Estos dos últimos años me ha dado por leer más clásicos que nunca, para no encasillarme, para ver qué le ha visto tanta gente. Alguno que otro me ha sorprendido, pero en general no suelen apasionarme mucho.
Estaba un poco recelosa respecto a este libro, en parte porque me resultaba muy al estilo Un mundo feliz y La naranja mecánica, dos libros que abandoné. Por otra parte, dos de mis amigas me ofrecieron reseñas muy contradictorias sobre este libro (Carme lo adoró y Omaira lo abandonó) así que estaba muy confundida. Al final me decidí a leerlo y aquí os dejo la reseña.
Título: 1984
Autor: George Orwell
Idioma de lectura: Castellano
Páginas: 382
Editorial: Austral (Destino)
Encuadernación: Cartoné
Fecha de publicación original: 1949
Fecha de la edición: 2012
Precio: 12,95€
ISBN: 978-84-233-3808-5
Traductor: Rafael Vázquez Zamora
Autor: George Orwell
Idioma de lectura: Castellano
Páginas: 382
Editorial: Austral (Destino)
Encuadernación: Cartoné
Fecha de publicación original: 1949
Fecha de la edición: 2012
Precio: 12,95€
ISBN: 978-84-233-3808-5
Traductor: Rafael Vázquez Zamora
Sinopsis:
Winston Smith decide rebelarse ante un gobierno totalitario que controla cada uno de los movimientos de sus ciudadanos y castiga incluso a aquellos que delinquen con el pensamiento. Consciente de las terribles consecuencias que puede acarrear la disidencia, Winston se une a la ambigua Hermandad por mediación del líder O’'Brien. Paulatinamente, sin embargo, nuestro protagonista va comprendiendo que ni la Hermandad ni O'’Brien son lo que aparentan, y que la rebelión, al cabo, quizá sea un objetivo inalcanzable. Por su magnífico análisis del poder y de las relaciones y dependencias que crea en los individuos, 1984 es una de las novelas más inquietantes y atractivas de este siglo.
Por qué este título...
"Mojó la pluma en la tinta y luego dudó unos instantes. En los intestinos se le había producido un ruido que podía delatarle. El acto trascendental, decisivo, era marcar el papel. En una letra pequeña e inhábil escribió:
4 de abril de 1984
Se echó hacia atrás en la silla. Estaba absolutamente desconcertado. Lo primero que no sabía con certeza era si aquel era, de verdad, el año 1984. Desde luego, la fecha había de ser aquélla muy aproximadamente, puesto que él había nacido en 1944 o 1945, según creía; pero, «¡cualquiera va a saber hoy en qué año vive!», se decía Winston."
Opinión:
He quedado con sentimientos encontrados con esta lectura, y es que ha habido cosas que me han gustado mucho y otras que no me han gustado nada. Empezaré diciendo que con este libro me he dado cuenta de que es la primera novela que leo del género. Sí, sí, la primera. Y es que Divergente, Los juegos del hambre, La trampa de los 18, El corredor del laberinto, etc., no sé que son, pero distopías os digo yo que no. Quizás un subgénero. Es que, por favor, no hay punto de comparación. Alucinada.
¿Y cuál es la diferencia, os preguntaréis? Puede que la planificación, pues todo está controlado al milímetro y todo tiene mucho sentido. Quizás que he sentido que la sociedad que se plantea es una sociedad sólida e inamovible (por favor, la de Los juegos del hambre no se sostiene, era inevitable que salieran rebeldes¬¬). Una distopía, aunque parece ser que el término ha degenerado. No consiste en el planteamiento de una sociedad futura problemática y un personaje que se rebela y lucha contra ello. Es cierto que 1984 va de eso, pero es que va más allá, y ni por asomo ese es el objetivo último de la obra.
