casi un año.

El gran fallo de la novela, es que se centra demasiado en Rose y se olvida del resto de personajes secundarios, que casi no se profundizan. Aún así, cabe destacar la aparición de la abuela Madison ¡qué abuela más genial! ¡Sus comentarios burlones, muy inapropiados para ella eran muy divertidos y aportaban un toque de humor a la novela. Es una pena que no tenga más protagonismo.

En cuanto a la trama, la verdad es que no hay acción, ni movimiento, por lo que la novela se hace un poco monótona. El único "problema" de Rose es el alcoholismo de su padre, aunque, como en todo, no se profundiza demasiado en el tema.

El final, es bastante previsible, así que, siento decir que aunque es una interesante novela de amor y superación, no me ha dejado huella.

PUNTUACIÓN...2'5/5!


Primeras Líneas...

1 comentario:

"Sabes que has leído un buen libro cuando al cerrar la tapa después de haber leído la última página te sientes como si hubieras perdido a un amigo." Paul Sweeney