El verdadero objetivo de este libro es criticar, no esa posible sociedad futura, sino criticar la sociedad actual (y eso que el libro fue escrito en 1949). Que al final el protagonista logre derrocar ese gobierno, no, el simple hecho de que exista un protagonista que quiera derrocar ese gobierno no es importante, es una simple excusa para desarrollar la crítica. Aplausos, por favor, y de los grandes. Mientras leía, no solo me imaginaba el 1984 de George Orwell, sino que al mismo tiempo me imaginaba el 2017 de ahora. Ha sido como hacer una lectura a dos bandas, a medida que iba leyendo, miraba cómo se reflejaba eso en la actualidad.
Además, me ha sorprendido lo fielmente que refleja una rebelión. ¿Creéis que los rebeldes son los buenos? Puede que su causa sea justa, pero ¿hasta que punto el fin justifica los medios? Este fragmento me impactó mucho, así son los rebeldes de verdad:
Por otra parte, comentar que algunas de las propuestas de Orwell son una pasada. El Ministerio de la verdad, por ejemplo. Del pasado sólo conocemos lo que nos ha llegado escrito, pero, ¿quién nos dice que esos escritos no han sido falseados? ¿Qué certeza tenemos de que eso sucedió de verdad? ¿Y si todo lo que sabemos ha pasado antes por algún tipo de filtro? Vivimos de lo que dicen los medios de comunicación. No te puedes fiar de nadie, ni de las redes sociales donde "hay libertad de expresión" (¿Realmente la hay? ¿Nunca te has detenido antes de escribir algo por el miedo al qué dirán o a que te malinterpreten o a que te critiquen o a los haters? ¿Y si todo el mundo piensa como tú pero lo calla por miedo?). Además, lo de las redes es 100% fiable, porque claro, los perfiles falsos no existen ni nada.
Un tema del que sí esperaba mucho y que no me ha terminado de convencer es el de la neolengua. En pocas palabras consiste en ir reduciendo el vocabulario poco a poco para que de este modo la gente no pueda quejarse/ver las cosas malas, porque no tendrán una palabra para expresarlo. Que como concepto está muy bien, pero no me gusta cómo está explicado, de un modo fragmentario y oscuro, "enrevesat", de forma que a mí no me ha quedado claro. Eso sí, no puedo decir que no se profundice en el tema porque al final de mi edición se incluye un capítulo dedicado únicamente a explicar el concepto.
Venga, ya. Para de hablaros sobre el maravilloso (quizás esa no sea la palabra adecuada...) mundo creado por George Orwell y os dejo descubrirlo por vosotros mismos si lo leéis. Lo que sí voy a añadir es que me gusta mucho esta sociedad que plantea el autor, pues se nota que hay un gran trabajo de planificación detrás y no deja ningún cabo suelto. Por otra parte no nos presenta el mundo de sopetón, sino que la información se nos va dando a poco a poco (o cómo mínimo en la primera mitad del libro), de manera que no te abruma.
Otra cosa que me ha sorprendido es que en esta primera mitad del libro encontramos una narración sencilla, sin un vocabulario emperifollado (Esta palabra suena fatal. No es mi culpa, mira la RAE), a diferencia de otros clásicos que he leído. Así, la lectura era ligera y la narración fácil de seguir, por lo que se ha vuelto adictiva.
Sí, cómo he dejado caer muy sutilmente, la primera parte del libro me ha parecido amena e interesante, pero la segunda parte ya es otro cantar. A partir de la mitad llegamos a un capítulo en el que se te resume de manera didáctica, como un libro de texto (realmente, es el capítulo de un libro de texto) todas las bases teóricas que se habían explicado hasta el momento. Y bé, a partir de aquí la trama ya no vuelve a ser lo mismo, porque aunque sigue igual, se da mucha más importancia a las explicaciones filosóficas de esa sociedad, con un lenguaje oscuro y complicado, hablando de forma bastante abstracta, por lo que tenía que releer las cosas un par de veces y aún así solo pillaba la mitad.
No ho sé, he tenido ese problema, de pronto todo se vuelve confuso y me costaba pillar algunas de las explicaciones, hasta el punto que no he llegado a entender el fin mismo de la distopía, quién sale beneficiado de todo esto. Esta parte ha sido muy didáctica, excesivamente, y me he aburrido, porque me sentía como en una clase de filosofía a la hora de la siesta.
Más cosas. El problema de que, como ya he dicho antes, las aventuras del protagonista sean una excusa para presentar la sociedad es que he notado que al autor le faltaba habilidad para la trama narrativa, en especial para el cambio de escenario. Me he sentido muy desorientada, porque le protagonista pasa de estar de un la oficina a su casa y de la oficina a mitad de la calle sin transición, sin que se nos diga que está saliendo o que se va a caminar o lo que sea y me costaba mucho enfocarlo en un espacio concreto.
Precisamente, otra cosa de la que quería hablaros era del enfoque, algo que me ha parecido muy acertado. El narrador es en tercera persona y sigue a Winston (¿Tú también te acabas de dar cuenta de que llevas más de la mitad de la reseña y es la primera vez que mencionas al protagonista, verdad? Te dije que no era importante), que nos ofrece una perspectiva crítica de la sociedad en la que vive. Así, podría parecer que el enfoque se centra en su punto de vista, pero no es así, porque poco a poco van discurriendo una serie de personajes secundarios que nos dan a ver su punto de vista. Esto me ha parecido muy acertado porque así tenemos una perspectiva global.
Además, estos personaje no están ahí "per fer planta", sino que tienen una función: mostrar cada uno una posición diferente respecto a la sociedad que se plantea. Sí, a diferencia de otras distopías no encontramos el bando de los buenos y el de los malos, el de la autoridad y el de los rebeldes, sino que como en la actualidad hay diferentes partidos, allí también hay diferentes bandos, aunque solo se diferencien unos de otros por pequeños detalles.
Así, los secundarios me han resultado interesantes, pero tampoco puedo hablar mucho de ellos porque no se profundiza. Los más destacados, Julia y O'brien, me han parecido muy interesantes, aunque admito que me los esperaba muy diferentes a como son, quizás más parecidos a Winston
Winston es un personaje que me ha gustado, su evolución es especial y tiene una voluntad de hierro. Me ha parecido interesante que no lo conociéramos solo en el presente, sino que se nos dieran datos de su vida en el pasada, pero aún así, tampoco es que me haya conmovido como personaje.
En cuanto al final, pues también me ha dejado un sabor agridulce. Es un final que ya me esperaba, no porque la novela sea previsible, sino porque el tono de la novela ya te hace ver por donde irán los tiros (estás muy folclórica hoy con tanto dicho y palabra en catalán, ¿no?) y aún así,...No lo acepto. Que no, no lo acepto, no acepto que termine así. No estoy conforme.
En conclusión, 1984 me ha parecido un clásico que se conserva muy bien y que en la actualidad tiene mucha vigencia. un libro que romperá tus esquemas en cuanto a distopías. Una sociedad muy bien plateada que te hará reflexionar sobre el mundo al cuál nos encaminamos. A una primera parte brillante y con buenos personajes le sigue una parte más didáctica y reflexiva, "més difícil de païr" y con la que le he dado demasiadas vueltas a la cabeza. Sin duda, es un libro recomendable, pero no es un libro para todo el mundo, si quieres ver las bases de una buena sociedad distópica, muy real, adelante, si buscas, acción o un personaje rebelde que se enfrenta a la autoridad, pues no es tu libro.
Y vosotros, ¿qué opináis? ¿Lo habéis leído? ¿Os gusta el género? ¿Os llama la atención la novela?
Y para terminar, os dejo con mi avance en Goodreads:
PUNTUACIÓN...3/5
Primeras Líneas...
¡Hola! ¿Qué tal todo? Hacía siglos que me pasaba por aquí (ni por ningún blog, en realidad), pero he visto que habías publicado la reseña por twitter y me ha picado la curiosidad.
ResponderEliminarUn mundo feliz, 1984 y Fahrenheit 451 son, para mí, la triple corona de la novela distópica. Buenas propuestas, estilos trabajados e historias con calado social DE VERDAD.
Un mundo feliz me encantó, la verdad, pero no puedo decir lo mismo de esta novela de Orwell.
Para empezar, el propio Orwell es un personaje que no acabo de tragar. No cabe duda de que hay elementos de su obra que me gustaron en su momento, pero no deja de ser pura propaganda antisoviética y socialista. Una crítica absolutamente sesgada y malintencionada que malamente yo veo extrapolable a nuestros días. Partiendo de esa base, me resulta bastante desagradable afrontarlo, así que opaca todo lo bueno que pueda verle en otros aspectos.
No obstante, me alegra que lo hayas disfrutado, con sus más y sus menos.
Un abrazo,
Clara S
¡Hola Clara, cuánto tiempo! Pues sí, yo me paso de tanto en tanto por tu blog como lectora invisible, y se te echa de menos por aquí. De las novelas distópicas que mencionas (es que menuda diferencia con las novelas "distópicas" YA) he leído Fahrenheit y sin duda me encantó, coincido contigo. El de Un mundo feliz no me llama tanto y ahora estoy un poco saturada de clásicos, pero quizás en un futuro...
EliminarEn cuanto a Orwell, no sé, nunca me informo de los autores antes de leerlos libros, y por mi parte no noté la propaganda antisoviética y socialista, quizás porque no presté suficiente atención, ya me bastaba con ir siguiendo el hilo de la la estructura de la sociedad... Quizás en una relectura lo notaría, pero ahora mismo ni me lo planteo.
En fin, espero charlar contigo más a menudo ;)
Holaa^^
ResponderEliminarYo hace muchos años vi una de las adaptaciones y quedé bastante traumada la verdad. Ahora me estoy leyendo el libro y me está gustando mucho, pero como bien dices, no es un libro para todo el mundo.
Un besito :)
Anda, pues no me había planteado la existencia de la película... Bé, si quedaste traumatizada, entonces va a ser que no la veo :P Me alegro de que te esté gustando el libro, luego ya compartiremos opiniones^^
EliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminar¡¡Hola, Lau!!
ResponderEliminarVaya, me ha gustado mucho tu reseña, siempre tan detallista. Al igual que tú he recibido muchas opiniones sobre este libro, unas buenas, regulares y otras que me piden a gritos que no me acerqué a este libro, pero en el fondo quiero leerlo, pero hacerlo despacio, no sé si me entiendes, me gusta tomarme los clásicos con calma y aunque parezca un tanto loco, sin expectativas (aquí es donde me dices que leer reseñas de 1984 no va a ser que llegué a él precisamente sin expectativas), pero ayuda aunque no lo creas, me ayuda leer tanto positivas como negativas porque al final llegó al libro sin tener una opinión que pese más, equis, ese no es punto del comentario.
Me llamó la atención lo de la neolengua, fíjate que en las reseñas que había leído nunca hicieron mención del tema, y si lo hicieron no me fije. También me pareció muy fuerte la primera captura de texto que colocas, me quedé así como que wooow, sé que no será una lectura comparable. En fin, cuando me anime a leerlo te diré que tal.
Nos leemos, abrazos.
Entiendo, sí, es mejor ir sin expectativas, como yo, una reseña positiva y otra negativa :P
Eliminar¿Primera vez que oyes lo de la neolengua? Anda, pues mira que es un tema importante en el libro...Entiendo que te haya parecido muy fuerte la primera captura, a mí también me impresionó muchísimo.
Bé, estaré al tanto a ver cuando te animas ;)
¡Hola!
ResponderEliminarPues, antes me parecían geniales eso de que el protagonista don-nadie se formara un ejército y fuera el líder de la rebelión... Hasta que me aburrí. Con el tiempo entendí eso que tú dices, y estoy 100% de acuerdo. No recuerdo dónde fue que lo leí, pero una vez vi en un artículo que hablaba de este tema que una distopía no es solo un gobierno opresor, también se trata de la mentalidad de la sociedad y la cultura. Un buen ejemplo es lo que está pasando mi país Venezuela, siempre bromeo con mi mamá diciendo que estos son los verdaderos juegos del hambre.
Como soy muy previsible, me voy a leer el libro. Ya lo tenía en mi lista de pendientes y a mí también se me pegó la fiebre de os clásicos...
Un abrazo ❤
Muy de acuerdo contigo, si Los juegos del hambre me gustó mucho y si encuentro una obra con una base original de esta temática me lo apunto, pero he leído tantas que me ha pasado como a ti y me he cansado.
EliminarY sí, es que es eso, una distopía no consiste solo en un gobierno opresor :/ Y lo de Venezuela...sin comentarios :(
Me alegro de que lo tengas apuntado, luego ya compartiremos impresiones ;)
A mi la verdad me parece un libro muy adelantado a su época y de hecho se podría decir que roza con lo que sucede en algunos países del mundo como Venezuela por ejemplo.
ResponderEliminarPD: Muy buen blog, me gusta el conjunto y el contenido, me haré seguidor habitual :). Saludos.
EliminarVaya, lo de Venezuela es justo lo que comentaba más arriba Jeanny, pues sí, coincido con eso.
EliminarY me alegro que te haya gustado el blog y que te quedes por aquí :)
¡Hola!
ResponderEliminarTengo muchas ganas de leer este libro y después de leer tu reseña creo que lo antepondré a mis lecturas a pesar de que no te haya gustado del todo.
¡Nos leemos!
¿Sí? Idò, a ver qué te parece ;)
EliminarSí recuerdo que también me aburrí en algunas partes, que se me hicieron densas y que no llegué a comprender mucho. Pero en general disfruté mucho con la lectura. Eso sí, la leí hace años, muy jovencita, cuando aún no existía Los juegos del hambre y demás... Me vendría bien una relectura.
ResponderEliminarBesotes!!!
Huy, pues a ver si te animas a hacerla. Sin duda, es un libro que ganaría con una relectura porque hay cosas que no entendí, pero ahora mismo no me veo con ánimos
Eliminar¡Hola, Laura! Bueno, veo que tu opinión es algo así como algo intermedio entre Carme y la mía, aunque sí, como dices, yo lo abandoné y mira que me dio rabia, pero es que era incapaz de sentirme atrapada en la lectura.
ResponderEliminarYa sabes que leí muy poco, pero por lo que recuerdo, sí que vi algunas cosas que podrían ser aplicadas a la actualidad, pero tampoco eran muchas. El protagonista me parecía tan frío y todo tan mecánico que no pude conectar con lo que se contaba. Además de lo aburridas que me resultaban muchas explicaciones.
Los haters en las redes son un problema, pero muchos de ellos se escudan en la libertad de expresión para insultar y hacer ofensas graves creyendo que como es una opinión no debe de ser castigada. Yo defiendo la libertad de expresión, pero siempre y cuando se viertan opiniones con respeto. Y ese es el verdadero problema: mucha gente no conoce lo que significa la palabra "respeto".
Viendo lo que dices, menos mal que lo dejé antes de la segunda mitad, ya que me habría costado horrores avanzar.
Pero bueno, al menos tú le has visto varias cosas positivas :-)
¡Saludos! ;-)
Pues sí, mi opinión es intermedia. Y no, no creo que leyeras poco, leíste hasta la mitad XD Y lo bueno es que esa era la mitad interesante xD
EliminarSobre aplicar cosas a la actualidad es que no eran cosas concretas, más bien conceptos, como lo de la modificación del lenguaje, las mentiras del gobierno, la poca participación hoy en día en las urnas, cómo nos dejamos comer la cabeza,...etc.
Jaja, entiendo que no conectaras con ellos, con lo apasionada que eres tú sin duda son muy fríos :P
Y sobre los haters...completamente de acuerdo.
Un saludo distópico,
Laura.
¡Hola, Laura! ^^
ResponderEliminarEscúchame (léeme), que soy un desastre. Yo quería pasarme por aquí cuando publicaras la reseña y... me paso bastante tarde xD En fin, en mi línea.
Poquito que decir, en realidad. A Omaira se le atragantó, mí me encantó y tú lo disfrutaste, pero sin más. Así que sí, tenemos unas opiniones súper polarizadas jajajajajajaja
Como hemos hablado largo y tendido sobre la novela, esto va a ser casi un re-make. Ya sabes que a mí me fascinó como Orwell, en la época que escribió la novela, habló con tanta crudeza sobre el hecho de que parecemos borregos. Hacemos lo que nos dicen, porque "es lo mejor para nosotr@s". Una forma muy clara de decir que hay que pensar porque, joder, no hay que dar nada por sentado. El juego que le saca a cada Ministerio, como te comenté, también me gustó mucho. Eso y la reflexión de que, si no hay vocabulario negativo, no hay forma de tachar algo como "malo", porque sencillamente es "no-bueno".
Como te dije en algún punto de nuestra conversación sobre la novela, siento que de la mitad en adelante no te gustara. A mí el capítulo explicación me sobró pero, comentando el tema, creo que era más un forma de conseguir que todo el mundo lo entendiera. No sé. Eso o quería llenar cincuenta hojas. A saber. El caso, que a mí me dejó flipando el final. Y sí, Laura, esto es una distopía. Cruda, jodida y despiada.
Una reseña genial, pero eso ya lo sabes ;D
¡Un besazo muy pero que muy grande y que pases un maravilloso fin de semana, guapísima! ^^
¡Hola Carme! Pues sí, con la super charla que tuvimos poco queda por añadir...Y sí, tenemos opiniones muy diferentes. He de pasarme por vuestras reseñas de Cumbres borrascosas, pero ya me veo venir la variedad de opiniones...
EliminarUf, qué va, a mí ese capítulo de libro no e gustó. Entiendo que era para asegurarse de que los lectores lo habíamos entendido, pero ¿eso es tratarnos de tontos, no? No sé, y si había en ese capítulo algo a añadir que no hubiera dicho, seguro que había una forma mejor de introducirlo...
En fin, pese a todo, contenta de haberlo leído.
un saludo,
Laura.
Hola!!
ResponderEliminarEste libro me lo leí hace unos años, antes incluso de Los juegos del hambre, Mazerunner, y el resto de novelas que nos presentan como distopías.
Concuerdo contigo que esos libros son totalmente diferentes de lo que realmente es una distopía o al menos como la presentan algunos clásicos. Porque como bien dices los autores se centran más en estructurar la sociedad y ofrecer una crítica del gobierno actual, el capitalismo, opresión, etc.
En las "distopías" actuales le dan más peso a los conflictos amorosos y tenemos como protagonista a un adolescente que debe rebelarse contra el sistema y salvar el mundo.
Si nos ponemos a analizar las viejas distopías el protagonista no es un héroe, vaya los finales incluso están alejados de lo que normalmente solemos leer. Se centran más en una crítica de la sociedad y te dejan pensando.
En el tiempo que leí 1984 me gustó, esa falta de privacidad, el control del gran hermano era escalofriante. Hay otros detalles que se me escapan porque lo leí hace 8 o 7 años y mi memoria no es tan buena.
Curiosamente ahora que mencionas lo de los saltos de escenarios tienes razón, como todavía era una lectora principiante no me fijé en ello, lo cual me hace preguntar ¿qué opinión tendría después de una relectura? mm... Si tan solo no me diera flojera hacer relecturas jaja.
¿Un mundo feliz no lo terminaste? D: deberías intentar darle otra oportunidad, sé que el inicio es denso y desesperante pero el resto vale la pena. Ver el hartazgo de una sociedad que se supone está condicionada para no revelarse, ser monótona y sin aspiraciones. A mí me pareció interesante como condicionaban a los bebés xD e incluso te deja pensando.
Un beso!
Sí, es eso, las distopías juveniles actuales no tienen nada que ver, en este libro el autor en ningún momento se plantea que el protagonista pueda tener éxito, así no funcionaría la crítica. Jaja, entiendo que no te animes por ahora con una relectura, aunque es cierto, estoy segura de que ahora le verías muchas cosas que no le viste en un primer momento.
EliminarEn cuanto a Un mundo feliz...Pues no. No sé, todo era muy raro y la narración densa, lo abandoné a las pocas páginas. Pero ya ves, también abandoné Cumbres borrascosas y ahora lo he leído. Ahora mismo estoy agobiada de tanto clásico, pero puede que dentro de unos años le dé otra oportunidad.
Un saludo,
Laura.
Ufff, este libro...
ResponderEliminarDesgraciadamente para mí, tuve que ver una de las películas primero antes que leer el libro. Eso no me agrada, nunca me ha agradado... pero bueno, no tuve de otra porque fue en la escuela (uh, hace años).
Sin embargo, he leído a Orwell antes y sé a lo que te refieres. Personalmente no me cansa, a mi me agrada la filosofía (yo misma filosofo casi a diario), pero ciertamente llega a centrarse tanto en el mensaje que deja de lado la trama y la vuelve una obligación para el personaje.
Por otro lado, que mal que no pudiste con Un mundo feliz y Naranja mecánica. Soy muy buenos. Supongo que el problema con estos libros es que son complejos a la hora de criticar. Sé que los autores no pueden darle mucho peso a la "aventura" porque se pierde el mensaje, por eso no son libros para todo el mundo. Y personalmente, aunque creo que son esenciales, para mí son de leer uno así cada tanto en tanto porque son pesados.
En fin, ojalá algún día cambies de parecer y los retomes.
Saludos.
Sí, a mí también me gustan los libros con mensaje, que esconden una filosofía dentro y te dejan pensando (te recomiendo los de Eloy Moreno) pero sin duda, necesito una trama bien hilada también, y no que la trama sea una excusa.
EliminarEn cuanto a las otras dos distopías, La naranja mecánica te aseguro que no le daré otra oportunidad, demasiado violenta para mí, pero el de Un mundo feliz, quizás más adelante.
Un saludo,
Laura.
Hola, excelente reseña. A mi también me dejó muchos sentimientos encontrados, cosas que me aterraban que veo que están pasando en mi país, cosas que pensé que no pasarán jamás en la vida, pero también me sentí algo desilucionada por que para mí faltó un poco mas de explicación. El principio de la lectura era muy lenta pero al llegar a 2/3 partes del libro todo pasaba a la velocidad de las letras!
ResponderEliminarPero he de decir que independientemente de la forma escrita, creo que este libro nos dejan en la mente muchos temas que tienen que ser profundizados.
Yo creo que en un futuro lo volveré a releer para ver si puedo captar cosas nuevas que en mi primera lectura se me hayan escapado.
Saludos,
¡Hola! Me alegro de que te haya gustado la reseña y ver que coincidimos en algunos puntos. Sin duda, es un libro muy aplicable a la actualidad, da miedo lo vigente que es, y también creo que si haces una relectura serás capaz de encontrarle matices nuevos, y quizás parte de la información que te falta. Por mi parte, estoy segura de que se me escaparon muchos detalles que notaría en una relectura.
EliminarUn saludo,
Laura.